Campaña de recogida de firmas para exigir un referéndum sobre los recortes de Rajoy y su gobierno
Llamazares destaca el «ensañamiento» del Gobierno con las Cuencas
Foto: Gaspar Llamazares en una de las manifestaciones en favor de la minería.
Mieres del Camino, C. M. BASTEIRO, en La Nueva España
El diputado nacional de IU Gaspar Llamazares exigió ayer al Gobierno central que termine con su política «el ensañamiento y de discriminación» hacia las comarcas mineras. El representante de la coalición de izquierdas hizo estas declaraciones en Mieres durante la presentación de la campaña de IU «Llamamiento para una rebelión democrática» que consiste en una recogida de firmas para solicitar un referéndum sobre los recortes del Gobierno.
«En las comarcas mineras, ese referéndum se hace más necesario», señaló el diputado. Llamazares explicó que «estos territorios se están viendo ya afectados en el presente por los recortes del Gobierno de Mariano Rajoy en materia de minería». El diputado hizo referencia a los trabajadores despedidos de subcontratas «que ya están en la calle y sabemos que esta situación será una sangría que va a continuar hasta el final de año, porque no hay presupuesto suficiente para mantener a la minería».
Con esta situación como fondo, Llamazares ve muy difícil mirar hacia el futuro. «Cómo vamos a discutir un nuevo plan 2013-2018, si para entonces tenemos un 30 por ciento menos de explotaciones mineras abiertas», se preguntó el diputado. Desde su punto de vista, la actitud del Gobierno central puede que no responda a los intereses de estabilidad económica que dice defender. Llamazares destacó ayer que «da la impresión de que lo que pretende hacer el Gobierno es debilitar la organización y la capacidad de protesta de las comarcas mineras». A la vez, destacó que el Ministro de Industria, José Manuel Soria, «no es un Ministro, es un incendiario».
Llamazares señaló que «hace falta una rectificación en lo que se refiere a la política minera que se está manteniendo». El diputado aseguró que el Gobierno central «es legítimo» porque se eligió en las urnas, pero sus medidas «no son legítimas». «El presidente no habló de recortes ni de rescates en campaña electoral, no tiene legitimidad democrática», sentenció Llamazares.
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