Una, siempre interesante, entrevista a Rafael Matesanz, Director de la Organización Nacional de Trasplantes
Ultima jornada del VIII Congreso Internacional de Bioética…
«El índice de donaciones de Asturias es difícil de superar»
«Llevamos varios años de crisis y los trasplantes están aguantando bien gracias a que el sistema está muy consolidado» Rafael Matesanz Director de la Organización Nacional de Trasplantes
17.05.2013 - JAVIER FERNÁNDEZ, GIJÓN, en El Comercio.
Fue uno de los ponentes estrella que participaron ayer en la última jornada del VIII Congreso Internacional de Bioética, y algunos de sus compañeros le atribuyen buena parte del mérito de que España sea desde hace 21 años una referencia mundial en materia de donaciones. Rafael Matesanz (Madrid, 1949), director de la Organización Nacional de Transplantes, defiende que a diferencia de lo que ocurre en países como Portugal y Grecia, el sistema español de donaciones y trasplantes «se está manteniendo bien» pese a la crisis. Fomentar las donaciones de vivo y en parada cardíaca son algunas de las recetas que este premio Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional propone para reducir las listas de espera.
-¿Está Asturias entre las comunidades que realizan transplantes a corazón parado?
-No. Asturias lo que tiene desde hace muchos años es un programa muy centralizado de trasplantes tras muerte encefálica en el HUCA y los índices que tiene son difícilmente superables. La donación en parada cardíaca se planteó en su día y aún no se ha descartado.
-¿Supondría un aumento significativo?
-Sí, en toda España el año pasado representó un 10% de los donantes. Puede pensarse que ese es el porcentaje que podrían aumentar las donaciones en Asturias con este método.
-Ha aumentado la edad media de receptores y donantes, ¿puede suponer eso algún problema ético?
-En absoluto. Las donaciones son un reflejo de la sociedad y la población del sur de Europa está muy envejecida. El problema es que a una persona de 20 años no se le puede colocar un riñón de 70.
-¿Podría, entonces, haber escasez de órganos jóvenes?
-Ya la hay. Para los jóvenes hay que buscar otros enfoques, como la donación de vivo. En España estaba muy poco desarrollada, hemos apostado muy fuerte por ella y está en crecimiento.
-¿Cómo se trabaja para reducir las listas de espera?
-Debemos fomentar la donación en parada cardíaca y de vivo. También la detección de posibles donantes fuera de la UVI. En ese sentido los médicos de urgencias son fundamentales.
-Con los recortes que hay en sanidad y educación, ¿podrá España mantener la primera posición en materia de trasplantes?
-Llevamos varios años de crisis y los trasplantes están aguantando bien gracias a que el sistema está muy consolidado. En países como Portugal y Grecia han caído en picado. Tenemos muchas dificultades, sería absurdo negarlas, pero de momento nos estamos manteniendo bien.
-¿Podría pasarnos como a Portugal?
-No. Nosotros llevamos cuatro o cinco años de crisis y los dos últimos han sido máximos en donaciones y trasplantes. Esto se debe al empeño de los profesionales y a que el grado de solidaridad de los españoles sigue al máximo. Yo creo que el principal objetivo, ahora, es la sostenibilidad del sistema.
-¿Significa eso renunciar a seguir avanzando hasta que la situación económica mejore?
-Es difícil seguir avanzando en esta situación pese a que nos estemos manteniendo bien porque aumentar el número de donantes es complicado. Hace cinco años, no obstante, teníamos en España dos o tres programas de donación en asistolia o en parada cardíaca y en estos momentos tenemos 24. Las donaciones en vivo, asimismo, se han doblado en los últimos años. Todo esto se ha hecho en medio de la crisis.
-Las donaciones son muy rentables
-Rentabilísimas. Desde el punto de vista médico y desde el económico. Solo con lo que se ahorra con los trasplantes renales podría financiarse sobradamente el resto del sistema. Sería un error recortar en esto y de momento, afortunadamente, no se está haciendo.
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