Sin consecuencias reseñables
ASEGURAN QUE EL GENERADOR DE EMERGENCIA FUNCIONO A LA PERFECCION.
El hospital Valle del Nalón achaca al temporal el problema eléctrico
El gerente del centro señala que el apagón de luz solo duró una hora.
27/01/2009 C. MIER, para La Voz de Asturias
Alberto Fernández, gerente del hospital Valle del Nalón, quiso restar importancia ayer al problema del apagón de luz que sufrió el citado centro hospitalario en la madrugada del viernes al sábado, aprovechando así mismo la ocasión para elogiar la labor del personal de mantenimiento que, en su opinión, "actuó de manera diligente y precisa ante un inconveniente desencadenado por el temporal de viento que azotó la zona el fin de semana".
Fernández indicó que el problema no estuvo en la propia generación de electricidad sino en la distribución de la misma dentro del hospital, si bien señaló que "el generador de emergencia funcionó perfectamente durante la hora que faltó la electricidad, por lo que no hubo que detener la actividad en ningún momento", ya que éste permite mantener la corriente en todos los lugares críticos, ya sea en aparatos o en salas que no pueden quedar a oscuras.
Con estas declaraciones, el gerente quiso recalcar que no fue el sistema de cogeneración eléctrica lo que falló el sábado, un método de alimentación que el mencionado hospital comparte solo con otros dos centros en Asturias --HUCA y San Agustín--, y que aprovecha el calor producido en el edificio para reintegrarlo en la red eléctrica general.
Por su parte, Arturo Méndez, delegado sindical de CCOO en el hospital Valle del Nalón, coincidió al relatar que en la madrugada mencionada "no hubo novedad porque no pasó absolutamente nada, únicamente se tuvo que extremar la vigilancia y usar linternas" por un espacio de tiempo mayor que el indicado por el gerente; en este caso el apagón duró de "una a tres de la mañana" y fue el "más largo" que recuerda. Aún así, Méndez también quiso quitar hierro al asegurar que el hospital "está preparado para soportar cortes de luz mucho más desafortunados", porque el sistema de generación de electricidad y de alimentación ininterrumpida "es lo suficientemente eficaz".
El único inconveniente destacable se materializó en los momentos de inquietud que vivieron los pacientes, que veían desfilar al personal sanitario con linternas en las manos sin estar seguros de lo que estaba pasando.
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