Empieza a escribirse la historia del nuevo hospital del área VII
Nacen los primeros bebés en el Hospital Álvarez Buylla
Son dos niñas gemelas que vinieron al mundo mediante una cesárea programada
Tanto la madre como las pequeñas se encuentran bien
El Comercio. 23.05.14 - 13:51 - ALEJANDRO FUENTE | MIERES
Dos niñas, hijas de ovetenses, han sido los primeros bebés en venir al mundo en el nuevo Hospital Álvarez Buylla. Las pequeñas nacieron a las 13 horas mediante una cesárea programada. Las niñas, gemelas, pesaron 2,590 kilos y 2,450, y se encuentran bien. También su madre, que se recupera después de la intervención. Según el personal de maternidad, la zona de partos es muy moderna y "no se podía pedir nada mejor".
Este es el primer parto en el centro que ayer se estrenó a pleno rendimiento. Durante el primer día de funcionamiento de los quirófanos se realizaron nueve intervenciones quirúrgicas: tres de ginecología, cuatro de traumatología y dos del servicio de cirugía.
Ayer, a las 8 horas, se abría el servicio de emergencias en Santullano y, después, se realizaban las operaciones. El primer paciente atendido en las urgencias del Vital Álvarez-Buylla fue M. R. I., un varón de 88 años que llegó al hospital a las 8.10 horas con un cuadro de insuficiencia cardiaca y que fue ingresado en planta. Fue asistido por la doctora Cristina Sánchez y por las enfermeras Reyes B. E. y Georgina V. R. Durante la primera mañana en Santullano, el servicio de urgencias atendió a 18 personas. Por su parte, las urgencias del hospital ubicado en Murias cerraron sus puertas a las 8 horas. En la última noche, este servicio del antiguo hospital atendió a cuatro enfermos.
En las diferentes plantas del nuevo Álvarez-Buylla la actividad era constante. Por los pasillos transitaba el gerente del área sanitaria del Caudal, Ricardo Arbizu, acompañado del director de Salud Pública del área sanitaria, Juan Saavedra; el personal administrativo estaba todavía vaciando cajas en los despachos y los facultativos de urgencias no paraban. El supervisor del servicio, Ángel Fueyo, mostraba las camas todavía vacías y los boxes a la espera de pacientes. «Ahora es cuando empieza lo realmente complicado, que esto eche a rodar», comentaba el gerente.
Sólo quince derivaciones
Arbizu detalló que ya están abiertas todas las plantas. También hizo balance de las derivaciones que se realizaron a otros hospitales en lo que duró el traslado y que implicó cerrar los quirófanos. Al final, fueron sólo una quincena de pacientes y la mayoría fueron a Avilés.
La actividad también se notaba en el exterior del recinto sanitario. En las calles del barrio de Santullano no quedaba un hueco libre para estacionar. Los coches daban vueltas y vueltas por el entorno en busca de un codiciado hueco gratuito. Muchos optaron por llevar su vehículo hasta el aledaño aparcamiento del centro comercial Caudalia. Los coches se agolpaban en el lado más alejado del acceso a las tiendas, que es el más cercano al hospital. Hace pocos días, la afluencia de vehículos no era tan elevada.
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