Radiólogos y trabajadores de la UCI se suman a las críticas
65 trabajadores de la UCI cardiaca del HUCA critican el recorte de personal
Están en contra del «retroceso asistencial» que supondrá que algunos enfermeros pasen a atender a tres pacientes en lugar de dos
Foto.- Cama de UCI en el HUCA (archivo).
L. M. | GIJÓN, en El Comercio.
Nuevo escrito de un grupo de profesionales del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) contra las consecuencias del traslado a las nuevas instalaciones de la Cadellada. En esta ocasión son 65 enfermeros, médicos y auxiliares de la UCI cardiaca los que rubrican una carta -enviada a la Dirección de Enfermería del HUCA- en la que, además de incidir en «los graves errores de planificación y gestión», critican el recorte de personal que, aseguran, la Consejería de Sanidad llevará a cabo en su servicio. Porque, con el cambio de El Cristo a la Cadellada, «se pretende que en una de las nuevas unidades» de la UCI cardiaca, «algunos enfermeros atiendan en su jornada laboral hasta a tres pacientes, en vez de a dos, como hasta ahora». ¿Las consecuencias de esta decisión? «Una mayor tensión a los trabajadores y, por tanto, un descenso en la calidad asistencial», prevén los propios afectados que no encuentran otra justificación para esta medida que «el ahorro. Algo que contrasta con despilfarros de difícil justificación que bien conocemos desde hace tiempo por nuestro trabajo».
En su escrito, enfermeros, médicos y auxiliares instan a los responsables del HUCA a contratar al personal que sea necesario para mantener la ratio de dos pacientes por enfermero y cumplir así con las indicaciones de la Organización Mundial de la Salud porque lo contrario, dicen, sería «un retroceso asistencial».
La reivindicación laboral va acompañada además de un tirón de orejas a los responsables del nuevo HUCA, cuyo diseño se realizó «sin consulta ni participación alguna por parte de los trabajadores». Y así, apuntan, se dieron situaciones como que hubiera que «derribar tabiques» para poder pasar las camas por la puerta de las habitaciones.
También el polémico sistema informático con el que funciona el nuevo hospital, el Millennium, es motivo de crítica por este grupo de sanitarios, que reconocen que llegaron a la Cadellada «sin una formación adecuada» para poder desarrollar el proyecto previsto de un hospital sin papeles.
Radiólogos e intensivistas se suman a la creciente nómina de descontentos del HUCA
Los especialistas en rayos denuncian escasez de escáneres y resonancias y subrayan que el Millennium ha llevado el "caos"al área de hospitalización
09.07.2014, P. Á., en La Nueva España.
La insatisfacción se extiende por los diversos servicios del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA). A la creciente nómina de descontentos se suman 65 trabajadores de la unidad de vigilancia intensiva (uvi) de cirugía cardíaca y 26 médicos del servicio de radiodiagnóstico, que han optado por difundir sendos comunicados en los que detallan las causas de su malestar.
Los intensivistas reclaman más contrataciones, toda vez que, tras la mudanza al edificio de La Cadellada, "se pretende que, en una de las nuevas unidades, algunos enfermeros/as atiendan en su jornada laboral hasta a tres pacientes, en vez de a dos como hasta ahora", una medida que "provoca una tensión mayor a los trabajadores y por tanto un descenso en la calidad asistencial". Entre tanto, los radiólogos subrayan que "el equipamiento, a pesar de ser de última generación, ha disminuido en número con respecto al antiguo hospital, siendo el número de TC [escáneres] y resonancias insuficientes para dar un servicio de calidad, no pudiendo realizar los estudios, especialmente los más preferentes, en el tiempo recomendable".
Estos manifiestos de protesta se suman a los cuatro publicados con anterioridad por: 28 médicos de urgencias; 47 facultativos y enfermeros del área de pediatría; 24 psiquiatras; y 126 enfermeros y auxiliares de enfermería.
La situación en el servicio de radiodiagnóstico ya había sido muy tensa en el último año y medio del viejo HUCA. Ahora, los especialistas denuncian "carencias" de medios materiales, humanos y organizativos, y sostienen que el controvertido programa informático Millennium "ha roto" su sistema de trabajo, "llevando a la desesperación de todo el personal". Según los radiólogos, "cualquier tarea sencilla como solicitar una radiografía de tórax, una pequeña nota clínica, supone minutos y minutos". Esto hace que "nuestro tiempo médico" se reduzca y "ha convertido nuestro servicio en caótico, especialmente en la zona de hospitalización".
El personal de la uvi cardíaca sostiene que "el proceso con el que se ha acometido la puesta en marcha del nuevo HUCA no corresponde a una sociedad desarrollada y a un país democrático".
Ver en pdf:
- Carta abierta de los médicos radiólogos del HUCA
- Trabajadores de la UCI Cardiaca piden contrataciones
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