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Merece la pena leerlo… ¡¡no puedo estar más de acuerdo!!

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¿Quiénes son los verdaderos patriotas?

Por Sebastián Rivero

nuevatribuna.es

Clarence Darrow, defensor de los derechos civiles norteamericano, dijo una vez que el patriotismo odia la injusticia en su propia tierra más que cualquier otro sitio. No se equivocaba Darrow cuando asociaba patriotismo a la justicia, porque realmente esa es la misma esencia del patriotismo, perseguir la injusticia en tu tierra y en última instancia, buscar la dignidad para tu país.

 

En en cualquier sociedad con un mínimo de coherencia, se llamaría patriota a todo aquel que  defendiera con ahínco la dignidad  de su tierra y de las gentes que en ella habitan. En cualquier sociedad, el patriotismo no dependería de partidos, sencillamente sería algo intrínseco a la ciudadanía. Desgraciadamente, vivimos en España, donde patriota es el que cuelga banderas fascistas en su salón y añora las épocas más ocuras de nuestra historia nacional.

 

Personas que se definen como patriotas y que sacan pecho cuando hablan de su rechazo a los extranjeros, pero que callan cuando la gestión de hospitales públicos pasa a manos de empresas de Puerto Rico. Supuestos patriotas que defienden sin pudor las reclamaciones españolas sobre Gibraltar cuando es España quien tiene no una, sino dos colonias en el norte de África. Personas que se encienden hablando de la grandeza del pueblo español, pero que guardan silencio cuando el FMI y la UE proponen bajar un 10% los sueldos a los trabajadores españoles y obligan a todos los ciudadanos del país a pagar una deuda ilegítima que en realidad le correspondería pagar a los bancos, beneficiarios del rescate que ahora se exige que devuelva toda la ciudadanía.

 

Extraño patriotismo el que profesan estos individuos, una degeneración absoluta del sagrado derecho a defender tu tierra, usada convenientemente para tapar las vergüenzas y negocios de grandes empresas y dirigentes políticos. Hemos tenido un claro ejemplo este mismo año, mientras el gobierno se encargaba de avivar el conflicto con Gibraltar denunciando al Peñón por contaminar las aguas; altos cargos y excargos del partido gobernante se desplazaban a la Audiencia Nacional para declarar ante el juez por un supuesto caso de financiación irregular en el partido. Pero la indignación es todavía mayor cuando nos enteramos de que el mismo gobierno que denunciaba a Gibraltar por contaminación, daba el visto bueno a Repsol para que buscara petróleo en las Islas Canarias, desestimando todos y cada uno de los informes que desaconsejaban la búsqueda por motivos de destrucción ecológica, incluidos los propios informes técnicos de Repsol.

 

Como ya se habrá notado, el mal llamado patriotismo de nuestra sociedad dista mucho de ser el patriotismo del que nos hablaba Darrow, se trata simplemente de una cortina de humo tras la cual muchos prefieren esconderse para no ver la realidad, que el fervoroso sentimiento al que se agarran ciegamente, no es más que un método de control social del que hacen uso las élites políticas y empresariales para poder actuar libremente sin tener que dar explicaciones a nadie.

 

¿Pero quiénes son los verdaderos patriotas? Los verdaderos patriotas son los que siguen defendiendo la dignidad de su tierra. Patriota es el que se arriesga a ser detenido por defender un sistema sanitario público, universal y gratuíto para todos sus conciudadanos. Los patriotas verdaderos son aquellos que luchan contra la injusticia en su tierra, venga de donde venga.

 

Los únicos que pueden llamarse patriotas son los que sin caer en cortinas de humo, siguen queriendo un país mejor, aquellos que reciben insultos de un sector de la población y siguen pidiendo derechos para esa misma parte de la población, porque ellos no entienden de partidos o sectores poblacionales, ellos entienden de dignidad para su país. Los verdaderos patriotas no quieren banderas y partidos, quieren dignidad y justicia.

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