Que requiere impulso es más que evidente
El Ayuntamiento y la Cámara negocian rescindir la cesión del vivero de la salud
Solo una empresa permanece en la instalación cuya gestión tenía encomendada la entidad hasta 2015
Foto.- Vivero de Ciencias de la Salud en Prado de La Vega frente al nuevo HUCA.
03.02.14 - ANA SALAS | OVIEDO, en El Comercio.
Solo hay una empresa instalada en el Vivero de Ciencias de la Salud de Prado de La Vega. Puestas las esperanzas en la apertura del nuevo Hospital Universitario Central de Asturias y teniendo en cuenta la especialización del espacio, el Ayuntamiento y la Cámara de Comercio estudian rescindir la concesión demanial (cede el uso de un bien de dominio público) del vivero, según confirman fuentes de la entidad. No cumplirían en ese caso el convenio por el que el organismo que preside Severino García Vigón se encargaría de la gestión del espacio hasta el 31 de diciembre de 2015.
La Cámara pidió al Consistorio, antes de la cesión del espacio construido con fondos europeos en su mayor parte (el 80% de los dos millones de euros que costó construirlo), ampliar el plazo para tratar de hacer rentable el vivero. La administración local, sin embargo, rechazó el recurso alegando que concluía el periodo de vigencia del Plan Urban. A partir de ahí pensaría quién y cómo se encargaría de impulsar el vivero.
El acuerdo de cesión también contemplaba que el Ayuntamiento pudiera «dejar sin efecto la concesión antes del vencimiento del plazo, si así lo justifican las circunstancias sobrevenidas de interés público, mediante resarcimiento de los daños que se causaren, o sin él cuando no procediere», este último detalle añadido tras la reclamación cameral. Por lo que el Gobierno local podría rescindir la concesión sin tener que realizar ningún tipo de compensación económica a la entidad con sede en la calle Quintana.
El Ayuntamiento y la Cámara de Comercio firmaron en octubre de 2010 el convenio para desarrollar el plan Urban, que incluía la gestión del vivero con un coste estimado de 120.000 euros. No fue hasta dos años después cuando Vigón acudió a la Casa Consistorial a rubricar el documento con el alcalde, Agustín Iglesias Caunedo. Una jornada en la que advirtió de las dificultades de sacar adelante un equipamiento que abrió un año más tarde.
Al principio, vacío, sirvió para comprobar el funcionamiento de la instalación. Unos meses en los que se detectaron problemas en la construcción, que la Cámara de Comercio reclamó al Ayuntamiento. Llegó, incluso a inundarse. En septiembre se instaló la primera empresa.
Actualmente sigue habiendo solo una, aunque podrían instalarse otras, en caso de que llegaran solicitudes de emprendedores que cumplan los requisitos del espacio. La Universidad cuenta con un local destinado a laboratorio para una 'Incubadora universitaria' con el objetivo de apoyar iniciativas empresariales de estudiantes o investigadores relacionados con las ciencias de la salud. De momento, no ha ocupado el espacio, quizá esperando al traslado del HUCA y al interés de los estudiantes por crear sus propias empresas. La Universidad aportará hasta 15.000 euros para equiparlo sin tener que abonar a la Cámara de Comercio ninguna renta mensual.
Aquí pueden residir los motivos por los que el Ayuntamiento y la entidad negocien un cambio en la gestión del vivero; porque no es rentable; porque a la Cámara le cuesta dinero y no está dispuesta a seguir poniendo euros de su bolsillo para sacar adelante proyectos municipales. En concreto, los relacionados con el Urban.
La Cámara se desvincula
De hecho, este puede ser el principio del fin de las relaciones entre ambas instituciones, ya que la Cámara podría desvincularse de las iniciativas que aún no están en marcha, según avanzan fuentes de la entidad. Rechazan que tenga que ver con las irregularidades detectadas por el Ayuntamiento en varios contratos adjudicados en 2011 por la Cámara por casi 200.000 euros que el Consistorio no pudo justificar ante la Unión Europea generando, por tanto, un agujero para las cuentas de la entidad que preside Severino García Vigón. En su momento, el concejal de Economía, Jaime Reinares, aseguró que el Ayuntamiento encargaría trabajos similares a la Cámara para tratar de compensar el desfase presupuestario.
Cuando la entidad solicitó prorrogar el convenio para continuar realizando los servicios de formación, apoyo a empresas e información, el Consistorio se lo denegó, sin dar más explicaciones (u obviarlas en el acta de la junta de gobierno en la que el gobierno local rechazó la prórroga). Fue después de que el director general, Pedro Rodríguez, dejara su cargo a petición de la entidad. Él no dio explicaciones de lo ocurrido ni tampoco lo hizo la Cámara de Comercio que siempre ha desvinculado los 'peros' encontrados en la auditoría con los acontecimientos posteriores. También ahora.
Aún queda por gastar 1,5 millones del Plan Urban
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