Blogia
La información es la base de tu opción ... y nosotros nunca te la ocultamos.

Amplio reportaje de Pablo Alvarez para La Nueva España…

Amplio reportaje de Pablo Alvarez para La Nueva España…

Siete facultativos asturianos que presiden sociedades científicas de ámbito nacional analizan el estado del sistema sanitario

"Es necesario acometer reformas", advierten

Pablo Álvarez, en Asturama – La Nueva España.

El nivel de cualificación de los profesionales sanitarios es elevado, pero existe un serio riesgo de desmotivación. El papel de los gestores es muy mejorable, hasta el punto de que constituyen el talón de Aquiles del sistema sanitario. La sanidad pública está necesitada de reformas si se quiere evitar un recorte de prestaciones que vaya más allá del que ya se está verificando.

 

Éstas son tres de las principales conclusiones de los siete médicos asturianos que protagonizan este reportaje de LA NUEVA ESPAÑA. No han sido elegidos al azar. Se trata de facultativos que presiden sociedades científicas de ámbito nacional. Es decir, ocho médicos que ejercen en el sector público o el privado -algunos de ellos compaginan ambos- cuyo prestigio los ha llevado a liderar organizaciones que en algunos casos aglutinan a miles de colegas de todo el país.

 

Desde esa privilegiada atalaya efectúan un "chequeo" riguroso de las sanidades asturiana y española. El resultado es un análisis plural de unos servicios que atraviesan un momento crucial en el que la crisis está sembrando zozobra e incertidumbre. Una situación particularmente delicada para un sistema caracterizado por dar una asistencia universal y de bajo coste directo para el usuario. También la sanidad privada -admiten- está viéndose zarandeada por la situación económica.

 

Los siete facultativos coinciden en algunos diagnósticos y discrepan sobre otros. Unos son más partidarios de la inclusión de criterios de gestión privada; otros rechazan de antemano cualquier componente lucrativo. En lo que parecen estar de acuerdo es en que una inacción prolongada en el tiempo podría equivaler a "cargarse la gallina de los huevos de oro".

 

"El sistema público de salud resulta irrenunciable"

20.11.2013, Asturama – La Nueva España, por P.A.

 

Serafín Málaga Guerrero es catedrático jubilado de Pediatría de la Universidad de Oviedo. En el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) fue durante largo tiempo jefe de sección de nefrología pediátrica.

 

"Asistimos a unos importantes recortes que pueden poner en peligro lo que se viene denominando "modelo pediátrico español", que ha demostrado su calidad y su capacidad de aportar unos beneficios para la salud infantil y juvenil muy superiores a los conseguidos por otros sistemas de salud de nuestro entorno. Los niños no deben ser atendidos por médicos de adultos, sino por pediatras. La situación en Asturias se diferencia positivamente en que la mayor parte de las plazas de pediatría en atención primaria están cubiertas por pediatras. Confío en que la apertura del nuevo HUCA propicie que nuestras autoridades consideren imprescindible que las plazas de especialidades pediátricas sean ocupadas por pediatras con las correspondientes acreditaciones.

 

"Se registra una constante e importante reducción de recursos sanitarios. La sufren por igual usuarios y profesionales, que asisten impotentes a una pérdida de universalidad y equidad en los servicios. Sorprende que algunos sistemas sanitarios traten de convencer a los usuarios de que una gestión privada es la única medida para conseguir la sostenibilidad. Nadie discute que para seguir disfrutando del sistema nacional de salud se requiere una profunda reforma, que habrá de acometerse no sólo con los gestores sanitarios, como hasta ahora, sino también con la contribución de profesionales y pacientes. Para la organización a la que represento, el sistema público de salud es irrenunciable. Resulta imprescindible involucrar a los usuarios en la defensa del sistema".

 

"La excelencia liderará la salida de la crisis"

20.11.2013, Asturama – La Nueva España, por P.A.

 

José Fernando Alfonso Sánchez es profesor titular de Oftalmología de la Universidad de Oviedo y coordinador científico del Instituto Oftalmológico Fernández-Vega.

 

"En Asturias las prestaciones básicas se están cumpliendo, se está modernizando la administración sanitaria y el nuevo HUCA representará un cambio positivo en la atención a los pacientes. En España el problema es más complejo, con diferencias entre comunidades autónomas; sería importante llegar a un acuerdo general con optimización de recursos. Las prestaciones básicas en la sanidad pública se están cumpliendo de la mejor forma posible, pero a base de recortes en dos aspectos fundamentales: personal y tecnología. Esta tendencia es peligrosa, porque podemos acercarnos al límite de la calidad asistencial.

