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Hoy se cumplen 64 días de huelga…

Hoy se cumplen 64 días de huelga…

Los problemas económicos fuerzan el fin de la huelga minera

Los mineros aragoneses volverán el próximo miércoles al trabajo después de 65 días de inactividad en contra de los recortes del Gobierno al sector del carbón

Foto: Mineros aragoneses, en una de las marchas que protagonizaron en su región.

EFE, Zaragoza.

Los mineros aragoneses volverán a la actividad el próximo miércoles, 1 de agosto, después de 65 días de huelga y numerosas movilizaciones con las que han querido protestar y rechazar los recortes anunciados por el Gobierno de Mariano Rajoy en las ayudas al sector. Así se ha decidido hoy en una asamblea celebrada en la localidad turolense de Andorra, a la que han asistido unas trescientas personas y en la que se ha decidido, por mayoría, volver a la actividad el 1 de agosto, ha explicado a Efe, Antonio Herrero, de CCOO.

La decisión se ha adoptado ante los problemas económicos que están sufriendo las familias mineras y también porque agosto es un mes inhábil en la política, ha dicho el dirigente de CCOO, al tiempo que ha dejado claro que no se han desconvocado las movilizaciones. Así, van a continuar con las "rutas miner", van a seguir celebrando reuniones con los grupos parlamentarios y volverán a pedir al Gobierno de Aragón que, si es posible, presione más al central para buscar una solución a esta situación.

A la espera del plan de Rudi

Y en función de cómo se desarrolle la reunión de la Comisión de Seguimiento del Plan del Carbón prevista para el próximo martes y cómo se desarrollen los acontecimientos en el mes de agosto volverán a la huelga en septiembre o no. Pero esa será una decisión que se tomará en otra asamblea de trabajadores que se celebrará a principios de septiembre, ha insistido Herrero, quien ha reconocido que ahora tienen la vista puesta en la reunión del martes.

Están a la espera de ver qué cauces plantea el Gobierno para las empresas con dificultades y cómo se presenta el plan del carbón hasta 2018, además de los detalles del plan de reactivación de las comarcas mineras anunciado por el Gobierno de Luisa Fernanda Rudi.

Los mineros de Aragón dejan la huelga y vuelven a los pozos el próximo miércoles

Los trabajadores ratifican la decisión en una asamblea

CC OO de Asturias considera un error abandonar el paro antes de la reunión con Industria

Mieres del Camino, Agencias / A. VELASCO

Los mineros aragoneses han decidido, este domingo en una reunión en Andorra, desconvocar el miércoles, 1 de agosto, la huelga con la que llevan 63 días. La vuelta al trabajo se ha decidido dos días antes de que los sindicatos y la patronal se reúnan en Madrid con los responsables del Ministerio de Industria. Por ello, desde la Federación de Industria de CC OO en Asturias consideran que tomar la decisión de levantar la huelga antes de que se produzca ese encuentro «es un error».

La vuelta al trabajo el próximo uno de agosto se decidió ayer en una asamblea celebrada en la localidad turolense de Andorra, a la que han asistido unas trescientas personas y en la que se ha decidido, por mayoría, volver a la actividad. El responsable del sector de la minería de FITAG-UGT en Aragón, Aurelio Rodrigo, explicó que el motivo de la conclusión de la huelga ha sido «la esperanza de llegar a algún acuerdo con el Ministerio de Industria, Turismo y Energía». De esta forma, el responsable sindical indicó que «una de las peticiones» que tenían los mineros era que se convocasen reuniones para negociar. Por ello, y ante la esperanza de que el martes «se marque un calendario de reuniones y se continúen con las negociaciones» se ha decidido dejar el paro.

En cualquier caso, el responsable del sector de la minería de FITAG de UGT de Aragón advirtió de que «todavía no se ha desconvocado el calendario de movilizaciones», aunque de todas formas esperan hacerlo «conforme avance el diálogo con el Ministerio».

Mientras, la secretaria general de CC OO en Andorra (Teruel), María Ángeles Manzano, indicó que otra de las razones para desconvocar la huelga ha sido que el mes de agosto es «prácticamente inhábil». «Llevan 63 días de huelga, es más que suficiente, y la historia tiene que continuar, las movilizaciones siguen, pero la huelga no», aseguró Manzano.

