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Tarde o temprano se tendrá que reconocer que las líneas rojas del SIMPA impiden todo posible acuerdo (entendido este como que todos ceden algo) y nos sitúa en el ¿quién se rinde?...

Tarde o temprano se tendrá que reconocer que las líneas rojas del SIMPA impiden todo posible acuerdo (entendido este como que todos ceden algo) y nos sitúa en el ¿quién se rinde?...

Nuevo fracaso en la negociación con los médicos que inician otra huelga de 4 días

Pese a que el Simpa dice que hubo acercamiento, Salud no ve voluntad de diálogo en el sindicato

24.10.12 - LAURA FONSECA | OVIEDO, en El Comercio.

Hoy volverá a haber huelga médica en los hospitales y centros de salud. Los facultativos pararán un día más los quirófanos y reducirán la actividad en consultas. Sólo se atenderá lo urgente, oncológico y preferente. Será así porque la negociación de ayer entre el Servicio de Salud (Sespa) y el Sindicato Médico (Simpa) volvió a fracasar. Hacía quince días que las partes en conflicto no se veían las caras. Ayer al mediodía se sentaron en torno a una mesa en la sede del Sespa, en Oviedo, pero pese al acercamiento de posturas del que habló «por vez primera» el Simpa, las cuatro horas de reunión de poco sirvieron. La huelga sanitaria, esta vez de facultativos, continúa. La protesta en respuesta al modelo de ampliación de jornada se prolongará hasta el lunes, día 29. A diferencia de la primera tanda, cuando el Simpa convocó una huelga parcial, la que hoy se inicia será de 24 horas.

Al término de la reunión de ayer, médicos y administración ofrecieron valoraciones contrapuestas, similar a lo que ocurre cuando se cuantifica el seguimiento de la huelga por una y otra parte. De hecho, parece que facultativos y Sespa hubieran estado en encuentros diferentes. Los médicos afirmaron haber «percibido un cambio de actitud por parte del Sespa» y se mostraron confiados en recibir una contrapropuesta hoy o mañana que permita poner fin a la protesta. Sin embargo, la Administración no lo vio igual. De hecho, acusó a la central médica de «inmovilista» y de «no haber variado ni un ápice sus planteamientos», lo que en opinión del Servicio de Salud «hace complicado encontrar puntos de encuentro y continuar negociando».

Por la tarde, pasadas las 20 horas, la Consejería de Sanidad emitió un comunicado mucho más duro que las declaraciones que la gerente del Sespa, Celia Gómez, había realizado horas atrás, al término del encuentro con el Simpa, cuando señaló que se había producido un acercamiento de posturas, aunque la distancia entre las partes era aún importante. En esa nota posterior, Sanidad señala que «los representantes del Sespa han podido constatar, tras repasar cada uno de los puntos de la convocatoria de huelga, que por parte del Simpa no ha habido avance alguno en la defensa de sus reivindicaciones corporativas, lo que complica la continuidad de las negociaciones».

Dice el Servicio de Salud, que los facultativos acudieron al encuentro «sin voluntad de proponer medidas alternativas en ahorro de gasto de capítulo de personal, tal y como se les había solicitado anteriormente». También les acusó de «falta de comprensión hacia los problemas económicos por los que están atravesando la mayoría de los ciudadanos».

34% de cirugías anuladas

Desde la central médica, sin embargo, las vibraciones eran otras. De hecho, el Simpa se mostró convencido de que hoy o mañana continuarían la negociación y los contactos. Todo eso, amén de que la huelga siga activa, en contra de la petición expresa del Principado de desconvocar la movilización. «El Simpa mantendrá la huelga hasta verificar que el cambio de actitud del Servicio de Salud no es sólo aparente», explicó. Habló el Sindicato Médico de «cambio de talante por parte del Sespa», lo que se contradice con las posteriores declaraciones de los responsables sanitarios.

Los médicos se mostraron flexibles sobre la aplicación de la ampliación de jornada en los hospitales, pero volvieron a calificar de «línea roja la desaparición del cómputo del descanso tras la guardia y la erradicación de los módulos de tarde para los mayores de 55 años». El Principado admitió ayer que la protesta médica, al margen de cuál sea el seguimiento, está «provocando molestias a los pacientes». En la primera semana, el HUCA tuvo que suspender el 34% de las operaciones.

