El HUCA, uno de los hospitales de referencia nacional por su programa de trasplantes, el tercero por volumen de actividad en este ámbito

Recibe el alta el paciente número 1.000 trasplantado con médula ósea

Foto.- De izquierda a derecha, Consuelo Rayón, jefa de Hematología; Carlos Vallejo, director del trasplante hematopoyético; Faustino Blanco, consejero de Sanidad; Jaime Rabanal, gerente del Área IV; Antonio Álvarez, director de Atención Sanitaria, y Miguel Rodríguez, director del HUCA, con parte del equipo de Hematología del Hospital Central.

 

RTPA

 

Un joven gijonós de 34 años es el trasplantado con médula ósea número 1000 realizado en el HUCA. El joven fue diagnosticado de un linfoma en septiembre pasado y hace 28 días se le trasplantó con su propia médula. 

 

Momentos antes de darle el alta ha recibido la visita del consejero de Sanidad y del gerente del Area Sanitaria Cuarta.

 

Desde hace 7 años el HUCA se ha consolidado como uno de los hospitales de referencia nacional por su programa de trasplante hematopoyético.

 

El año pasado realizaron 116 trasplantes entre los de médula del propia paciente y los de donante, bien sea de un familiar o de sangre de cordón umbilical.

 

Blanco atribuye el éxito al "trabajo en equipo, la dedicación, la entrega y el compromiso"

El Hospital Central es el tercer centro español con mayor actividad en el área

11.03.2014, Oviedo, P. Á., en La Nueva España.

 

La sanidad asturiana ha superado los mil trasplantes hematopoyéticos, un concepto que agrupa injertos de médula ósea, cordón umbilical y progenitores de la sangre. El gijonés Alejandro Escorza hizo el número mil, y ayer mismo recibió el alta. El equipo del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) -único de la región que practica estas intervenciones- estima que cerrará este mes de marzo con unos 1.010 trasplantes.

 

El consejero de Sanidad del Principado, Faustino Blanco, visitó ayer el HUCA para compartir este logro con los integrantes del programa de trasplante, iniciado en 1988 de la mano de Dolores Carrera, hematóloga ya jubilada. El actual responsable del equipo es Carlos Vallejo. El pasado mes de agosto, LA NUEVA ESPAÑA distinguió a este equipo con el título de "Asturiano del mes" por haber completado todo el catálogo de técnicas que la medicina ofrece en materia de injertos hematopoyéticos.

 

El Consejero, acompañado por los directivos del área sanitaria de Oviedo, felicitó "a todos los profesionales que han hecho posible estos resultados" y les agradeció "su empeño, dedicación, y profesionalidad". "Estos resultados sólo pueden conseguirse mediante el trabajo en equipo, con dedicación, entrega y compromiso con el conjunto de la sociedad", subrayó el titular de Sanidad, quien hizo extensiva su felicitación a todo el programa de trasplantes del Hospital Central.

 

El hito del millar de trasplantes, al igual que la intervención pionera realizada recientemente el servicio de traumatología que evitó una amputación total de la pierna de una paciente afectada por un sarcoma, o una nueva técnica de cirugía cardiaca, son, a juicio del Consejero, manifestaciones "del enorme potencial" del conjunto de la sanidad pública asturiana.

 

El HUCA realizó en 2012, último año del que existen cifras homogéneas, 104 trasplantes de componentes hematopoyéticos, lo que lo sitúa como el tercer hospital del país en número total de procedimientos, por detrás del Clínico de Salamanca y del Virgen del Rocío de Sevilla. El año pasado esta cantidad aumentó hasta las 116 intervenciones.

 

Mil trasplantes de médula ósea en Asturias

El programa hematopoyético arrancó en 1988 y ha convertido al HUCA en el tercer hospital del país con mayor actividad de trasplantes

La operación se realizó en febrero y el protagonista fue un gijonés de 34 años

11.03.14 - LAURA FONSECA | OVIEDO, en El Comercio.

