Blogia
La información es la base de tu opción ... y nosotros nunca te la ocultamos.

Semergen considera que se debe proceder a la implantación de modelos de autogestión de los centros sanitarios que tiendan a incrementar la eficiencia

Semergen considera que se debe proceder a la implantación de modelos de autogestión de los centros sanitarios que tiendan a incrementar la eficiencia

Tribuna: Semergen apuesta por la unidad de acción para revitalizar la primaria

El primer nivel y el médico que en él desempeña su labor necesitan más que nunca unidad de acción de las tres sociedades de primaria -Semergen, Semfyc y SEMG-. Semergen apuesta por alzar una sola voz para acabar de una vez con la precariedad laboral que arrastra este nivel, pero sobre todo con el desprestigio social del médico de primaria.

En DIARIO MEDICO por Julio Zarco, Presidente de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen) y Juan Sergio Fernandez, Presidente de Semergen-Andalucía -.

La Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen) ha tenido como objetivo, desde su fundación, aportar y sumar.

Su finalidad ha sido y es defender la atención primaria en general, y la medicina y los médicos de familia (independientemente de la vía formativa por la que se hayan convertido en tales) en particular, y con esas máximas de partida invitamos a todos aquéllos que se quieran sumar a esa iniciativa a andar el camino juntos.

Nuestra apuesta por la sanidad pública es inquebrantable porque consideramos que es uno de los pilares fundamentales del Estado de Bienestar del que nos hemos dotado los españoles y uno de los mayores elementos de equidad en nuestra sociedad. Queremos, como sociedad científica, un primer nivel asistencial de máxima calidad con unos profesionales que tengan como norte la excelencia en su desempeño profesional.

En los últimos años se han conseguido muchos de los objetivos marcados. La universalización de la asistencia es un hecho. Sin embargo, existe en la sociedad cierta inquietud por la situación de la sanidad actual. Los cambios sociales acaecidos en los últimos veinticinco años, el incremento de la edad de la población y el aumento demográfico generado por la inmigración configuran una realidad nosológica diferente. Estos cambios en el modelo de enfermedad deben orientar la estructura sanitaria de España hacia la potenciación de la atención primaria, huyendo del hospitalocentrismo todavía imperante.

Según los resultados de un estudio realizado por la Universidad Pompeu Fabra y el Instituto de Investigación en Atención Primaria Jordi Gol, ni la Administración central ni las regiones apuestan realmente por la primaria (ver DM del 7-V-2009). El dato más relevante de esta aseveración lo constituye el porcentaje del gasto destinado a este nivel en relación con el gasto total en sanidad.

En este sentido, la desigualdad ente comunidades es significativa. Las que más destinan son Ceuta y Melilla (22 por ciento), Extremadura (18,85 por ciento) y Andalucía (16,4 por ciento). En el extremo opuesto se sitúan Galicia (11,9 por ciento), Madrid (11,7 por ciento), Canarias (11,2 por ciento) y Cantabria (11 por ciento).

Ante esta situación, Semergen plantea un cambio de rumbo en los planteamientos de la asistencia sanitaria manteniendo inalterables sus principios básicos. Esta sociedad considera que la atención primaria debe rediseñarse tomando como centro de todo la organización al paciente.

Queda mucho por hacer, sobre todo en lo referido a la accesibilidad, la continuidad y la coordinación de cuidados. Se percibe un clima laboral generalizado de descontento y, sobre todo, de desencuentro con la gestión sanitaria por parte de los profesionales implicados.

Se ha comprobado también que no hay una política de coordinación clara tendente a homologar los salarios.

El protagonismo en el cuidado de la salud de cada uno de los pacientes debe recaer en el médico de primaria con la colaboración del resto de los profesionales sanitarios.

