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Entrevista al Consejero de Hacienda y Sector Público…

Entrevista al Consejero de Hacienda y Sector Público…

«El ahorro en la RTPA permitirá afrontar la apertura de los nuevos hospitales»

Ramón del Riego Consejero de Hacienda y Sector Público: «Estamos curando a un enfermo (refiriéndose a las finanzas públicas asturianas) y eso tiene su coste; no hay recursos para cosas extra, salvo para atender al enfermo»

09.10.2011 - ANDRÉS SUÁREZ, OVIEDO, en El Comercio.

Sobre la alargada mesa de reuniones del despacho de Ramón del Riego aparecen depositados, apilados en cuidadosos montones, ingentes cantidades de documentos plagados de porcentajes y números. Al consejero de Hacienda y Sector Público se le acumula el trabajo: acaba de ratificarse un plan de ajuste del gasto que supera los 150 millones de euros y tiene por delante la presentación de los presupuestos de 2012, en un contexto económico difícil y sin mayoría en la Junta General que garantice su aprobación. Esperan tiempos complicados al responsable de las finanzas regionales, que atiende a EL COMERCIO en su primera entrevista tras reunirse con varios alcaldes, también inquietos por lo delicado del momento.

-Tijeretazo de 156,8 millones. ¿Suficiente para llegar a final de año o habrá otro en breve?

-De momento no se puede saber, hay que ver la evolución de los ingresos. La previsión del Gobierno anterior era muy optimista y hay cosas que no son realizables. Además, estamos entrando en un segundo momento de parón económico. A día de hoy, estimamos que con esos 156,8 millones podemos atender una parte muy importante de los ingresos que se habían sobrepresupuestado y que no podremos obtener.

-A día de hoy, pero ¿mañana?

-¿Qué pasará en octubre, noviembre y diciembre? No se puede saber.

-Se lo pregunto porque la oposición y los sindicatos creen que el Gobierno actúa por interés electoral y que será tras el 20-N cuando aplique el verdadero recorte.

-En las previsiones de esta consejería no existen, de momento, planteamientos de un segundo recorte. Sí puedo decir que, si lo hubiera, tampoco afectará a la sanidad, la educación y los servicios sociales.

-Justifican el recorte en la necesidad de arreglar el «desaguisado» socialista. El PSOE, por su parte, afirma que deja unas cuentas saneadas. Algo no encaja.

-El PSOE nunca va a reconocer sus responsabilidades. En España han hecho una chapuza económica pero dicen que la crisis viene de fuera. En Asturias han cometido un desaguisado pero aseguran que la herencia no es tan mala. Los datos están ahí. Teníamos una capacidad de déficit que quedó completamente absorbida el 30 de junio, lo que obliga a ser muy cuidadosos en el gasto. Si a eso le añadimos que los ingresos caen, el recorte está más que justificado. Y a ello hay que añadir dos factores.

-Primero.

-El endeudamiento de la junta de saneamiento, que, como detectó el Ministerio de Economía, se había escondido en lugar de consolidarlo en las cuentas regionales. Hemos tenido que pasar la vergüenza de que Madrid nos llamase la atención. Así, lo que podría haber sido un ajuste asimilable, se convierte en uno más sacrificado para absorber el gasto que suponen las inversiones de la junta de saneamiento. El ajuste es más duro por la herencia recibida.

-Y segundo.

-La segunda prueba de la ingeniería financiera del PSOE son los 211 millones en facturas escondidas en los cajones, dinero que se ocultó en las cuentas regionales y, por tanto, tampoco consta en las nacionales y en las de la UE. El asunto trasciende de Asturias. Las cuentas del Estado tienen un agujero de 211 millones por la actuación del anterior Ejecutivo.

-Hecho el ajuste, el Gobierno sostiene que ni la educación ni la política social sufrirán el efecto de la tijera. ¿Por qué entonces se quitan seis millones del primer capítulo y 12 del segundo? ¿No merma eso la calidad del servicio?

-Hay partidas de gasto directamente afectadas a los servicios que presta una consejería, y otras asociadas de forma indirecta.

-Explíquese.

-Si una consejería reduce su número de coches, de móviles o la partida para dietas, entre otras cosas, se consigue barrer esos importes y alcanzar una cifra de ahorro.

-¿Es lo que se ha hecho aquí? ¿No se tocan los servicios?

-No. En el Sespa no se ha hecho ninguna retención de crédito.

-Pues IU, que gestionó Bienestar Social, augura menos vivienda pública y un impulso al sector privado en la atención a mayores.

-Es muy demagógico, no se ha reducido el presupuesto asistencial. Seguirá impulsándose vivienda protegida y apostando por la mejora de la asistencia a los ciudadanos.