 

"Los centros de excelencia, tanto públicos como privados, con personal cualificado y tecnología avanzada, serán los que lideren la salida de la crisis. La sanidad pública española necesita una reforma, pero sin revoluciones. El Ministerio de Sanidad debería aprovechar todos los recursos sanitarios públicos y privados que hay en España. Se deben coordinar centros de referencia por patologías y por núcleos de población que sean eficaces y con unos mínimos de calidad. Los recursos económicos son limitados, pero también están mal aprovechados. Se necesita potenciar la actividad docente e investigadora de nuestro personal sanitario. El sistema no siempre las favorece, y la parte asistencial predomina con fuerza. La gestión es muy importante. Debe estar al servicio del paciente y debe ser buena. Da igual que sea pública o privada".

 

"Es necesaria una reforma con acuerdo político"

20.11.2013, Asturama – La Nueva España, por P.A.

 

Luis Fernández-Vega Sanz es catedrático de Oftalmología de la Universidad de Oviedo, jefe de esta especialidad en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) y máximo responsable del Instituto Oftalmológico Fernández-Vega.

 

"La situación de la sanidad en Asturias y en España es buena en general. Mantiene altos niveles de prestación de servicios, y el nuevo HUCA supondrá un impulso. La crisis está afectando a la sanidad pública en una menor dotación económica para aparataje y también repercute en todos los estamentos de personal, con lo que hay más dificultades para desarrollar el trabajo habitual. En la medicina privada la repercusión es menor. Como el coste de la sanidad cada vez es mayor, independientemente de que exista crisis o no, es difícil que se puedan afrontar en el tiempo todas las prestaciones. Habría que pensar en alguna reforma que conllevaría, como punto de partida, un acuerdo entre los distintos partidos políticos para afrontar el mantenimiento del sistema.

 

"Creo que no hay ningún país de nuestro entorno que tenga una sanidad pública tan buena como la nuestra, en la que desempeña un papel importante el sistema de formación médica (MIR). Acerca de la polémica sobre la supuesta privatización de determinados servicios sanitarios en algunas comunidades autónomas, no tengo muchos elementos de juicio, aunque pienso que lo más importante es la atención que se presta, al margen de cómo se gestione ésta. Lo fundamental es que el sistema sea eficaz y eficiente. Los puntos más fuertes del sistema sanitario son los buenos profesionales y los gestores. Indudablemente, el más débil es, como siempre, el usuario, en quien repercuten de forma más aguda las disfuncionalidades que puedan existir".

 

"Los gestores son la asignatura pendiente"

20.11.2013, Asturama – La Nueva España, por P.A.

 

Julio Bobes García es catedrático de Psiquiatría de la Universidad de Oviedo y jefe de servicio del área sanitaria de Oviedo.

 

"En Asturias se ha intentado implantar un modelo economicista muy marcado. En España conviven varios modelos con diferente grado de desinversión sanitaria y formas de gestión. Las limitaciones consecuentes se perciben en la asistencia sanitaria. Los problemas de salud mental han incrementado la demanda, en especial en la asistencia primaria, que orienta y ayuda a las dificultades de adaptación. La sanidad pública precisa de mejores evaluaciones y, sobre todo, de evaluaciones externas que identifiquen las áreas de baja efectividad, las discomunicaciones internas y las inequidades regionales. La sanidad nacional precisa de una reformulación estratégica y de cambios estructurales con verdadera autonomía de gestión clínica que mejore la gobernanza del sistema y ponga fin a la situación de diecisiete ministros de sanidad que no comunican ni deciden conjuntamente.

 

"España tiene una situación única en el mundo y, por lo tanto, difícil de comparar. De momento, nadie nos ha imitado, pero es evidente que tenemos un sistema que cubre el estado de salud de todos con muy baja repercusión económica en los usuarios y unas instalaciones y equipos técnicos-profesionales envidiables. Los modelos de gestión alternativos están implantados en todo el mundo, particularmente en Norteamérica y en la mayoría de los países europeos. En España las experiencias son limitadas. Lo que se desprende de las comunidades valenciana y madrileña no es muy convincente. De los gestores, después de treinta años de profesión, sigo pensando que son la asignatura pendiente. Los profesionales alcanzan una magnífica competencia".

 

"El riesgo es la desmotivación del profesional"

20.11.2013, Asturama – La Nueva España, por P.A.

 

Edelmiro Menéndez Torre dirige el servicio de endocrinología y nutrición del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA).

 

"En la sanidad pública es una obviedad decir que la crisis está repercutiendo en una merma de los medios tanto humanos como materiales. El reto de "hacer lo mismo o más con menos recursos" se torna inalcanzable, salvo en las palabras de algunos gestores. El riesgo es la desmotivación de los profesionales. Desde hace ya muchos años, creo que todo el mundo está de acuerdo en que es necesaria una reforma para conseguir la sostenibilidad del sistema, y para ello uno de los puntos más importantes sería garantizar la calidad en la atención sanitaria y afrontar el reto de una mejor atención a las enfermedades crónicas, que son la base del gasto sanitario.