Antonio Herrero, también responsable de CC OO en Aragón, indicó que en la decisión también han pesado «los problemas económicos que están sufriendo las familias mineras». En todo caso, no descarta volver a los paros. Por ello, todo dependerá del desarrollo de la reunión entre sindicatos, patronal e Industria prevista para el próximo martes y también de cómo se desarrollen los acontecimientos en el mes de agosto. En el caso de que no haya una salida satisfactoria, los mineros aragoneses podría volverán a la huelga en septiembre. En todo caso, la decisión se tomará ya en septiembre, en una nueva asamblea.

Esta postura de los mineros de Teruel no ha caído del todo bien en Asturias. Maximino García, secretario general de la Federación de Industria de CC OO en Asturias, aseguró a este diario que la decisión de levantar la huelga en este momento «es un error». «Nosotros creemos que tomar cualquier decisión antes de saber lo que ocurre el martes es ilógico», aseguró el responsable de CC OO, que precisamente hoy presidirá la asamblea de afiliados que los mineros asturianos de este sindicato celebrarán en Oviedo.

Una asamblea en la que según confirmó el propio García no se tomarán decisiones como la de Aragón. «Vamos a analizar el conflicto, ver hacia donde se puede llevar la movilización en el caso de que no haya acuerdos, y ver también hasta donde quieren llegar los afiliados para afrontar la reunión con el Ministerio de Industria», aseguró el responsable de CC OO. El sindicato, en todo caso, tiene previsto celebrar una nueva asamblea el martes, por la tarde, una vez que se conozca el contenido de las conversaciones mantenidas por la mañana con Industria, y ahí, sí, ya se tomarían decisiones sobre qué hacer con los paros y sobre si continuarán las protestas.

Los mineros de Aragón no son los únicos que volverán al tajo esta semana. Los economatos de la empresa Hunosa volverán a abrir la próxima semana. Los trabajadores de estos centros, que son gestionados por la empresa Lacera, decidieron en una asamblea celebrada el viernes en Sama abandonar la huelga indefinida y retornar a sus puestos de trabajo.

El PP de Castilla y León reconoce «discrepancias claras» con el Gobierno

Valladolid, Agencias

El secretario regional del PP en Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, asegura ayer que si bien «no hay tensión entre el Gobierno y la Junta», si hay «discrepancias claras».

El secretario regional del PP asegura que «el Gobierno podría haber explicado mejor los recortes a la minería del carbón» y afirma «si uno escucha a lo mineros se da cuenta de que tienen parte de razón. Si escucha al ciudadano de la calle dice: yo también quiero una subvención para mantener mi negocio».

«Es una incógnita difícil de resolver, es una situación complicada», sentencia en relación con la minería del carbón, cuya problemática atribuye, como muchos miembros de su partido, al Gobierno socialista. Por ello, reclamó también un nuevo plan del carbón hasta 2018.

La minería, una batalla de cifras

El Gobierno asegura que el recorte en el sector es del 39%, y los sindicatos y los empresarios afirman que las ayudas caen en realidad un 64%

Mieres del Camino, Pablo CASTAÑO

Según un estudio científico publicado en el último número de la prestigiosa revista «Science», un grupo de hongos puso fin a la era del carbón hace ya 300 millones de años, ya que estos organismos desarrollaron un sistema para descomponer eficazmente la enorme biomasa vegetal que se acumuló en la tierra durante la era del Carbonífero. Hoy sigue extrayéndose ese carbón de las entrañas de la tierra, aunque en España la actividad tiene los días contados. No hacen falta estudios científicos para llegar a la conclusión que la supervivencia del sector es una cuestión de cifras, de dinero.

Más o menos ayudas públicas para tratar de igualar los costes de producción al precio de mercado del mineral suponen el mantenimiento o el cierre de las explotaciones y de ahí la guerra de cifras que mantienen las partes del conflicto. Desde la patronal Carbunión, los sindicatos mineros y el Gobierno del Principado de Asturias se destaca que el Gobierno ha recortado las ayudas a la extracción de carbón en un 64% en los presupuestos de 2012 y que ello conduce al cierre inmediato de la minas. Desde el Gobierno central del PP se afirma que el recorte en el plan de la minería es del 39%, en sintonía con el 32% del ajuste global del Ministerio de Industria, uno de los más afectados por el tijeretazo, y que no supone el fin del sector.

