CC OO mantiene para hoy la convocatoria de huelga «porque la situación es crítica»...

La UE amplía hasta 2018 el plazo para el cierre de la minería asturiana

Amplía cuatro años la vigencia de las ayudas, pero concentra los recortes en los primeros ejercicios y las vincula a la presentación de planes de cese

09.12.10 - J. C. V. | GIJÓN, en El Comercio.

La Comisión Europea ha modificado su propuesta inicial y permitirá que las minas de carbón reciban ayudas públicas hasta 2018, cuatro años más de lo inicialmente previsto. Así lo anunció ayer el comisario europeo de la Competencia, el español Joaquín Almunia, quien explicó que esta propuesta será trasladada mañana a los ministros de Industria y Energía de la Unión Europea para su ratificación.

La propuesta fue aprobada ayer por el Coreper, el órgano que agrupa a los embajadores de los 27 países de la UE, paso previo para su traslado a los ministros del ramo. La decisión del Ejecutivo comunitario fue adoptada en la reunión semanal del colegio de comisarios, en la que no estuvo presente la responsable de Acción por el Clima, Connie Hedergaard, contraria a alargar las ayudas, pero sí su colega de Energía, el alemán Günther Oettigner, con una posición más flexible.

La nueva propuesta de la Comisión supone básicamente ganar tiempo -cuatro años más-, pero no modifica el espíritu de la propuesta inicial de julio en la que se fijaba 2014 como el último año para que las minas pudiesen recibir ayudas. En efecto, las ayudas son finalistas, es decir, que no serán prorrogables y deberán ir acompañadas de planes de cierre de explotaciones y cese de la actividad carbonera hasta su total desaparición en 2018. Y además se reducirán año a año. «No aceptaremos un compromiso bajo un camino distinto del de la reducción progresiva», señaló ayer el comisario Almunia.

En la práctica eso supone que todas la minera no rentables -en España todas las minas se sostienen con ayudas al funcionamiento o, en el caso de Hunosa, con fondos de los Presupuestos Generales- desaparecerá en los próximos ocho años, aunque muchas ya se verán obligadas a cerrar en 2011, porque las subvenciones sufrirán un 20% de recorte en los dos primeros años de vigencia del reglamento.

Luego, las ayudas se reducirán un 25% en 2013, un 40% en 2015 y un 75% en 2017. La patronal Carbunión y los sindicatos ya han advertido de que pocas empresas podrán mantener su actividad más allá de 2014 con recortes tan drásticos de sus ingresos. «Aunque el reglamento durará hasta 2018, en cuatro años se conseguirá el objetivo de cerrar la mayoría de las minas europeas, al concentrar las mayores reducciones de subvenciones al principio», opina Salvador Garriga, eurodiputado asturiano del PP.

Garriga se felicitó por el cambio en la propuesta inicial de la Comisión, pero evitó cualquier «euforia» al considerar que el espíritu de la propuesta de julio se mantiene. Y explica que en la reunión de ayer del Coreper «a España ni siquiera se le dejó discutir si las ayudas estarían vinculadas o no al cierre».

Los eurodiputados socialistas en el Parlamento Europeo, entre ellos los asturianos Antonio Masip y María Muñiz de Urquiza, celebraron la decisión de la Comisión y aseguraron que «seguirán trabajando» para garantizar la seguridad energética con carbón y que las minas resulten competitivas mediante el acceso complementario a las ayudas europeas para el carbón verde, es decir, para captura y almacenamiento de CO2.

«El carbón europeo no se puede reemplazar por motivos de mercado por carbón importado, que no cumple con los parámetros sociales, medioambientales y de seguridad que caracterizan a la minería europea», añadieron.

Permite «ganar tiempo» para desarrollar las plantas de captura de CO2 , dice Areces

09.12.10 - JOSÉ ÁNGEL GARCÍA | OVIEDO, en El Comercio.

La propuesta de la Comisión Europea de ampliar a 2018 el horizonte de ayudas a las explotaciones deficitarias de carbón llena de «satisfacción» al Gobierno asturiano, después de meses de incertidumbres e intensas negociaciones. El giro en las posiciones de la Comisión Europea permitirá a Asturias, como a otras regiones con minas, «ganar tiempo» para invertir esfuerzos y seguir desarrollando tecnologías de secuestro y almacenamiento de CO2 que hacen albergar esperanzas de que el sector pueda sobrevivir más allá de los próximos ocho años. En estos términos se manifestó ayer el presidente del Principado, Vicente Álvarez Areces, durante una comparecencia ante los medios de comunicación.

Areces cree que se trata de un triunfo de la diplomacia, pero también de la constancia política. «Nos sentimos legítimamente satisfecho de nuestro trabajo, de haber coordinado actuaciones y deber tenido una posición activa y razonada en defensa del futuro del carbón», explicó el presidente asturiano, que confía en que la decisión de la Comisión Europea sea ratificada por el consejo de ministros de Industria. El nuevo escenario que salga de este acuerdo será muy importante para el carbón asturiano, señaló Areces, porque permitirá «ganar tiempo». «Son ocho años -dijo- en los que vamos a trabajar intensamente para que todas las incertidumbres que haya en el sector se vayan despejando». La región, en su opinión, puede y debe tener un papel «corresponsable» en la consecución de los objetivos europeos de luchar contra el cambio climático y minorar las emisiones de CO2.

