HOSPITAL DE PARAPLEJICOS: CARTA ABIERTA A NO SE MUY BIEN QUE SINDICATOS DEL AREA SANITARIA DE OVIEDO...

“Desde el Valle del Nalón a la capital”

 

Ante todo he de decir que soy miembro de la Junta de Personal del área VIII del SEPA de Asturias por CC.OO., y aunque no puedo hablar por el órgano unitario de representación al que pertenezco, si creo oportuno recordar que en el mismo hemos apoyado por unanimidad la iniciativa de hace muchos años y de ahora de construcción de un Hospital de Parapléjicos en Langreo.

Dicha iniciativa, basada en la oportunidad que brindan los fondos mineros, en la situación de desequilibrio entre la excesiva demanda y la oferta que puede asumir el único centro de estas características en el país, el de parapléjicos de Toledo, y en la necesaria generación de empleo directo e indirecto en esta cuenca; no había sido objeto de un cuestionamiento tan singular, como el que sale en los medios de comunicación de ayer puesto en boca de “sindicatos del área sanitaria de Oviedo” que, cito literal, afirman “que en el Hospital Central de Asturias ya existe un centro de parapléjicos, con las especialidades necesarias para una asistencia integral del enfermo”.En Oviedo, cierto es si no me equivoco, que existe una unidad de lesionados medulares, como en otros muchos Hospitales cabecera de sus respectivas comunidades autónomas, que suplen unas necesidades inmediatas que distan bastante de ser lo que se llama un centro de parapléjicos. Ese, que yo sepa, sólo hay uno en todo el país, el de Toledo, lo mismo que sólo hay una unidad de referencia estatal para las neumoconiosis, el Instituto Nacional de Silicosis que sí está en Oviedo y forma parte del HUCA, aunque en el Hospital “Valle del Nalón” o en el de Mieres, por poner dos ejemplo, también sabemos tratar adecuadamente la silicosis. Como se ve ambas cosas son similares, pero en las cuencas no se nos ocurre confundir el tratamiento de la silicosis con las competencias que tiene la unidad de referencia estatal que es el INS de Oviedo. Por eso yo rogaría, que no se confunda lo del centro de parapléjicos con lo que existe en el HUCA. Más, porque también creo, que esas confusiones nunca son casuales o inocentes.Recientemente asistí con cierta incredulidad, aunque con toda la discreción del mundo, a la descentralización de la oncología radioterápica existente en el HUCA para su ubicación en parte en Gijón. Ello fue causa de la dimisión de la coordinadora regional – la Dra. Chelo Rayón – sin que, a pesar de los muchos argumentos profesionales y científicos que podían hacer dudar de lo acertado de la medida en cuestión, y que ella dignamente esgrimió, ningún sindicato del HUCA dijera absolutamente nada del tema. Está claro que entonces, me parece a mi, la presión ciudadana pesó más que otros muchos argumentos ... o ¿debo pensar que depende de dónde provenga esa presión ciudadana es más o menos eficaz? Vista la celeridad con que se resolvió lo de Gijón, vista la actitud del actual Presidente del Principado en ese caso y visto el silencio de muchos ante eso (incluidos los sindicatos a los que me dirijo con este escrito), no puedo por menos que llegar a la conclusión de que lo que aquí ocurre ahora es que algunos sólo saben bailar al son que les tocan, y ese no es el que marcan los ciudadanos con sus legítimas aspiraciones.No soy del PP ni, mucho menos, partidario de Gabino de Lorenzo, pero como no suelo bailar con lo que otros tocan y más si no me gusta, me voy a permitir acabar con la misma frase con la que él zanjó la discusión en el Ayuntamiento de Oviedo dónde se utilizó ese posicionamiento de no se que sindicatos del área IV: “«que ese hospital de parapléjicos es una legítima aspiración del municipio de Langreo y es bueno para el resto de los concejos de Asturias», aunque – y esto lo añado yo – algunos miopes no lo quieran ver.

Arturo Méndez González