Inversiones

-Uno de los ajustes más fuertes viene de reprogramar obras. Cada vez que un Gobierno habla de 'reprogramar', es para echarse a temblar: ahí están las autovías y el AVE. ¿Por qué ahora será diferente?

-Es verdad que hay partidas de inversión que no se gastarán en los dos últimos meses del año y sí se ejecutarán a partir de enero de 2012. Si el Gobierno anterior no hubiera gastado de forma irresponsable, el ajuste sería menor y muchas de esas obras no se habrían visto afectadas.

-Pero si no hay dinero para 2011 y el escenario para 2012 es peor, ¿de dónde saldrán los fondos para reactivar esas obras?

-Ahora gestionamos una herencia que no es nuestra. En 2012 habrá un presupuesto distinto, planificado por nosotros en base a la austeridad y la eficiencia. Ello permitirá, sin afectar a los servicios básicos, reducir partidas inútiles y destinar los remanentes a inversión productiva. Eso permitirá acabar las obras en plazo.

-Se reprograman obras, se suprime la transferencia a la RTPA... ¿No son medidas que, al final, acaban provocando más paro?

-Siempre que se corta el gasto se corta la producción, es así, y cualquier medida de recorte puede provocar un efecto inmediato en el empleo.

-Pero...

-Pero no es culpa nuestra. No somos nosotros quienes en estos años se han gastado el dinero alegremente y luego decidieron obligarnos a cumplir un objetivo de estabilidad en 2011. Quienes se gastaron el dinero alegremente fueron los otros, y ahora esos otros, que ven que el agua les llega al cuello, para no aparecer como los malos de la película se dan latigazos en la espalda y fijan límites para que esto no vuelva a pasar. Nosotros heredamos la penitencia pero ellos se quedan con el pecado. Dicho esto, cualquier administración que recorta sus gastos puede encontrarse con una menor producción y un menor índice de empleo.

-¿Será lo que suceda aquí?

-No lo sabemos. Desconozco, por ejemplo, si las empresas que trabajan para la RTPA tienen otras actividades. O si todas esas personas trabajan en Asturias. En todo caso, si tenemos menos recursos, a la vez estamos dando cancha al sector privado para que pueda generar un mayor volumen de actividad y empleo.

-Cascos dijo que tomar medidas drásticas ahora es imprescindible para volver a la senda del crecimiento y el empleo. Suena duro.

-Es así. Y en cuanto al plan de contención del gasto, salvo el revuelo mediático que está provocando la dirección de la RTPA, los ciudadanos no se darán cuenta de nada.

-La RTPA. ¿Por qué una medida tan contundente?

-Porque a los asturianos les cuesta lo mismo cada año la RTPA que cualquiera de los hospitales comarcales: Cangas, Jarrio, Arriondas... El asunto no admite dudas. Hay políticas esenciales y otras que no lo son. Es triste pero es así.

-¿Quiere decir que mantener la RTPA es incompatible con unos servicios públicos de calidad?

-El anterior Gobierno ya superó el límite de déficit y no podemos seguir gastando. Hay que elegir. Las políticas restrictivas no son agradables, pero los causantes de esas políticas restrictivas ejercen ahora de demagogos. Este Gobierno no ha generado el problema, lo que hace es curar al enfermo y eso tiene su coste. Entre otras cosas, que no haya recursos extra, salvo para cuidar al enfermo.

-El otro día, hablando de la RTPA y los recortes, dijo que no se cerrarán hospitales. ¿No es un exceso de alarmismo?

-Es que es así. En Cataluña se cierran hospitales, en muchas otras comunidades cierran plantas enteras. Aquí no se han tomado esas medidas. Es más, tenemos que abrir en el corto plazo dos nuevos hospitales.

-HUCA y Álvarez Buylla (Mieres).

-Exacto, con los costes que eso conlleva. Mientras los demás, para ahorrar, recortan y cierran, aquí nos enfrentamos al reto de mantener el servicio de salud de los asturianos e incluso ampliarlo con nuevos equipamientos. También eso se ha tenido en cuenta al planificar la contención del gasto. El sacrificio que se comete en determinadas partidas, como la RTPA, no es gratuito. Es un ahorro para, entre otras cosas, acometer la apertura de esos nuevos centros.

-La decisión sobre la RTPA la aboca, según sus gestores, al cierre. ¿Cuál es su futuro?

-El Gobierno ha recortado una transferencia. A partir de ahí, el futuro del ente queda en manos de la Junta.

Programa electoral

-¿Cuál es el plan del Gobierno?

