Al hilo de los reajustes presupuestarios para garantizar la solvencia en la Consejería de Sanidad

IU plantea abrir un debate para reducir el gasto sanitario en Asturias sin recortar prestaciones

12.08.09 - JOSÉ ÁNGEL GARCÍA, GIJÓN, para El Comercio

Iglesias recuerda que el pasado año «se entregaron un millón de recetas más y eso merece una reflexión»

«La mejora de la gestión debe ser continua, haya o no debates», afirma el líder de la FSA, Javier Fernández

La burbuja sanitaria puede explotar en poco tiempo en Asturias. Izquierda Unida considera que ha llegado el momento de plantear un debate social y político para buscar soluciones que permitan reducir el gasto en sanidad en el futuro, pero, eso sí, sin recortar las actuales prestaciones. La coalición no cree que este discurso suponga una incoherencia e insiste en que es posible incrementar la eficiencia, y más después de conocer la modificación presupuestaria que ha tenido que realizar el Principado para completar el pago de las nóminas al personal del Sespa para noviembre y diciembre.

La pregunta del millón es cómo. IU, de momento, no quiere pronunciarse sobre qué actuaciones deben adoptarse en esta dirección y augura un debate presupuestario «complejo» con la FSA, su socio en el Ejecutivo autonómico.

Y eso a pesar de que ambas formaciones comparten la misma preocupación y, en parte, las respuestas que pueden ofrecerse a las muchas interrogantes que se generan sobre el futuro del sistema sanitario. El secretario general de la Federación Socialista Asturiana (FSA), Javier Fernández, cree que se han dado ya los primeros pasos para alcanzar el objetivo que todos ambicionan. «La mejora de la gestión debe ser continua, haya o no haya debate», afirma el líder de los socialistas asturianos que, al igual que IU, considera imprescindible «seguir ofreciendo el mejor servicio desde el ámbito público».

Esta aspiración, según Jesús Iglesias, no es incompatible con un recorte importante en el gasto farmacéutico, el meollo del problema. Sólo en el último ejercicio, «se recetaron en Asturias un millón más de recetas que el año anterior», recordó el líder de IU, para quién los datos reflejan la necesidad de acometer una reflexión en profundidad y «buscar fórmulas desde la izquierda para conseguir una mayor eficienciacon un coste menor». «La preocupación la tenemos todos y la mejora en el día a día nos la imponemos todos», asevera Javier Fernández.

Ninguno ofrece pistas de por dónde deben dirigirse las políticas en los próximos meses para acercarse al objetivo. Está claro que los planteamientos de Quirós, que han encontrado el rechazo del sector, cuentan con el beneplácito de la FSA, pero no así de IU que lamenta sus «errores tácticos».

Estas posibles discrepancias saldrán a relucir en el debate presupuestario. La sanidad se lleva una tercera parte de las cuentas públicas y un crecimiento de las partidas parece difícil de encajar en un proyecto que, según el Gobierno, abogará por la austeridad. IU no se resigna y ayer, de nuevo, reclamó la necesidad de agotar el margen de endeudamiento que concede el Ejecutivo, un 2,5% del PIB, para garantizar la dinamización económica de la región. A este respecto, el líder de IU aprovechó su intervención, junto a Gaspar Llamazares, para mandar un recado a su socio en el Ejecutivo y más, en concreto, al presidente del Principado, después de los últimos encontronazos por las prioridades que deben recoger las cuentas públicas. «Hay que apostar por los proyectos que generan empleo y aparcar o descartar los que ya son difícilmente aceptables en tiempos de bonanza como los ’cheques-regalo o las obras faraónicas. Hoy esos planteamientos suponen un auténtico dislate», afirmó.

Reforma fiscal

El diputado nacional de IU, Gaspar Llamazares, no se pronunció sobre el desfase que provoca el gasto sanitario en la región, pero no perdió la oportunidad de lanzar una advertencia al Ejecutivo de Rodríguez Zapatero. IU sólo apoyará al Gobierno «si hay un cambio en la política fiscal». El dirigente asturiano no comparte el actual escenario en el que la estructura fiscal se basa en las contribuciones de los asalariados y en los impuestos indirectos en lugar de «gravitar» en aquellos que realmente obtienen beneficios.

En este sentido, mandó un recado a la Patronal española y, en concreto, a su presidente, Gerardo Díaz Ferrán, al que acusó de «provocar» con su propuesta de reducir los salarios después de dinamitar la negociación del acuerdo social y no descartó que se produzcan movilizaciones para protestar contra esta actuación.

 

Las consejerías cederán 69 millones para hacer frente al reajuste presupuestario

IU lamenta que Rabanal «no estuviera muy fino» en las previsiones que hizo del gasto sanitario

12.08.09 - J. A. G., GIJÓN, para El Comercio

Después de rebuscar en los bolsillos de todos los consejeros, el Principado ha conseguido ’reunir’ los 101 millones necesarios para hacer frente a las nóminas del Servicio de Salud (Sespa) de noviembre y diciembre. El Principado ha sacado 69 millones de los distintos departamentos, lo que supone una pérdida «aceptable» por parte de los miembros del Ejecutivo.

