Debate en la Junta General del Principado ayer

EL CONFLICTO SANITARIO A DEBATE EN LA JUNTA GENERAL DEL PRINCIPADO.

Quirós acusa al PP de colaborar con los de "jódase el sistema"

Cuétara dice que siente "asco" por la forma de trabajar de la interventora general.

05/12/2008 JESUS SAN ROMAN para La Voz de Asturias

El consejero de Sanidad, Ramón Quirós, señaló ayer que pese a los intentos de desestabilizar de algunas instancias interesadas, se sigue trabajando en una reforma del sistema sanitario que tiene como base atender mejor, con más eficacia y eficiencia, las necesidades de los usuarios. En una interpelación del diputado del PP Carlos Galcerán en el pleno de la Junta General del Principado, éste censuró al consejero por "encender fuegos" en todo aquello que toca, mientras que Quirós acusó al grupo popular de alinearse con sindicatos que van de dialogantes y llaman al absentismo laboral y a no atender a los pacientes, es decir, con aquellos partidarios de "jódase el sistema y después hablamos".

Aludía el consejero a las consignas de resistencia, como cogerse una baja, que se proponían desde la web del Simpa, el sindicato de los médicos, ante el conflicto con los facultativos por decisiones como las aperturas de los centros de salud de tarde, o la reorganización de las guardias. Galcerán acusó a Quirós de ser el responsable de un deterioro en la calidad de la atención primaria y de tener solo dos objetivos: "salir en los medios cada semana con una boutade para cabrear a los profesionales y usar la tijera".

El diputado del PP reprochó al consejero no escuchar al personal y de querer hacer una reforma del sistema "contra los profesionales y no con los profesionales" cuestión que negó Quirós ya que, dijo, "no se debe confundir escuchar las expectativas con admitir posturas que van en el sentido contrario de mejora la atención a los pacientes". El consejero reiteró la legitimidad del Gobierno para proceder a la reorganización del sistema y subrayó que "no se puede estar al albur de la voluntariedad de los profesionales". Para Quirós es normal que haya resistencia por parte de los médicos a que se tenga que trabajar un día por la tarde a la semana cuando antes era una vez al mes y era voluntario. El consejero negó que hayan amenazas a los medicos eventuales como denuncia el PP y añadió que quienes están siendo amenazados, y también sus familias, son algunos directivos que están sometidos a "una tensión insoportable".

Entre las medidas que está tomando el Gobierno es la de racionalizar el gasto farmacéutico, ya que según el consejero, hay que "corregir disparidades" como que en Gijón haya médicos que receten una media de medio millón de euros al año y otro que prescriba un millón.

Previamente Quirós en declaraciones a los medios realizadas en los pasillos de la Junta declaró que se han acercado posturas con los médicos eventuales por lo que considera que "hay expectativas de llegar a un acuerdo en breve" que ponga fin al conflicto laboral. Sobre el modelo de organización de las urgencias apuntó que aún "no hay ningún documentos encima de la mesa".

CARTAS La diputada del PP Alejandra Cuétara señaló ayer que tiene "una sensación cercana al asco" respecto a la quiebra de independencia que supone que la interventora general del Principado, Margarita González Marroquín, esté auditando las cuentas del Idepa cuyo gerente es su hermano Víctor. El consejero de Economía, Jaime Rabanal, reiteró que la interventora no se ocupa del Idepa, hay un interventor delegado, y arremetió contra el PP por enviar a los interventores de las diferentes comunidades autónomas cartas donde, a su juicio, se pone en duda la profesionalidad de Marroquín.

Asturias

Quirós denuncia en la Junta "amenazas físicas" a su equipo por la reforma sanitaria.

 

Defendió la «legitimidad» de cambios y advirtió de que «cuando no hay acuerdo, la responsabilidad de los poderes públicos es indelegable»

 

C. T. / AGENCIAS, OVIEDO para EL COMERCIO

 

La aplicación de la 'reforma Quirós' suma nuevos escollos. A los numerosos frentes abiertos -apertura de los centros de salud por las tardes, eventuales, urgencias...- se añade ahora el de las «amenazas físicas» y las «fuertes presiones» que están sufriendo algunos equipos directivos de la Consejería de Salud. La denuncia llegaba ayer al Parlamento asturiano de boca del máximo responsable sanitario y principal promotor de la renovación. José Ramón Quirós respondía en la Junta General a una interpelación del Grupo Parlamentario Popular sobre política sanitaria en materia de Atención Primaria. Allí defendió la necesidad y «legitimidad» de unos «cambios estructurales profundos» que permitan un servicio «más equitativo en todas las áreas de Asturias y estén centrados en los intereses de los ciudadanos». Y allí advirtió de que «cuando no hay acuerdo la responsabilidad de los poderes públicos es indelegable».

Dicho esto, Quirós endureció el gesto para rechazar gran parte de las críticas vertidas contra el proceso procedentes en su mayor parte, dijo, del Sindicato Médico (Simpa). Unos mensajes negativos que el consejero resumió con la frase: «Marean al paciente y joden al sistema». Fue entonces cuando denunció ante los diputados regionales las «amenazas físicas» recibidas por dirigentes del sector sanitario y las «insoportables tensiones» y «fuertes presiones» que están sufriendo y que alcanzan incluso, según sus palabras, a sus familias.

Apuesta por el diálogo

José Ramón Quirós tampoco quiso dejar pasar la oportunidad de insistir en el diálogo como principal paso en todo proceso y, en este sentido, aseguró que la consejería «escucha a los profesionales». Eso sí, con la puntualización de que dicho diálogo no tiene que confundirse con «aceptar posturas que van en sentido contrario a mejorar el servicio». Porque, añadió el consejero, la implantación de la jornada de tarde, «no puede estar al albur de la voluntariedad de los profesionales».

