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La consejería trasladará el estudio presentado por la plataforma “Dulces guerreros asturianos” a la Agencia Española del Medicamento…

La consejería trasladará el estudio presentado por la plataforma “Dulces guerreros asturianos” a la Agencia Española del Medicamento…

Piden la retirada de unas agujas 'low cost' para inyectar insulina

Enfermos de diabetes trasladaron la petición al consejero de Sanidad. Dicen que «son peores y provocan más dolor»

Foto.- De la entrevista de ayer entre el Consejero y Elías Campillo.

Laura Fonseca, en El Comercio.

 

Los enfermos diabéticos las conocen como las agujas 'low cost'. Son las nuevas jeringuillas que desde abril pasado suministra la sanidad pública entre quienes tienen que inyectarse insulina de forma regular. Los usuarios afirman que estas agujas, más baratas y cuyo adjudicatario cambió tras la celebración de un nuevo concurso de adquisición de material sanitario, «son de peor calidad y provocan más dolor. Son más abrasivas y nuestros hijos no quieren pincharse con ellas». Elías Campillo, de la plataforma 'Dulces guerreros asturianos', de la que forman parte 40 familias con hijos con diabetes, se reunió ayer con el consejero de Sanidad, Francisco del Busto y con el director de Salud Pública, Antonio Molejón, a quienes trasladó el problema, que también se da en otras comunidades.

 

Campillo, cuya hija de 8 años es diabética, encargó un estudio comparativo a la Fundación ITMA Materials Technology. La entidad concluyó que el producto del que están compuestas las nuevas jeringuillas «es más rugoso, tiene más estrías y carece de un revestimiento que hace que la aguja penetre mejor». Todo esto hace que el pinchazo «sea más doloroso e, incluso, cause hematomas», detalló Campillo.

 

1.825 pinchazos al año

La protesta «no es ningún capricho», recuerda el representante del colectivo, que asegura que un niño insulinodependiente se inyecta insulina «hasta 1.825 veces al año». La Consejería de Sanidad ha tomado nota del problema y se ha comprometido a estudiar el asunto. De momento, trasladará el estudio a la Agencia Española del Medicamento, donde se centraliza el registro nacional de efectos adversos que provocan los fármacos o, como ocurre con las agujas, los materiales sanitarios. La plataforma 'Dulces guerreros' solicitó meses atrás la intervención del Centro de Farmacovigilancia del Principado, pero esta entidad carece de competencias cuando se trata de investigar productos que no sean medicamentos. Campillo agradeció el interés mostrado por el consejero de Sanidad.

 

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