El resto del dinero, los 32 millones, saldrán de la denominada ’partida 31’. Este conocido fondo de provisión se utiliza generalmente para hacer frente a gastos imprevistos y, en los últimos años, ya había servido para equilibrar el desfase que cada año supone el gasto sanitario.

Hasta ahora, nunca se había generado una situación de esta gravedad. Los ingresos tributarios compensaban las pérdidas y no obligaban a la Consejería de Economía a realizar malabarismos. Sin embargo, esta vez no ha tenido otro remedio.

En el consejo de Gobierno del pasado 29 de julio, Rabanal trasladó al resto de consejeros la situación que se había generado y la necesidad de modificar que no recortar, como aseguró el consejero en su comparecencia, el presupuesto de 2009. El planteamiento estaba claro. Todos tenían que apretarse el cinturón. Cada consejería debía proponer aquellas partidas prescindibles de sus áreas. Es decir, aquellas que bien no iban a alcanzar el 100% de ejecución o restando fondos de inversiones que no iban a agotar el crédito disponible. La iniciativa de Economía formaba parte de un plan de urgencia, diseñado en los últimos meses, que tenía como fin evitar que la disminución de los ingresos provocara un desequilibrio contable en la Administración.

Este recorte en las consejerías permite al Gobierno extender aún más la partida destinada al área sanitaria. En las cuentas de 2009, la sanidad se lleva una tercera parte del presupuesto, en torno a los 1.500 millones de euros. La mitad de esa cantidad se destina a hacer frente a los pagos del personal. Sin embargo, ahora, parece que esa partida es insuficiente. «Está claro que el consejero no estuvo muy fino cuando hizo las previsiones sobre el gasto sanitario», señaló ayer Jesús Iglesias. «Hay obligaciones ineludibles», explicó Rabanal durante su intervención ante los medios de comunicación. Una comparecencia que, según destacados dirigentes de IU, tuvo un claro sesgo político. «Tal y como se explicó el consejero se entiende que quiere condicionar la negociación presupuestaria y que su objetivo es plantear más recortes», afirman estas fuentes. UPyD, por su parte, respalda la actuación del Ejecutivo y juzga «razonables» las medidas de ahorro impulsadas en la Administración regional.

 

AL GRANO

IU da la voz de alarma

12.08.09 – Opinión de JUAN NEIRA

JESÚS Iglesias asegura que el recorte de 101 millones de euros aplicado en varias partidas del presupuesto tiene como destino pagar las nóminas de los empleados de la Sanidad correspondientes a los meses de noviembre y diciembre. El coordinador general de IU afirma que en el último ejercicio se han despachado un millón de recetas más que en el anterior, lo que invita a abrir un debate sobre el crecimiento del gasto sanitario.

De entrada hay que agradecerle a Jesús Iglesias que hablara tan claro, expresando en términos concretos lo que está ocurriendo, aunque el mensaje sea inquietante. Veinticuatro horas antes, Jaime Rabanal habló de ahorrar 101 millones del gasto, pero sin decir la causa del recorte, y envolviendo la operación en argumentos generales de gestión presupuestaria propios de la actual crisis económica. Lo que ocurre es mucho más sencillo: en el año de la gripe A no se ha realizado una reserva de dinero suficiente para pagar los salarios del personal sanitario. Se impone dejar proyectos de otras consejerías sin ejecutar para atender las nóminas, como así se va a hacer sacando 69 millones de otros departamentos para cubrir los sueldos.

De las declaraciones de Jesús Iglesias cabe extraer una conclusión general: la sostenibilidad de los servicios públicos es la principal tarea pendiente del Principado. La financiación de los servicios no está asegurada y es responsabilidad directa y exclusiva del Gobierno regional. Hay otros asuntos, empezando por la crisis económica, que atañen al Principado, pero su resolución recae también en otros agentes y administraciones (Gobierno central, bancos, patronal, sindicatos), de modo que no se puede culpar del porcentaje de paro al Ejecutivo autónomo, aunque en el debate político se caiga con frecuencia en ese tipo de juicios hiperbólicos.

El coordinador general de IU destaca el aumento de las recetas médicas, como elemento clave en el crecimiento del gasto sanitario. Está bien que los dirigentes de Izquierda Unida empiecen a pensar en términos concretos, y abandonen el discurso retórico-ideológico de la amenaza de privatizar la sanidad, que enarbolan cada vez que se propone una medida sobre racionalización del gasto. Ahora bien, la discusión sobre las recetas debe dar paso a un debate general sobre los servicios públicos que nos podemos permitir y pagar.