Nueva Tribuna entrevista a MARCIANO SÁNCHEZ BAYLE
"Detrás del copago sanitario están los intereses de las aseguradoras"
El portavoz de la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP) considera que el copago limitará el acceso a la sanidad de las personas más enfermas y con menos recursos. “Nuestro sistema sanitario es el resultado de un esfuerzo solidario entre las personas con mayores ingresos y más sanas para con aquellas que tienen menos medios y más enfermedades”, recuerda Sánchez Bayle.
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¿Qué le parece la recomendación de la UE para que los Veintisiete estudien la posibilidad de introducir el copago y la participación del sector privado para garantizar la sanidad pública?
Resulta difícil de entender cómo se puede propugnar el copago como un mecanismo para controlar el gasto sanitario cuando es bien conocido que en Europa son precisamente los países que tienen mayores copagos (Alemania, Francia, Bélgica, etc.) los que tienen un mayor gasto sanitario per capita o en porcentaje del PIB. Este es un ejemplo clarísimo de cómo se intenta repetir una mentira miles de veces para hacerla pasar por verdad.
El Ecofin mantiene que es necesario para “limitar el crecimiento excesivo” del gasto sanitario…
Ningún organismo sanitario internacional recomienda el copago, es más, señalan que son un problema para que las personas con menos ingresos tengan acceso a la atención sanitaria, sin ir mas lejos el Informe sobre la salud en el mundo de la OMS de noviembre de 2010 señala que hay que evitar los copagos y dice que incluso los de pequeña cuantía pueden hacer la atención sanitaria inasequible para las personas mas enfermas y con menos recursos.
¿Sería entonces ese el sector de la población más perjudicada?
Hay mucha bibliografía internacional que señala que los copagos tienen efectos indeseables sobre la salud de las personas con menos recursos y mas necesidad de utilizar los servicios sanitarios (enfermos crónicos, ancianos) que tienen que postergar el acudir a los servicios sanitarios y que cuando lo hacen se encuentran en situaciones más graves. Hay un trabajo reciente que señala que un aumento de los copagos en HMOs de Usa (un sistema de seguros con atención integrada) disminuyó el número de consultas, pero a la vez aumentaron las urgencias y los ingresos, el resultado final fue un aumento de costes de 100.000 dólares anuales por cada 100 personas.
El debate en España es que se está produciendo un uso exagerado de los servicios de salud, ¿qué opina sobre esto?
En España se habla de una utilización exagerada de los servicios sanitarios sin que realmente haya pruebas de ello. Se utiliza como argumento que tenemos más consultas por habitante, pero se oculta que también tenemos muchas menos estancias hospitalarias por habitante, probablemente porque hay más frecuentación en primaria. Por otro lado, en España muchas consultas de primaria son evitables con una mejora de la organización: por ejemplo, el control de las IT, la renovación de recetas de crónicos, algunas consultas podrían realizarse por personal de enfermería (que tiene un mayor papel en otros países de Europa), etc.
Al final todo se reduce a cuánto cuesta…
Algunos argumentos son meramente ideológicos: se dice que solo se valora lo que cuesta dinero, obviando que la sanidad cuesta dinero de nuestros impuestos, y que lo que realmente se estima son otros valores como la solidaridad, que aunque repugnen a los neoliberales son fundamentales para el funcionamiento de la sociedad. Si fomentamos los instintos de poder y de ganancia el mundo sería insoportable: ya se ve lo que ha pasado en esta crisis que ha sido creada por gentes que solo valoraban el dinero por encima de los derechos de las personas.
Siempre hay alguien que dice que es posible articular un sistema de copagos que tenga en cuenta todas las variables para evitar la inequidad, e independientemente de que este sistema tendría unos costos elevadísimos, la realidad es que en todos los países del mundo donde hay copagos siempre han actuado de la misma manera: contienen la demanda, tanto la necesaria como la innecesaria, sin discriminar, y lo que sí discriminan es a los enfermos y a los pobres.
En España además la situación puede agravarse con la crisis económica.
Es que hay que reflexionar sobre la situación del país. Tenemos más de 4 millones de parados, muchos de ellos sin ningún ingreso. Además se acaba de anular la ayuda de 426 euros a los que no los perciben. A ello hay que sumar los pensionistas con pensiones medias en torno a los 700 euros, y un 57% de la población laboral empleada con salarios por debajo de 1.000 euros. En este escenario, el copago tendría efectos devastadores sobre la salud de la población.
¿Qué resaltaría de nuestro sistema sanitario?
Nuestro sistema sanitario es el resultado de un esfuerzo solidario entre las personas con mayores ingresos y más sanas para con aquellas que tienen menos medios y más enfermedades, precisamente por eso tiene el aprecio internacional, porque no hay barreras de acceso al sistema y los copagos quebrarían su columna vertebral.
¿Y qué otras alternativas hay?
Por supuesto hay muchas alternativas. La OMS, en el informe citado, dice que hay entre un 20% y un 40% de gasto sanitario ineficiente y sobre ello hay que actuar. En España el punto mas claro es el gasto farmacéutico que es exageradamente alto y que debería de disminuir de una manera significativa.
¿Cree que detrás de estas recomendaciones hay otros intereses creados?
Evidentemente, detrás de estas posiciones están los intereses de las aseguradoras para ampliar sus ganancias y de las multinacionales de la farmacia para evitar que se disminuyan sus beneficios.
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