Para alcanzar este objetivo y, como estrategia para abordar la solución de la problemática actual de la primaria, esta sociedad entiende y propone al resto de las sociedades de primaria (Semfyc y SEMG) que se debe:

1. Potenciar la figura del médico de familia como agente de salud para que recupere el prestigio social perdido.

2. Incrementar su capacidad resolutiva, facilitándole su uso y sin restricciones, de todas aquellas técnicas diagnósticas y terapéuticas que en cada momento presenten evidencias a favor de su manejo.

3. Potenciar el desarrollo profesional continuo del médico. En este sentido, Semergen ha puesto en marcha un ambicioso proyecto cuyo objetivo es buscar la excelencia del médico de familia.

4. Fomentar el profesionalismo, prestando una atención de calidad por un profesional con calidad humana y competencial.

5. Alcanzar un nivel retributivo acorde con los niveles de responsabilidad que asume el médico de primaria.

Por este motivo, Semergen considera que se debe proceder a la implantación de modelos de autogestión de los centros sanitarios que tiendan a incrementar la eficiencia. La descentralización debe orientarse tanto hacia la consecución de objetivos en salud como a alcanzar la satisfacción de todos los actores que comparten escenario en el primer nivel asistencial.

Cambio de rumbo
Consideramos que el modelo asistencial debe dirigirse a satisfacer las necesidades y expectativas de los pacientes y de los profesionales.

Del mismo modo, creemos que el grado de satisfacción del médico que desarrolle su actividad en un centro de salud será mayor siempre que se sienta reconocido y valorado tanto por las autoridades sanitarias como por la población a la que asiste.

Si esta filosofía no impregna, no ya el futuro, sino el presente de la atención primaria, seguiremos asistiendo año tras año al drama de observar cómo quedan vacantes plazas de formación posgraduada de Medicina Familiar y Comunitaria, y cómo las que se cubren son solicitadas, mayoritariamente, por los aspirantes con puntuaciones más bajas.

En este empeño Semergen hizo una apuesta atrevida, en su momento no bien aceptada por todos, con la creación de las cátedras de Familia en las Facultades de Medicina de Granada, Extremadura y Alcalá de Henares, con el objetivo de dar a conocer a los estudiantes la especialidad.

Estas cátedras, junto con otras existentes en España, han sido las autoras de los contenidos de la asignatura de Medicina de Familia y de las prácticas tuteladas de sexto curso que los nuevos planes de estudio tienen que contemplar ahora con Bolonia.

En la consecución de este objetivo ha existido una ejemplar estrategia de unidad de acción que se hace imprescindible en estos momentos para abordar, con una sola voz, la problemática del primer nivel asistencial.

A día de hoy, aunque se ha avanzado mucho, siguen latentes problemas que exigen un abordaje inmediato y particular en cada una de las comunidades autónomas y donde la unidad de acción que desde la sociedad científica propugnamos se hace imprescindible. De lo contrario, seguiremos lamentándonos de lo mismo continuamente.

Primaria exige unión
Tenemos la obligación moral y ética de entregar a las futuras generaciones de médicos de familia la casa ordenada. Los médicos jóvenes no entienden que ante la problemática tan grave que afecta a la primaria no se tenga altura de miras y no se planteen soluciones consensuadas entre todos los actores, máxime en un momento donde tenemos ejemplos recientes de unidad de acción entre asociaciones profesionales con importantes diferencias ideológicas en la concepción de su profesión.

Esta situación afortunadamente no se da entre las sociedades de primaria, que han sido capaces de hablar con una sola voz en la defensa de su profesión, iniciando un camino sin retorno en la defensa de estos principios.

Ahora más que nunca se hace imprescindible recordar el lema del I Congreso Nacional de Semergen, de 1972, que se celebró en Castellón de la Plana y que decía: Congreso de la unidad, de la sinceridad y de la esperanza.

Se pueden iniciar todo tipo de contactos, pero se hace imprescindible generar un ambiente de confianza y hoy por hoy, la confianza requiere sinceridad. Para aportarla tendremos que hacer un gran esfuerzo, y partir con una base de transparencia y libertad.

0 comentarios