Quiros: es difícil negociar sobre intenciones aunque, si hay sensatez, se pueden llegar a acuerdos

Quirós cree que se puede llegar a un acuerdo «si hay sensatez»

El consejero de Salud dice que el Sespa lleva semanas intentando acercar posturas con los médicos por la huelga de Urgencias

 

02.04.09 - L. F. / AGENCIAS, GIJÓN, para El Comercio

 

El consejero de Salud cree posible llegar a un acuerdo con los facultativos acerca de la nueva huelga de Urgencias «si hay sensatez». Ramón Quirós se pronunció en estos términos sobre el segundo paro que el Sindicato Médico (Simpa) ha convocado en los servicios de Urgencias hospitalarias del 15 al 26 de abril próximos.

Los médicos ya protagonizaron una primera huelga en las urgencias del 23 al 27 de marzo pasado y han anunciado una segunda protesta «ante la negativa del Sespa a negociar». Ayer, Quirós, que participó en Gijón en la inauguración de la nueva sede de Cruz Roja, negó tal extremo. «Me consta que el Servicio de Salud del Principado y el Sindicato Médico no han dejado de hablar y que no dejarán de hacerlo».

Sobre los motivos de la huelga, el consejero insistió en lo dicho hasta el momento: «No ha habido ningún cambio en las condiciones de trabajo de los servicios hospitalarios de Urgencia», dijo. Quirós indicó, no obstante, que «es difícil negociar sobre intenciones aunque, si hay sensatez, se pueden llegar a acuerdos».

Quien también se refirió al conflicto médico fue la portavoz del Gobierno, Ana Rosa Migoya, que afirmó que la nueva huelga convocada por el Simpa tiene «características extrañas» puesto que no deja tener «carácter preventivo».

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, Migoya aseguró que no se entiende que se convoque un paro cuando aún no hay ninguna propuesta sobre la mesa para cambiar o reorganizar las urgencias hospitalarias. «Cuando la propuesta esté, se negociará con las organizaciones sindicales», subrayó Migoya, para quien no tiene fundamento que se convoque con carácter previo y «por si acaso» una huelga de doce días.

La principal reivindicación del Simpa es evitar una merma del poder adquisitivo de los médicos ya que, según sus datos, algunos profesionales de Urgencias perderán entre 600 y mil euros al mes.

 

Quirós confía en alcanzar un acuerdo para evitar la huelga.

Migoya afirma que el debate se analizará en la mesa de negociación.

 

02/04/2009 E. FERNANDEZ/EFE, La Voz de Asturias

 

El consejero de Salud y Prestaciones Sanitarias, José Ramón Quirós, manifestó ayer su confianza en alcanzar un acuerdo con el Simpa para evitar la huelga en los servicios de Urgencias prevista entre los próximos días 15 y 26 de abril, ambos inclusive, "en beneficio de la ciudadanía".

 Quirós, que participó ayer en la inauguración de las nuevas instalaciones de Cruz Roja en Gijón, indicó que "el Sespa siempre mantuvo contactos con el Simpa tratando de acercar posturas. El Sespa no cambió la estructura de Urgencias pero hay que trabajar para resolver temas manteniendo la calidad asistencial". Quirós admitió las dificultades que entrañan estas conversaciones porque "no ha habido cambios en las posturas" pero abogó por la "sensatez de ambas partes" para alcanzar un acuerdo. El consejero de Salud negó también que la huelga haya tenido un impacto sobre las listas de espera.

 

Por su parte, la portavoz del Gobierno, Ana Rosa Migoya, aseguró ayer que la nueva huelga convocada por Sindicato Médico Profesional de Asturias (Simpa) entre el personal médico y facultativo de los servicios de urgencia de los hospitales asturianos tiene "características extrañas", puesto que no deja tener "carácter preventivo".

 

Migoya se refirió así al paro programado por el Simpa entre el 15 y 26 de abril, ambos inclusive, al que están convocados los 180 trabajadores de este área en Asturias. En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, afirmó no entender que se convoque un paro cuando aún no hay ninguna propuesta sobre la mesa para cambiar o reorganizar las urgencias hospitalarias.

 

"Cuando la propuesta esté, se negociará con las organizaciones sindicales", subrayó Ana Rosa Migoya, para quien no tiene fundamento el que se convoque con carácter previo y "por si acaso" una huelga de 12 días de duración. Después de la huelga de cinco días que el personal de las urgencias hospitalarias siguió durante la semana pasada, el Simpa mantiene que el Gobierno se niega a negociar con los afectados la organización de sus condiciones laborales y la negociación de su marco retributivo.