Pese a la disparidad de las cifras, todas son correctas, lo que cambia es el foco de atención. Carbunión, sindicatos y Principado se centran únicamente en las ayudas a la extracción de carbón, mientras que los dirigentes del PP aluden al total de las ayudas del plan de la minería, que incluyen además de las prejubilaciones, los fondos para proyectos de infraestructuras en las comarcas mineras, las ayudas de formación (las conocidas como becas mineras) y las subvenciones para nuevos proyectos empresariales que contribuyan a reactivar las Cuencas.

El argumentario que maneja el PP y que repiten una y otra vez sus dirigentes, con el Ministro de Industria, José Manuel Soria, a la cabeza, incide en que el recorte real del presupuesto del plan de la minería en 2012 es de 422 millones de euros, al pasar de 1.078 a 656 millones de euros. Esto supone un descenso del 39,1% «y no de más del 60% como dicen los sindicatos y la patronal», destacan desde el PP, que también argumentan que el de la minería es el sector que más fondos públicos recibirá del Ministerio de Industria en 2012. Además, apuntan que el Ministerio no ha tocado dentro del recorte la partida de las prejubilaciones, que está en 326 millones de euros, «dado su componente social».

El resto de partidas del plan de la minería sí han sufrido recortes que suman 422 millones. Los fondos para infraestructuras pasan de 289 a 101 millones, las ayudas a proyectos empresariales pasan de 120 a 39 millones de euros, las ayudas a la formación de 25 a 2 millones de euros y las ayudas a empresas mineras, donde se centra el grueso de la polémica, pasan de 309 a 186 millones de euros. Ese último tijeretazo es del 38,8%, similar al global del plan de la minería, pero en realidad es mayor porque con los 186 millones de euros presupuestados para 2012 también hay que pagar las ayudas del último trimestre de 2011, que el anterior Gobierno del PSOE dejó sin abonar, y que superan los 75 millones de euros. Con lo cual el dinero disponible para las ayudas a las empresas mineras en 2012 es de 111 millones de euros y el recorte con respecto al año anterior es del 64%.

Ese tijeretazo del 64% es el que ha llevado a decenas de mineros a encerrarse en explotaciones y edificios públicos, a cortar un día sí y otro también carreteras y líneas de ferrocarril y a iniciar una gran marcha reivindicativa a pie hasta Madrid. Ese es el 64% de recorte que denuncian la patronal Carbunión, los sindicatos mineros y el Gobierno del Principado de Asturias, que consideran que conduce al cierre la minería.

El argumentario de esta otra parte del conflicto también es reiterativo. Destacan que el Gobierno está incumpliendo el plan del carbón 206-2012, firmado por Gobierno, sindicatos y empresas y que la Comisión Europea impuso en diciembre de 2010 (entonces gobernaba en España el PSOE) el cese de ayudas al carbón en 2018, con un ritmo descendente, que partía en España de los 301,5 millones de 2011 y que tenía que ser de 226,1 en 2013 (el 25 % de reducción), de 180 en 2015 (40 %), de 120,6 en 2016 (60 %) y de 75,3 en 2017 (75 %). Los Presupuestos para 2012 fijan las ayudas en 186 millones, y a ellas hay que quitar 75 ya abonados en marzo que corresponden al último trimestre de 2011, con lo que quedan en 111 millones para 2012, unos niveles cercanos a los previstos para 2017, cuando ya estarían a las puertas del cierre todas las minas con ayudas. En un año se llevaría a cabo el ajuste previsto para cinco. Además, esta parte en el conflicto resta valor al mantenimiento de las prejubilaciones (326 millones) porque si la minería cierra son miles los trabajadores que se quedan sin esas expectativas.

De momento, las dos partes en conflicto no han dejado de moverse para defender sus argumentos, lo que no se ha movido un ápice son las cifras de los presupuestos. Un recorte del 39% en el plan de la minería y del 64% en la partida concreta de ayudas al producción del mineral, la que da oxígeno al sector para que no se extinga, la que mantiene vivo el vínculo con era del Carbonífero. Son más de 300 millones de años.

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