No hay peor sordo que el que no quiere oír
Rajoy anuncia nuevos recortes y unos presupuestos «austeros»
El presidente del Gobierno central desvincula la derrota del PP de su política de ajustes
Foto: Mariano Rajoy, ayer a su llegada a Seúl.
27/03/2012, P.a / Agencias, Seúl/Madrid, en La Voz de Asturias
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, no cree que los recortes y las medidas de ajuste impulsadas por su ejecutivo hayan pasado factura al Partido Popular en las urnas, por lo que lejos de dar un paso atrás y rectificar, ha anunciado nuevos ajustes para esta misma primavera.
“España no se puede quedar parada”, advirtió ayer el presidente a su llegada a Seúl, desde donde anunció la próxima aprobación de unos presupuestos “muy austeros” y luz verde a nuevas reformas para las que espera contar con la “comprensión de la gente”.
“Yo intentaré explicar todo lo que se hace, pero España no se puede quedar anclada 30 años atrás”, insistió Mariano Rajoy en su primera comparecencia pública tras los resultados electorales que han supuesto para el Partido Popular un serio revés al que el presidente quitó hierro.
“En política no siempre consigue uno el cien por cien de los objetivos que se propone”, admitió Rajoy. Una forma de reconocer de manera implícita que la amarga victoria del PP en Andalucía ha sido en el fondo una nueva derrota, -y ya van cuatro-, de su candidato, Javier Arenas, del que dijo sentirse “orgulloso”.
En este sentido, el comité de dirección del PP andaluz hizo público ayer su respaldo a Arenas y confirmó su continuidad al frente del partido en el parlamento. No obstante hay quienes dentro del PP no creen que al candidato “le queden fuerzas” para estar más años en la oposición “ni ganas de seguir batallando” contra un gobierno de izquierdas.
Mazazo y rápido desgaste Aunque el presidente del Gobierno evitó ayer hablar de fracaso e insistió en no vincular los resultados electorales a los recortes, lo cierto es que diferentes cargos del partido si lo hicieron. Y es que sólo así se explican la pérdida de casi 420.000 votantes con respecto a las generales del 20-N.
Un “mazazo” que muestra el rápido desgaste del Gobierno de Rajoy en sólo tres meses debido a las reformas puestas en marcha con el arranque de la legislatura, en especial la reforma laboral y la subida del IRPF.
“El anuncio de la reforma laboral se podía haber retrasado a abril, pues tampoco es que los mercados hayan reaccionado muy bien tras conocerla”, señaló un dirigente consultado por EFE a las puertas de Génova.
Y es que para muchos la reforma ha contribuido a movilizar al electorado de izquierdas, mientras que la subida de impuestos ha generado el efecto contrario entre los votantes del PP.
En las filas del PP culpan a los socialistas andaluces de haber sabido exprimir al máximo el mensaje del “miedo” hablando del copago y de los posibles recortes en sanidad y educación.
La abstención, a la que la diputada popular en la Junta de Andalucía Esperanza Oña aludió como “un tapón para el cambio” o el temor por parte del electorado a que los populares ejerciesen un dominio tan aplastante, fueron otras de las razones a las que aludió el PP para explicar la derrota.
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