 

Después de permanecer 28 días ingresado en situación de aislamiento en una habitación del HUCA, el joven Alejandro Escorza Sánchez abandonaba ayer al mediodía el centro sanitario convertido en el asturiano con el trasplante de médula ósea número mil. El HUCA se inició en este tipo de intervenciones allá por 1988, de la mano de la doctora Loca Carrera, y ayer el servicio de Hematología vivía su particular día grande tras superar el millar de trasplantes hematopoyéticas y situarse ya en los 1.010. «Si fuera por cifras me hubiera gustado más que me tocara la lotería, pero me ha tocado esto», decía con cierta sorna, ya en plena calle y disfrutando «de los primeros rayos de sol que me saben a gloria», este gijonés de 34 años, al que el pasado septiembre le diagnosticaron un linfoma. La intervención para tratarle un tumor que le afecta a los ganglios se llevó a cabo en el HUCA a mediados de febrero pasado. Previamente, Alejandro se había sometido a varias sesiones de quimioterapia en Cabueñes y en noviembre, tras confirmar que su médula no estaba afectada por el tumor, «me extrajeron células madre y las congelaron para el posterior trasplante» de regeneración medular que se le practicó en febrero.

 

La numerología y el azar han querido que fuera él y su autotrasplante el que pasara a la historia como el mítico número mil, un estatus estadístico que hasta ahora sólo habían alcanzado en Asturias los trasplantes de riñón. Alejandro tenía tan solo ocho años cuando el Central inició este tipo tratamientos que permiten recomponer médulas óseas (con células propias o de donantes), pero también realizar trasplantes de cordón umbilical y de todo tipo de tejido hematopoyético, que es el encargado de fabricar nuestra sangre. «Jamás hubiera pensado que a mis 34 años estaría en esta aventura vital», admite este hostelero que hasta que se vio obligado a plantarle cara a su linfoma regentaba una vinatería en el barrio de El Carmen.

 

Ayer por la mañana, mientras hacía la maleta en la habitación del hospital donde estuvo casi un mes aislado «junto a mi madre, Mariángeles», que hizo de ángel de la guarda y de acicate emocional, Alejandro recibió una visita especial. La del consejero de Sanidad, que quiso «poner en valor» el importante trabajo que en materia de trasplantes de médula ósea realiza el HUCA y, en especial, el equipo capitaneado por Carlos Vallejo, que llegó en 2007 y «al que Foro quiso despedir», recordaría ya por la tarde, en otro escenario (en una comparecencia en la Junta), Faustino Blanco. Minutos antes de que Alejandro fuera dado de alta como el asturiano con el trasplante de médula número mil «el consejero me preguntó qué tal me habían atendido y cómo me encontraba. Le respondí con sinceridad, ya que me sentí muy bien atendido, no solo desde el punto de vista médico sino por la calidad humana de todo el equipo. Desde la que limpia hasta los facultativos. Todos».

 

Todo empezó con un bulto

«Un granín en el hueso de la risa» fue lo que disparó la alerta. Alejandro pensaba que se trataba de una simple verruga, «un incordio estético», pero una biopsia le confirmaría «algo mucho peor». Cuando «te dicen que sufres un tumor parece que tu mundo se acaba, pero hay que luchar y tirar para adelante», aconseja a cualquiera que se encuentre en una situación similar. «Se puede salir y se puede salir bien», insiste. Alejandro confiesa que el tratamiento «es durillo, lo pasas mal, pero el trasplante me cambió la vida». En sus 28 días de aislamiento, Alejandro recibió «un 'chute' de quimioterapia que acaba con tu médula». Luego le inyectaron sus propia células madre, las que le habían extraído en noviembre, que son las que se encargarán de regenerar su médula. Después de todo lo vivido, «que te dé el aire en la cara y puedas disfrutarlo es como un milagro».

 

Con la realización de más de un centenar de implantes hematopoyéticos al año, el HUCA es el tercer hospital con mayor actividad trasplantadora en España. Hasta Oviedo vienen a formarse médicos de todo el país y del extranjero.