A estas alturas la postura del Simpa la conoce toda la sociedad asturiana: simplemente rechazan cualquier tipo de cambio
El SIMPA rechaza la reducción de horas que el Principado ofrece a los médicos
«El Sespa se ha movido medio milímetro en un asunto como la libranza de la guardia, que para nosotros es irrenunciable», subraya el sindicato
Foto: Ultima protesta del Simpa ante la JGPA.
Oviedo, Pablo ÁLVAREZ, en La Nueva España
«Esta propuesta no modifica nuestra postura y ellos lo saben», afirmó ayer el secretario general del Sindicato Médico de Asturias (SIMPA), Antonio Matador, en referencia a la nueva oferta que la Consejería de Sanidad les pondrá sobre la mesa en los próximos días, según la cual los facultativos que realizan guardias nocturnas tendrían que trabajar por las tardes un máximo de nueve horas mensuales -habían llegado a plantearse hasta 23 sobre el supuesto de cinco guardias al mes- a cambio de descansar en las mañanas que siguen a la salida de dichas guardias.
El SIMPA tiene activa una huelga de médicos a la que le restan tres días del presente mes de noviembre (lunes, miércoles y viernes de esta semana) y ha programado doce días más de paros para diciembre. ¿Motivo? La aplicación en la sanidad pública asturiana de la ampliación de la jornada laboral de los empleados públicos de todo el país decretada por el Gobierno central.
A juicio de Matador, el Servicio de Salud del Principado (Sespa), con la propuesta fijada por escrito y anticipada por LA NUEVA ESPAÑA, «se ha movido medio milímetro en un asunto que para nosotros es irrenunciable». El término «irrenunciable» significa que el SIMPA no admite otra alternativa que mantener la libranza de la mañana posterior a la guardia en los mismos términos en los que lleva en vigor más de quince años: sin contrapartida alguna en forma de recuperación de horas.
El dirigente sindical aportó ayer un nuevo matiz: la negativa del SIMPA es aún más rotunda si lo que la Administración regional pretende es que los médicos lleven a cabo en esas horas vespertinas asistencia a pacientes. «En todo caso, podríamos estar abiertos a otro tipo de actividad», precisó el secretario general. Matador argumentó que la exigencia de «devolver» horas a cambio del descanso posterior a la guardia sólo está vigente en Castilla y León, donde «a los médicos se les piden dos horas y se dedican a formación, investigación y docencia».
Durante las negociaciones de los días pasados, «nosotros [el SIMPA] habíamos cedido tanto en el modo de aplicar las dos horas y media más de jornada semanal como en lo relativo a los módulos de tarde de los mayores de 55 años», subrayó Matador con el fin de apuntalar su argumento de que en lo tocante a la libranza posguardia es el Sespa el que debería asumir las peticiones del sindicato. El dirigente de la organización reiteró que la alternativa que ésta ofrece es que los profesionales que a las ocho de la mañana concluyen su guardia empleen «entre una y dos horas» en facilitar el relevo a sus colegas, y que sea en ese concepto en el que quede subsumida la libranza de esa jornada.
De otra parte, el sindicato sanitario Sicepa-Usipa difundió un comunicado en el que enfatiza que ni esta organización ni SATSE, USAE, y Comisiones Obreras han llegado «a ningún acuerdo» con el Sespa «ni, por tanto, han firmado ningún compromiso respecto a la aplicación de la nueva jornada». Según el Sicepa, la última propuesta de la Administración «supone un ligero avance en la negociación», pero «no alcanza las expectativas de los sindicatos». Pese a todo, la citada oferta ha llevado a las citadas centrales a desconvocar las huelgas previstas para el martes y el jueves de esta semana. El Sicepa precisa que el Sespa se ha comprometido a convocar la mesa sectorial de sanidad con el fin de abordar en ese marco «todas las cuestiones de jornada que aun nos separan en la negociación».
Las posturas
El Sespa plantea que los médicos que realizan guardias nocturnas continúen descansando las mañanas posteriores a la guardia, pero que a cambio recuperen -por las tardes- tres horas y media por cada mañana librada, hasta un máximo de nueve horas mensuales.
El Sindicato Médico (SIMPA) exige que las mañanas subsiguientes a las guardias sigan siendo de descanso sin contrapartida alguna.
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