Complicada situación de los trabajadores afectados no sólo desde el punto de vista sanitario, sino también laboral
Los intoxicados por mercurio urgen a Salud Pública a que aclare su situación sanitaria
Los afectados de IMSA acceden a seguir el tratamiento médico, pero quieren que «se acabe con los juegos de palabras sobre lo que nos está pasando»
Foto: Julio Bruno, a la derecha, junto a la directora del Instituto Asturiano de Prevención de Riesgos durante un encuentro con los trabajadores.
30.04.13 - JESÚS GONZÁLEZ | AVILÉS, en El Comercio.
Los trabajadores de la empresa IMSA que se vieron afectados por la intoxicación de mercurio en la planta de Asturiana de Zinc (AZSA) en San Juan de Nieva urgían ayer al director general de Salud Pública del Principado, Julio Bruno, a que «aclare nuestra situación sanitaria».
«Queremos que se dejen de juegos de palabras, hablando de que hemos sufrido una 'posible' intoxicación», indicó ayer uno de los afectados. Todos ellos consideran que su situación «no es una cuestión de 'probabilidad', cuando por otro lado nos están poniendo un tratamiento para intoxicaciones agudas o crónicas», añadió.
Esa aparente contradicción entre la cautela de las autoridades sanitarias a la hora de expresar si han sufrido o no una intoxicación por mercurio, con el tratamiento que se les ha prescrito para periodos de entre uno y cuatro años, es lo que llevó a los trabajadores inicialmente a negarse a seguir las indicaciones prescritas por los médicos del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) que les atienden.
«Al final, hemos decidido empezar a seguir el tratamiento, porque lo primero es la salud», añadía uno de los afectados acerca de las dudas que les plantean los mensajes contradictorios que vienen recibiendo desde que se detectó el accidente, el pasado mes de noviembre.
Ante esta situación, los trabajadores han decidido pedir una reunión urgente con el director general de Salud Pública para que les aclare cuál es su situación real, y los motivos por los que las autoridades sanitarias hablan en su caso de 'probable' intoxicación «cuando los médicos están reconociendo nuestra enfermedad».
«Se contradicen adrede»
Esa situación lleva a los trabajadores a pensar que desde las autoridades que están siguiendo el caso «se contradicen adrede» por las posibles implicaciones legales que puedan derivarse del accidente, que ha afectado a cerca de medio centenar de empleados de IMSA y, aunque en menor medida, a decenas de trabajadores de la factoría de Asturiana de Zinc en San Juan de Nieva.
De hecho, los trabajadores temen que, tal y como se están desarrollando los acontecimientos desde que se detectaron los primeros casos de intoxicación, se dé lugar a un proceso judicial que «no se resuelva en diez o quince años».
Ante esa situación, los trabajadores señalaban ayer que «sentimos como que desde la dirección general de Salud Pública se nos está dando esquinazo».
A la espera de conocer la reacción por parte de las autoridades sanitarias acerca de su situación, los trabajadores de la subcontrata afectados por el accidente en Asturiana de Zinc mantendrán estos días contactos para tratar de coordinar sus actuaciones y tratar de esclarecer su futuro cuanto antes.
Recientemente, y a preguntas de este diario, el responsable de Salud Pública de la Federación de Industria de Comisiones Obreras de Asturias, Javier Fernández, alertaba de la complicada situación a que se enfrenta el colectivo de trabajadores no sólo desde el punto de vista sanitario, sino también laboral.
«Enfermedad crónica»
Así, el hecho de que hayan ido recibiendo el alta médica por parte de la mutua de la empresa, mientras ahora reciben un tratamiento para la intoxicación «como si de una enfermedad crónica se tratara» puede complicar en buena medida el acceso a trabajos similares al que venían realizando hasta ahora.
El problema, recuerdan desde los sindicatos, es especialmente relevante teniendo en cuenta que la mayoría de los afectados desempeñaban su trabajo encadenando contratos por tiempo y obra determinados.
En esa línea, desde el Instituto Asturiano de Prevención de Riesgos Laborales ya se les había reconocido en el transcurso del encuentro celebrado en enero con todos los afectados que su historial médico podría estar a disposición de la mutua de una nueva empresa susceptible de requerir sus servicios, y que en ese historial figuraría, lógicamente, el episodio de intoxicación aguda por mercurio por el que están pasando.
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