-No hay un plan. Sí constaba en el programa de Foro la posibilidad de que el ente fuese gestionado indirectamente...

-¿Gestión indirecta es una forma más dulce de decir privatización?

-No, la gestión indirecta es un sistema previsto por la ley de contratos que tiene varias manifestaciones y miles de servicios se gestionan así. A todos nos suenan los términos 'arrendamiento' o 'concesión'. Lo que se pretende para el ente es una fórmula de gestión más competitiva y que no cueste tanto dinero a los asturianos. En los últimos ejercicios se vienen destinando más de 35 millones al año. Mientras se pudo sostener, vale. A día de hoy, nuestras limitaciones presupuestarias lo impiden. También quiero decir que uno de los motivos por los que existe ese cajón de 211 millones en facturas opacas es, precisamente, los 40 millones que cuesta al año la televisión autonómica.

-El asunto irá a los tribunales. El ente iniciará acciones legales.

-Nos hemos movido en el marco de la legalidad. Hay una previsión en la ley de presupuestos que señala que el Ejecutivo puede establecer, en los casos en que ello resulte justificado, retenciones de crédito por razones de equilibrio presupuestario. Es lo que hemos hecho. Y no es una decisión de oportunidad, estamos obligados por las circunstancias económicas actuales, generadas por otros gobiernos. En cuanto al ejercicio de acciones legales, esa entidad es libre de hacer cuanto quiera y lo respetamos. Pero no compartimos que el Gobierno no pueda tomar la decisión adoptada por razones de ilegalidad, cuando está expresamente habilitado por la citada ley. Y sobre esto no cabe ninguna duda.

-¿Hubo ajustes a la TPA previos al Consejo de Gobierno del martes?

-La retención de la transferencia se decidió en ese Consejo.

-Se lo digo porque desde la RTPA se dice que hubo recortes previos que han impedido pagar nóminas.

-Es verdad que en septiembre no se les hizo ninguna transferencia, pero el ente sí pagó las nóminas porque tenía disponibilidad en sus cuentas. Luego no existe ninguna responsabilidad del Principado aquí; esas nóminas se han cobrado.

-Eso entronca con otro asunto: la nueva gestión del sector público. Ahora se transfiere a las entidades sólo el dinero que necesitan en cada momento. ¿Equivale eso a dejarles sin liquidez?

-No. Tenemos un sector público con decenas de entidades. Y resulta que en esta casa, desde donde se hacen los cobros y se ordenan los pagos, se desconocían las cuentas que esas entidades tenían abiertas, con quién y en qué cuantía. Durante mucho tiempo se ha transferido a esas entidades dinero que no necesitaban. Tenían un excedente de tesorería, lo cobraban y lo aplicaban a sus ingresos y gastos. Mientras, el Principado tenía que acudir a entidades de crédito y pagar intereses. La gestión del sector público estaba marcada por un descontrol tremendo. Eso ha cambiado.

¿Impagos?

-Hablemos de la polémica de los impagos. El Gobierno asegura que paga a entidades públicas, ayuntamientos y proveedores en plazo, incluso más rápido que el anterior. Eso no encaja con lo que dice Fade ni con las airadas protestas de los ayuntamientos.

-Fade envió una carta de una asociación de medios que se quejaba de impagos. Esos medios no son proveedores de esta consejería y esa carta debería haberse enviado a la RTPA. Es palmario que los administradores de la televisión autonómica sólo buscan hacer ruido. En todo caso, debe quedar claro que no hay ningún impago. Únicamente se retiene crédito a la RTPA y eso es una medida de control presupuestario.

-¿Y las quejas de los proveedores de la sanidad?

-Vienen cobrando muy tarde y ahora dicen que nosotros también pagamos tarde. ¿Qué esperaban? ¿Qué llegásemos con la varita mágica y paguemos al día siguiente? No es posible, aunque ya hemos rebajado dos semanas el plazo.

-Los alcaldes dicen estar casi al límite, en parte por culpa del Gobierno regional.

-Es indignante que vayamos a cumplir los mismos plazos de pago que el anterior Gobierno y semanas antes se nos diga que no cumplimos. No hay impagos ni retrasos. Y, en todo caso, una eventual demora sería culpa de los ayuntamientos, porque son ellos los que deben cumplir un procedimiento, proponer unos importes, aprobar una propuesta de convenio, remitirlo... En materia de servicios sociales y centros de cero a tres años hay varios ayuntamientos que aún no han remitido el convenio. Quieren hacer pasar al penitente por pecador. Si algún ayuntamiento a final de año no ha cobrado lo que le corresponde no será culpa del Principado, sino porque no ha presentado el pertinente convenio.

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