Los sindicatos han expresado su rechazo a que se ponga fecha al final de las ayudas al carbón. Areces entiende estas posiciones, pero reconoce que la última decisión de la Comisión sacia de una forma notable las aspiraciones de Asturias con respecto al futuro del carbón. «Cuando se da una batalla tan dura como esta...» El presidente del Principado resalta que el techo inamovible para las ayudas públicas hasta hace poco era el año 2014. Recuerda, en este punto, la conversación que mantuvo en Bruselas con el comisario Joaquín Almunia, en la que éste expuso las dificultades que tenía por delante el sector, «porque conocía la posición que había dentro del Colegio de Comisarios».

Con las nuevas perspectivas y el carbón formando parte del mix energético, Areces confía en acabar un itinerario que, precisa, «todavía acaba de empezar». «Tenemos que ser capaces de darle futuro al carbón», reclamó el presidente del Principado respecto a las tecnologías de secuestro de CO2 que, ahondó, «se introducen en términos que pueden ser viables en el ámbito de los mercados internacionales».

Cree que, de este modo, se desmontarían los argumentos contrarios al carbón cimentados en los daños medioambientales que produce. «Si conseguimos minorar las emisiones de CO2 y almacenar, es evidente que el carbón podría seguir funcionando perfectamente, siempre que encontrásemos tecnologías de secuestro de CO2 a un precio razonable en los mercados internacionales», explicó.

CC OO mantiene para hoy la convocatoria de huelga «porque la situación es crítica»

El SOMA-FIA-UGT dice que en la propuesta de la Comisión hay un margen de flexibilidad para modificar los plazos de reducción de las ayudas

09.12.10 - D. D. M. | GIJÓN, en El Comercio.

La Federación de Industria de CC OO mantiene para este jueves la convocatoria de huelga general en todas las empresas de la minería del carbón debido a la «crítica situación que desde hace meses vive el sector». En total, 7.600 trabajadores (5.200 de las compañías mineras y 2.400 de subcontratas) están llamados a secundar el paro. Para el sindicato, la decisión que tomó ayer la Comisión Europea de extender hasta 2018 las ayudas al carbón «no cambia sus reivindicaciones ni despeja el futuro del sector» y sigue siendo necesario que el Gobierno ponga en marcha las medidas anunciadas y que están sin funcionar. «Da igual que el final de las ayudas se imponga en 2014 ó en 2018 si se hace una rebaja de las subvenciones decreciente que llevará a que la mayoría de las empresas mineras tengan que cerrar en 2012 y que muy pocas subsistan hasta 2018», explica el secretario de la Federación de Industria de CC OO, Maximino García, 'Mino'.

Algo más optimista se mostró ayer el líder del SOMA-FIA-UGT, José Ángel Fernández Villa, quien pese a rechazar cualquier ampliación de ayudas que estén condicionadas al cierre, asegura que en la propuesta de la Comisión existe un margen de flexibilidad para que, a petición de los países miembro, se puedan modificar los plazos de reducción de ayudas «por razones energéticas». El sindicato esperará, no obstante, a conocer la «literalidad» del texto para hacer un análisis más exhaustivo del mismo.

El SOMA-FIA-UGT, aunque no respalda la convocatoria de huelga de CC OO, seguirá apostando por la unidad de acción sindical de cara a las medidas que se tomen en el sector en un futuro. Sus prioridades, según manifestó su secretario general, son la aplicación inmediata del real decreto de ayudas al carbón y que la Unión Europea autorice nuevas ayudas para la reactivación de las comarcas mineras. Además, advierte al Gobierno de que en la negociación de un nuevo plan minero no aceptarán ningún documento que incluya orientaciones de la Unión Europea dirigidas al cierre del sector.

Sobre la ausencia de UGT en la convocatoria de huelga, 'Mino' subrayó ayer que respetan su decisión, aunque no la comparten porque «si no nos movilizamos ahora el cierre del sector será un hecho». Será la primera vez que los dos sindicatos no acudan a una huelga de manera conjunta, y, confía 'Mino, «ojalá sea la última».

Coincidiendo con la jornada de huelga de hoy, tendrá lugar una concentración en Madrid frente a la sede del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio desde las 14: 00 y hasta las 16.00 horas en la que se espera participen más de un millar de trabajadores llegados desde todas las comarcas mineras. Desde Asturias partirá una nutrida representación de más de 600 mineros -el sindicato ha fletado diez autobuses-, que estará liderada por el secretario de la Federación de Industria de CC OO; el secretario general de Industrias Extractivas, Juan Carlos Liébana, y el responsable de Minería y Energía, José Luis Villares. De Castilla y León se espera que acudan alrededor de medio millar de mineros. En total son 1.400 los trabajadores de esa comunidad (León y Palencia) los que han sido llamados a secundar la huelga.

El sindicato confía en que la protesta de los trabajadores sirva para que el Gobierno cambie de actitud, deje de «ningunear» a los trabajadores del sector y muestre cuáles son sus verdaderas intenciones. «Su pasividad lo único que ha conseguido ha sido generar un alto grado de incertidumbre en las comarcas mineras», explica.

Para CC OO, el Ministerio, «por su actitud, parece no estar preocupado por la situación de la minería», ya que ni ha convocado a la Comisión de Seguimiento ni ha respondido a las numerosas peticiones de reunión que han solicitado. En todo caso, la organización mantiene su voluntad negociadora con el objetivo de resolver los problemas del sector, aunque advierte de que si no fuera posible, la huelga del 9 de diciembre no será un hecho aislado. De esta manera asegura que pondrá en marcha «las movilizaciones que sean necesarias para defender la actividad del sector y el futuro de las cuencas».