La defensa de su gestión llegaba tras la intervención del diputado del Partido Popular Carlos Galcerán, quien denunció el «clamor del deterioro» que sufre la Atención Primaria en Asturias desde hace años y apuntó como principal motivo a que «importa más lo económico que lo asistencial», además de una «financiación precaria» y una «excesiva burocracia».

Acusó asimismo al consejero de «cargarse algo que funcionaba bien» y aseguró que se trata de una «queja unánime» de los profesionales, a los que Quirós, añadió Galcerán, ha acusado de «mercantilistas y peseteros» pese a ser los más comprometidos con el sistema sanitario público.

El diputado popular lamentó que Quirós intente hacer una reforma de la Atención Primaria «sin contar con los profesionales y contra los profesionales» y aprovechó su discurso para recordarle que los centros de salud «llevan años abiertos por las tardes».

 

Listas de espera

 

En su opinión, los logros del consejero hay que buscarlos «en el aumento de las listas de espera en Primaria y en un incremento presupuestario previsto para 2009 que se limita el 1,1% en su departamento. «En política, las verdades no van en las palabras sino en los presupuestos», aseveró Galcerán, quien reclamó un mayor esfuerzo económico para un segmento sanitario que «es la base del sistema público».

Quirós rebatía las acusaciones del diputado del PP con las cifras en la mano. La Atención Primaria «no está paralizada», apuntó, como demuestra que la semana pasada se despacharan más de 100.000 consultas en medicina de familia, 67.000 de enfermería y más de 11.000 en pediatría, junto a más de 20.000 urgencias ambulatorias.

 

 

El PP carga en la Junta contra Quirós y exige su dimisión por «destrozar la atención primaria»

El consejero de Salud asegura que «el sistema está agotado, necesita cambios, y queremos poner el cascabel al gato»

 

Oviedo, E. G., para La Nueva España

Carlos Galcerán, diputado del PP en la Junta General, inició sus críticas al consejero de Salud, Ramón Quirós, con una frase históricamente atribuida a media docena de intelectuales, entre ellos a Mark Twain. «Cuando me entran ganas de hacer gimnasia, me meto en la cama hasta que se me pasan». Expectación en el hemiciclo. «Yo espero, señor consejero, que cuando le entren ganas de destrozar la atención primaria, también usted se meta en la cama».

Interpelaba el PP sobre la política sanitaria asturiana, y Galcerán pintó un panorama lleno de sombras: más pacientes por médico de atención primaria, financiación precaria, mucha burocracia y un tiempo de consulta «que no da ni para pedir el nombre». Dice el PP que todo ello tiene un responsable, Ramón Quirós. La conclusión se veía venir: «Usted es el problema porque no sabe dialogar. Necesitamos otro consejero».

Quirós, es obvio, no estuvo de acuerdo. Señaló que la atención primaria es la base del sistema público de atención, y ése fue el único punto en que Consejero y diputado estuvieron de acuerdo. Insistió Ramón Quirós en algunos de los argumentos que viene utilizando en los últimos meses en esta pugna contra parte del colectivo médico, que tiene varios tentáculos: oposición a las jornadas de tarde en los centros de salud, médicos eventuales, médicos de urgencias hospitalarias o falta de pago a los hospitales concertados. El sistema es mejorable, pero funciona, afirma el Consejero. «Se está trabajando fuerte y con buenos resultados, a pesar de las desestabilizaciones». Sólo así se pueden entender las estadísticas semanales: 100.000 consultas de atención primaria, 20.000 urgencias de atención primaria o 67.000 consultas de enfermería.

En todo caso, los números no lo son todo, recuerda el PP. «Desde hace años venimos asistiendo a un deterioro de la atención primaria en Asturias. Lo decimos nosotros, lo dicen los profesionales. Es un clamor», señaló Galcerán, quien pidió al Consejero que escuche «la queja unánime de los profesionales, que se resisten a dejar que usted destroce lo que funcionaba bien».

El sistema de atención primaria está agotado, señala Ramón Quirós. Lo dice el Consejero y lo dicen muchos médicos, agregó. «Por tanto se necesitan cambios profundos y estructurales». Diálogo sí, «pero aquí se está cuestionando la legitimidad de los poderes públicos para regular la organización de un servicio tan esencial como éste. Un sistema público no puede estar al albur de la voluntariedad de los profesionales». Cuando no hay acuerdo, hay que tomar decisiones «y nosotros queremos poner el cascabel al gato».

El diputado Galcerán le recordó al Consejero el reciente manifiesto de 500 facultativos «que le piden que se vaya. Los que trabajan en la atención primaria están hartos, engañados y pisoteados». A Quirós los manifiestos no parece que le quiten el sueño y pronostica la aparición de otros nuevos a corto plazo. El Consejero aprovechó para lanzar un par de pullas al Sindicato Médico de Asturias (SIMPA) y recordó que hay gestores de la sanidad asturiana que están recibiendo amenazas particulares.

En un breve encuentro con los periodistas antes de su comparecencia en la Junta General, el consejero Ramón Quirós se mostró optimista en relación con un próximo acuerdo con los médicos eventuales. «Hay buenas expectativas», dijo, no sin antes aclarar que el sistema de salud asturiano «está bastante bien dotado y resistimos las comparaciones». El titular de Salud reiteró la cifra de 115 médicos eventuales susceptibles de ser contratados de forma continuada. Sobre la posibilidad de un nuevo conflicto con los médicos de urgencias hospitalarias, que temen cambios al alza de su jornada y a la baja de su salario, Quirós subrayó que «no hay ningún documento sobre la mesa».