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Cuando los recortes empiezan a tener la correspondiente identificación de necesidades que no se atenderán…

Cuando los recortes empiezan a tener la correspondiente identificación de necesidades que no se atenderán…

Las ayudas a 25.500 asturianos peligran por el recorte de Rajoy

El tijeretazo presupuestario afectará directamente a la dependencia, al plan de servicios sociales y a las becas al estudio

El Principado deberá hacer un esfuerzo extra para suplir las carencias

09/04/2012, L. Fernández / P. Zariquiegui, Oviedo, en La Voz de Asturias.

El recorte presupuestario anunciado por Rajoy dificultará en Asturias el acceso a ayudas sociales a cerca de 25.500 asturianos. Son mayoritariamente personas que se benefician de la ley de dependencia, prestaciones sociales básicas o becas de estudios.

La estimación, realizada por este periódico, incluye el grueso del tijeretazo social anunciado por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, durante la presentación de los presupuestos generales del Estado para este año. El recorte se ceba, básicamente, en la ley de dependencia, que ya había sufrido una ralentización previa en su desarrollo, en el plan concertado de servicios sociales, en la práctica herido de muerte, y en las becas y ayudas al estudio, que sufren un grave recorte.

De las dos grandes áreas más afectadas, servicios sociales y educación, la primera es la que se lleva la peor parte. En Asturias, más de 100.000 personas subsisten gracias al sistema de prestaciones sociales. La financiación procede mayoritariamente de la comunidad autónoma, pero los fondos aportados por el Estado son muy importantes, más si cabe, en un contexto de crisis como la actual.

El Estado tiene previsto recortar 8,1 millones de euros de su aportación a Asturias para financiar la ley de dependencia. La traslación de este ajuste al número de personas afectadas no es sencilla. La Asociación Estatal de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales ha echado cuentas. Su presidente, José Manuel Ramírez, apunta que la reducción de más de ocho millones de fondos del Estado significa, en la práctica, que las algo más de 6.000 personas que se encuentran en lista de espera - con derecho reconocido pero sin recibir prestaciones - no podrán acceder a las ayudas. Ramírez añade además que el tijeretazo de Rajoy obligará a apearse del sistema de protección a cerca de un millar de los asturianos que ya reciben las prestaciones sociales o económicas. En el Principado, casi 14.000 personas se benefician de los derechos que reconoce la ley de dependencia.

Noemí Martín, ex consejera de Bienestar Social, es algo más cauta. La diputada electa de Izquierda Unida recuerda que la ley de dependencia se financia a través de una vía doble: el nivel mínimo, que se otorga por cada persona dependiente, que ya había sido congelado, y el nivel acordado, destinado a costear recursos e infraestructuras. El ajuste de Rajoy afecta ahora al nivel acordado. Martín subraya que, obviamente, la imposibilidad de abrir nuevos centros de día o residencias tiene un efecto directo, aunque difícil de cuantificar, sobre las personas en situación de dependencia. La diputada de IU considera que el nuevo tijeretazo de Rajoy viene a herir de muerte al sistema tal y como lo conocemos.

No es la dependencia la única afectada por los recortes. El plan concertado de servicios sociales también está tocado y hundido. El programa, financiado en teoría a partes iguales entre el Estado, la comunidad y los ayuntamientos, cubre, con cerca de 40 millones de euros, las necesidades sociales básicas de cerca de 100.000 asturianos. El ministerio, que hasta ahora aportaba menos de un 10% de la financiación, no tiene previsto realizar asignación alguna en sus presupuestos. La consecuencia más plausible es que 10.000 asturianos, el 10% de los beneficiarios, tengan dificultades para seguir percibiendo las ayudas, salvo que la comunidad y los ayuntamientos, con enormes problemas de financiación, hagan un esfuerzo extra. Otros programas menores en cuantía pero cualitativamente importantes también sufrirán los recortes, es el caso, del plan gitano o del plan de inmigración, que recibían algunas aportaciones estatales.

Ayudas al estudio

Más allá de las prestaciones sociales, los recortes de Rajoy inciden directamente también sobre la educación. Quienes más lo sufrirán son los alumnos que cursan estudios gracias a las becas. Según los últimos datos facilitados por el Ministerio de Educación, el Estado aportaba 23 millones de euros al año que servían para ayudar a 76.000 estudiantes en el Principado. El recorte presupuestario previsto, estimado en 2,5 millones, supone en la práctica que más de 8.300 alumnos verán peligrar su acceso a las becas o verán reducidas sus cuantías.

El tijeretazo del Gobierno popular afecta además, y de forma importante, a la conciliación familiar. El Ejecutivo central ha decidido dejar de aportar fondos a la red de escuelas infantiles de 0 a 3 años. El Principado tenía previsto abrir siete nuevas escuelas en cuatro concejos, que de momento peligran. Estas guarderías infantiles contaban con una estimación inicial de 180 plazas. El ajuste, más allá de los números, relega también el uso de las tecnologías de la información en el aula y de los planes de atención a la diversidad educativa.

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