Una consecuencia inevitable del envejecimiento poblacional
La demanda de operaciones continúa creciendo y roza las 70.000 anuales
Los médicos asturianos indicaron 36.000 intervenciones en el primer semestre, un 2,7% más que en 2007
Oviedo, Pablo ÁLVAREZ para La Nueva España
La actividad en los quirófanos asturianos continúa aumentando a velocidad de crucero. En el primer semestre de 2008, entraron en las listas de espera de los hospitales públicos de la región 35.877 pacientes, un 2,7 por ciento más que en el mismo período de 2007.
El pasado 30 de junio, los centros sanitarios del Principado acumulaban 14.090 enfermos pendientes de una operación. Las autoridades sanitarias se topan con notables dificultades a la hora de contener el crecimiento de las demoras, pese a que la actividad de los centros sanitarios aumenta de forma paulatina.
La tendencia de los últimos años indica que los médicos de la sanidad pública de la región indican cada año un promedio de 2.500 intervenciones más que en el ejercicio precedente. En 2008 parece que este ritmo se mantiene, pues entre enero y junio se computaron casi 1.000 enfermos más que en el primer semestre de 2007, según datos del Servicio de Salud del Principado (Sespa).
En uno de los cuadros que ilustran esta información se observa que la mayor demanda la soporta, como es habitual, el Hospital Central de Asturias, donde entre enero y junio se contabilizaron casi 12.000 entradas en lista de espera. Entre tanto, el Hospital de Cabueñes, en Gijón, sumó casi 8.000 nuevas indicaciones de quirófano.
En todo el año 2007 fueron 65.803 los enfermos incluidos en una lista de espera. Se trata de una cifra muy superior a la registrada -por tomar una referencia más lejana- en 2003, cuando habían sido 55.580 los pacientes a los que se les prescribió una intervención.
Las estadísticas son inequívocas. Apuntan a un persistente aumento del consumo de servicios sanitarios. Crece la factura en fármacos y aumenta la demanda de operaciones. ¿Motivo? Los expertos atribuyen al progresivo envejecimiento de la población regional una parte importante del incremento de esta demanda.
No obstante, desde hace varios años los responsables sanitarios de Asturias reconocen su preocupación por la variabilidad de la práctica médica. El problema consiste en la adopción de distintas pautas de tratamiento de una enfermedad ante cuadros muy similares, circunstancia que se hace particularmente patente en patologías leves.
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