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Replica del Comité de Empresa de Arriendas a las manifestaciones de Quiros

«Quirós intenta asustar a la plantilla del hospital con su discurso del miedo», indica el comité

 

Los trabajadores afirman que detraer de sus nóminas los pagos por las guardias de 2008 es «una extorsión inadmisible»

 

Arriondas, Ramón DÍAZ, para La Nueva España

 
El enfrentamiento desatado en torno al futuro del Hospital del Oriente se encona cada vez más. La presidenta del comité de empresa, Lola Colunga, arremetió ayer contra el consejero de Salud, Ramón Quirós, al que acusó de utilizar durante su comparecencia del martes en la Junta General del Principado «su habitual discurso de la amenaza y el miedo», en un intento de «amedrentar a la plantilla».

El comité de empresa, tras reunirse ayer, mostró su «profunda desilusión» por lo expresado por Quirós en el Parlamento, durante su comparecencia previa al debate sobre la proposición de ley presentada por el PP para integrar el hospital y la plantilla en el Servicio de Salud del Principado de Asturias (Sespa). El comité de empresa considera «incomprensible» el discurso de las autoridades regionales, sobre todo a la vista de la unanimidad sindical y social en favor de la integración y de la existencia de varios informes jurídicos que señalan que la entrada del hospital en el Sespa y la subrogación de la plantilla son actuaciones perfectamente viables.

El Consejero afirmó en la Junta que si el Sespa se hace cargo de los trabajadores del hospital, éstos quedarían como «laborales indefinidos no fijos». Lola Colunga respondió de forma contundente: los trabajadores del Hospital de Arriondas, digan lo que digan las autoridades regionales, son «laborales fijos». Es un hecho «innegable», y dado que las nóminas se pagan «íntegramente con dinero público», la situación laboral de la plantilla «no puede regirse por el derecho privado», salvo que «se quieran mantener esclavos con dinero público», señaló la presidenta del comité de empresa del hospital. «Afirmar a la vez que el hospital está integrado en el Sespa y que los trabajadores se rigen por el derecho privado es aberrante», añadió.

Lola Colunga lanzó un reto a Quirós: «Si el hospital es privado, que lo diga, y si es público, que no nos eche la culpa de la forma en que nos contrató». La presidenta del comité de empresa subrayó que los trabajadores del centro pasaron pruebas de selección, que incluyeron tests de inteligencia y de conocimientos, pruebas psicológicas y entrevistas. Además, se publicitó la convocatoria. En todo caso, el comité de empresa asegura que los trabajadores nunca han pretendido convertirse en funcionarios, sino que se les reconozca que son personal laboral fijo. «Nuestros contratos son idénticos a los del personal laboral del Hospital Monte Naranco y del Hospital Central», subrayó Colunga.

La presidenta del comité de empresa destacó que si los empleados del Hospital de Arriondas fueran, como pretende Quirós, laborales indefinidos no fijos «eso significaría una situación de contratación irregular por parte de la Administración desde hace diez años».

El comité de empresa, por otro lado, calificó de «extorsión inadmisible» el descuento realizado en las nóminas de los médicos y enfermeras que realizaron guardias en 2008. La gerencia del centro decidió detraer de los sueldos de los empleados el pago que recibieron en enero con motivo de la subida del precio de las guardias del año pasado. Unos pagos que se han hecho efectivos en todos los hospitales del Sespa, pero que en Arriondas supusieron el despido del trabajador que realizó los abonos. Ello pese a que el convenio de homologación establece que toda mejora acordada para los empleados del Sespa será aplicada de forma simultánea en el Hospital del Oriente.

Los trabajadores denunciarán esta situación en el Juzgado, bien como conflicto colectivo, bien como demanda individual.

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