Los médicos observan un acercamiento del Sespa, pero reanudan hoy su huelga

El SIMPA elogia el «cambio de actitud» de la Administración sanitaria, y ésta acusa al sindicato de «no variar un ápice sus planteamiento

Oviedo, P. Á. / J. A. A., en La Nueva España

Los médicos de la sanidad pública asturiana inician hoy la segunda fase de su huelga, que consistirá en cuatro días (24, 25, 26 y 29 de este mes) de paros de 24 horas. Esta reactivación del conflicto llega después de que ayer se reunieran durante cuatro horas representantes del Servicio de Salud (Sespa) y del Sindicato Médico (SIMPA), en un encuentro en el que estos últimos detectaron «un cambio de actitud por parte del Sespa», con la consiguiente esperanza de recibir «una oferta que permita poner fin a la huelga».

Por parte de los facultativos se ofreció -según fuentes del propio Sindicato Médico- una cierta flexibilidad en la implantación del aumento de la jornada laboral en el ámbito de la atención especializada. La versión de la Administración sanitaria es muy distinta. Asegura que el SIMPA «no ha variado un ápice sus planteamientos desde el inicio de las protestas, pese a que el Sespa ha tratado de acercar posturas». El Servicio de Salud sostiene que la organización médica permanece «completamente ajena a la complicada situación de la economía asturiana y al actual escenario de grave crisis que está poniendo en peligro la sostenibilidad del sistema público de salud». Las conversaciones continuarán hoy.

La reunión de ayer se produjo 24 horas después de que la Administración sanitaria firmara con UGT un acuerdo que afecta principalmente al personal sanitario que trabaja a turnos, cuya jornada anual queda recortada en 28 horas (cuatro días de trabajo). El pacto no fue suscrito por los sindicatos SATSE, Comisiones Obreras, USAE y SICEPA-USIPA, cuyos responsables alegan que -al contrario de lo que afirmaron los ugetistas- deja desprotegidos a los trabajadores eventuales y propiciará que unos 400 de ellos pierdan su puesto de trabajo a finales de este año. Las centrales no firmantes mantienen su convocatoria de huelga, de la que restan tres días: 30 y 31 de octubre y 5 de noviembre.

El conflicto que hoy está en activo es el del Sindicato Médico, que, además, se intensifica, puesto que en los cinco primeros días de la huelga los paros fueron de media jornada. Según el Sespa, en esa primera fase fue suspendido, como promedio, un 20 por ciento de la actividad quirúrgica en los hospitales públicos de Asturias. Es de suponer que en esta segunda oleada, con paros de día completo, la incidencia sea superior.

En un comunicado difundido ayer, el SIMPA argumenta que mantiene en pie la segunda fase de los paros «hasta verificar la voluntad negociadora de la Administración. El Sindicato Médico -según sus propias fuentes- ha reiterado a los responsables sanitarios que «existen líneas rojas en la negociación que la Administración no debe traspasar». Y ha precisado que «la libranza tras la guardia o el mantenimiento de los módulos de atención continuada para los mayores de 55 años exentos de realizar guardias nocturnas son irrenunciables». En cambio, prosigue el SIMPA, la voluntad negociadora se plasma en la disposición a dialogar «sobre el modo de implantar la nueva jornada laboral» en los hospitales y a «flexibilizar su reivindicación inicial de que el incremento de jornada se realizara a través de media hora más de trabajo al día».

El diagnóstico de la Administración también fue plasmado en un comunicado oficial en el que el Sespa enfatiza que «durante la reunión, los representantes del Sespa han podido constatar, tras repasar cada uno de los puntos de la convocatoria de huelga, que por parte del Sindicato Médico no ha habido avance alguno en la defensa de sus reivindicaciones corporativas, lo que complica la continuidad de las negociaciones». En estas circunstancias, los responsables del Servicio de Salud consideran que, «de mantenerse esta postura, resultará muy complicado encontrar puntos de acuerdo».

De otro lado, Guillermo Martínez, consejero de Presidencia y portavoz del Gobierno regional, manifestó ayer, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, su confianza en que el resto de sindicatos de la sanidad pública se sumen al acuerdo suscrito por el Sespa y UGT. A juicio de Martínez, el protocolo firmado anteayer «abre una puerta para dar una salida al conflicto».

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