Próxima cita: marcha a pie, desde La Felguera a Oviedo, para el próximo 5 de mayo
La plantilla de Alas seguirá movilizándose a pesar de las advertencias de Industria
Los trabajadores afirman que Torre no les informó de los contactos con firmas como Valindus y que la protesta es el único medio para defender sus empleos
Los sindicatos temen que los inversores estén esperando a los despidos para comprar la aluminera
Langreo, L. M. D., en La Nueva España
La plantilla de Alas Aluminium seguirá adelante con sus movilizaciones pese a las advertencias del Consejero de Industria, Graciano Torre, que afirmó que la continuidad de las protestas podría dificultar las negociaciones con los posibles compradores de la aluminera. Desde el comité de empresa se explicó que Industria «en ningún momento ha querido explicarnos cómo se desarrollaban los contactos con las empresas y sin información es difícil que los trabajadores dejen de hacer lo único que ahora pueden hacer, que es movilizarse para defender su empleo».
El portavoz del comité de empresa de Alas Aluminium, José López, afirmó que los trabajadores no tienen previsto interrumpir su programa de movilizaciones pese a las advertencias del consejero de Industria, Graciano Torre, que afirmó que las protestas dificultan la posibilidad de atraer un inversor que se haga con la aluminera de Ciaño, «tal y como ocurrió» con la francesa Valindus. López aseveró que Torre lanza un mensaje «contradictorio», porque por un lado habla de «negociaciones con empresas, e incluso dijo que había avances con una de ellas, la que ya ha dicho que no; pero por otra parte se niega a reunirse con nosotros para explicar lo que está haciendo. Podría haber un diálogo y convencernos de que se aparcasen las protestas. Pero no lo hay».
Desde el comité de empresa se anunció además que los trabajadores están preparando una marcha a pie, desde La Felguera a Oviedo, para el próximo 5 de mayo. Esta manifestación, que acabará ante la Junta General del Principado, tiene como objetivo presentar las, hasta el momento, 14.000 firmas de apoyo que ha recogido la plantilla de Alas. A lo largo de esta próxima semana los trabajadores, tal y como indicó José López, seguirán recogiendo apoyos en los distintos mercados semanales de las Cuencas, donde también repartirán pasquines informativos de la situación que atraviesa la empresa, en concurso de acreedores por los 60 millones de euros de deuda acumulados en menos de seis años pese a haber recibido al menos 13 millones en ayudas de los fondos mineros. Los administradores concursales ya han confirmado además que si no se encuentra un inversor antes de junio, toda la plantilla, unas 270 personas, será despedidas ese mes. En relación a la negociación obligatoria de este expediente de extinción de empleo, José López indicó que «pensamos que vamos a tener las primeras reuniones en unos días, posiblemente tras la Semana Santa».
Los sindicatos temen que los inversores estén esperando a los despidos para comprar la aluminera
Los sindicatos UGT y CC OO del Nalón temen que tras la renuncia del grupo francés Valindus por motivos de «conflictividad social» se esconda la intención de la empresa de hacerse con Alas Aluminium una vez que toda la plantilla haya sido despedida por los administradores concursales, algo que puede ocurrir a partir del próximo mes de junio.
José Manuel Camporro, secretario general de UGT del Nalón, señaló que las justificaciones de los franceses para retirarse de las negociaciones por Alas pueden deberse a su intención «de hacer que baje el valor de la empresa, o hacerse con ella con menos cargas, esperando a que se ejecute el expediente de extinción de empleo» de los 270 trabajadores. «Al haber una fecha límite para la continuidad de la plantilla puede ser que lo que se quiera es hacerse con la planta, sin más. Lo de la conflictividad suena a excusa», señaló Camporro.
El secretario general de CC OO del Nalón, José Manuel Zapico, apuntó que esta es «una posibilidad que tiene su lógica, porque les sería más fácil hacerse con la empresa al tener que hacer frente a menos costes». Pese a todo, Zapico rememoró el caso de Venturo XXI, donde «ni con la liquidación de la empresa se ha logrado atraer a nuevos inversores».
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