 

"La sanidad pública española no es la mejor del mundo, pero sí está entre las mejores del mundo en algunos aspectos como la accesibilidad y la equidad, y todo ello con un presupuesto inferior al de otros países similares. Sin embargo, debe adaptarse a los nuevos desafíos, como la atención a la cronicidad, la accesibilidad y la utilización de las nuevas tecnologías tanto sanitarias como de información o conectividad y la mejora de la eficiencia mediante una gestión clínica más moderna. Nadie ha demostrado las ventajas del modelo de gestión privada sobre el modelo público existente. La reforma de la gestión debería hacerse sin la intervención de capital privado y, por supuesto, sin ánimo de lucro. Sin duda, el punto más fuerte del sistema son los profesionales, pero la progresiva desmotivación y el empeoramiento de sus condiciones de trabajo están debilitando cada vez más este puntal. El aspecto más débil son los gestores y el marco legal en el que se desenvuelve todo el sistema, que hace muy difícil la gestión".

 

"Nos cargamos la gallina de los huevos de oro"

20.11.2013, Asturama – La Nueva España, por P.A.

 

Francisco Menéndez-Graíño López ejerce la medicina en su clínica privada de Oviedo. Trabajó en la sanidad pública hasta 1990.

 

"La sanidad en Asturias es muy buena, aunque veo riesgo de inflexión. Una sanidad de calidad, como la sanidad pública que tenemos en España, es carísima. Y no por el personal, sino por el aparataje, el material, las pruebas y el costo de los medicamentos. Imaginemos nuestra casa. Antes ganábamos 100 y gastábamos 100. No había problemas. Ahora, con la crisis, ganamos 70, pero tenemos que cubrir unos gastos de 110 (por desgracia, el aparataje, los materiales y los nuevos medicamentos son más caros). ¿Qué hacemos? Intentamos mantener ese gasto utilizando nuestros ahorros y pidiendo un préstamo. Pero todo tiene un límite. La sanidad privada, la que yo conozco, también se ve afectada por la crisis. Si no hay dinero, no puedes gastarlo.

 

"¿Reformar la sanidad pública? Si algo es bueno, debemos mantenerlo y mejorarlo. No me parece que necesite una reforma, sino una adecuación a la situación actual a través de una gestión más profesional, una utilización ponderada de los recursos por parte de todo el personal y un uso responsable por parte de los pacientes. Todos somos responsables y nos estamos cargando la gallina de los huevos de oro.

 

"En principio, me parece ideal una sanidad pública. Ahora bien, cuando no hay medios, si la iniciativa privada crea hospitales y adelanta un dinero, puede ser válido. Está claro que los más débiles son los usuarios y los profesionales. El gestor en la empresa pública tiene pocas responsabilidades".

 

"A medio plazo habrá pérdida de servicios"

20.11.2013, Asturama – La Nueva España, por P.A.

 

Venancio Martínez Suárez es pediatra del centro de salud de El Llano (Gijón).

 

"La satisfacción de los ciudadanos con el sistema sanitario es alta, mayor que con cualquier otro servicio público. Pero ya hace muchos años que sabíamos que íbamos hacia el caos económico y de restricciones traumáticas en el que estamos, y esta situación tiene unos responsables. Puede decirse que tenemos unos buenos servicios sanitarios con un futuro incierto, insostenibles desde los planteamientos actuales. La parte más importante del deterioro que se está produciendo hasta ahora la han asumido los profesionales, lo que hace que se note poco. Pero a medio plazo originará disminución de prestaciones y pérdida de servicios, lo que para algunos colectivos más vulnerables, como los niños, los enfermos crónicos y los ancianos, aumentará el riesgo de enfermedad y muerte.

 

"Es necesario un replanteamiento general del modelo, ya que el que ha llegado hasta aquí es impagable. Tiene que darse un cambio de organización, en el sentido de centralizar la mayoría de la gestión y algunos servicios preclínicos y auxiliares, favoreciendo cierta autonomía en los centros. Además, ha de ser profundo en lo profesional, con una carrera incentivada y con recertificación periódica sin plazas en propiedad. Tanto el modelo del PP madrileño como el que se propone aquí ahora tienen para mí grandes incertidumbres. Algunas fórmulas están poco estudiadas. Otras tienen demasiada carga de colectivismo o de beneficios particulares. Mientras que en el sistema público la gestión no se despolitice y no se reconozca la diferente competencia y el compromiso de los profesionales sanitarios, la salud de las personas dependerá de un aparato cada vez más ineficaz y que será desplazado por otros modelos".

0 comentarios