Asamblea de Delegados de CC.OO. de Asturias celebrada ayer en Gijón

CC OO llama a una gran movilización para exigir medidas anticrisis más eficaces

El secretario regional, Antonio Pino, carga contra las entidades financieras por no dar créditos

Gijón, María IGLESIAS

CC OO de Asturias reunió ayer en Gijón a un millar de delegados para poner en común ideas contra la crisis económica. El secretario general de la central en Asturias, Antonio Pino, acompañado por el secretario confederal de acción sindical de CC OO, Ramón Górriz, alentó a los trabajadores a «preparar una movilización regional para expresar nuestro rechazo por la crisis y reivindicar medidas eficientes».

Pino, que habló del crecimiento del número de parados en la región -que ya alcanza los 74.380- mostró su rechazo ante las propuestas de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) y criticó la actitud de las entidades financieras. «Siguen siendo refractarias a abrir la mano al crédito en los particulares y empresas», señaló. En referencia al presidente de la CEOE, Pino calificó a Gerardo Díaz Ferrán de «chupóptero que nada va a mejorar el empleo y sus condiciones».

También tuvo unas palabras para las medidas anticrisis del Principado, que tildó de «insuficientes y lentas». «Los acuerdos con las entidades financieras se están gestionando con lentitud, lo que demuestra la inoperancia e ineficacia de un Gobierno que en tiempos de crisis debe operar de forma ágil», apostilló Antonio Pino. Con el fin de llegar a acuerdos comunes, el secretario general de la organización sindical apostó por «reforzar el diálogo social y pegar un empujón a los gobiernos para que actúen de una manera responsable y consecuente». Ramón Górriz señaló el paro como el «principal problema» del país y abogó por elaborar de forma inmediata medidas concretas.

ECONOMÍA

Pino considera probable la parada del horno de Arcelor y la califica de «desastre»

«El escenario es muy preocupante y se está materializando ya en el recorte de las auxiliares», dice el líder de CC OO

El secretario general de Comisiones Obreras de Asturias (CC OO), Antonio Pino, mostró ayer su preocupación por la posible parada de uno de los hornos altos de ArcelorMittal y dijo que si se confirma sería «un desastre para nuestra siderurgia». Pino, que participó en Gijón en una asamblea regional de delegados con el lema 'Contra la crisis, movilización', señaló que el cierre del horno es probable y dijo que la situación que atraviesa la empresa es «muy preocupante».

La asamblea contó con una importante presencia de delegados y asistió también el secretario confederal de Acción Sindical de CC OO, Ramón Górriz, que anunció la celebración de una manifestación el día 14 del próximo mes de mayo, en Madrid, convocada por la Confederación Europea de Sindicatos, de forma simultánea con otras protestas en Berlín, Praga y Bruselas.

Antonio Pino, que es trabajador en excedencia de ArcelorMittal, dijo, sobre la siderúrgica asturiana, que «estamos en un escenario muy preocupante, que en una primera instancia se ha materializado ya en los planteamientos de recorte de contratos a empresas auxiliares con la pérdida de muchos puestos de trabajo». Sobre el posible paro del horno, el secretario general de CC OO dijo que «la amenaza está encima de la mesa como una espada de Damocles y si se confirma sería un desastre para nuestra siderurgia porque un horno no se para sin razones ni se arranca así como así». También mostró su preocupación por el posible expediente de regulación de empleo (ERE) que Arcelor pondrá encima de la mesa «en el momento en que se produzca el paro del horno».

Movilizaciones

En la asamblea de ayer, Ramón Górriz dijo que Comisiones Obreras «convocará movilizaciones para forzar un pacto anticrisis y no va a permitir que se apliquen medidas que perjudiquen a los trabajadores y pongan en riesgo de quiebra al sistema de la Seguridad Social». También dijo que su sindicato «no va a aceptar la propuesta de la patronal para reducir en tres puntos las cotizaciones a la Seguridad Social porque representa unos 11.000 millones de euros al año y pondría en peligro la continuidad del sistema en un plazo de cuatro o cinco años».

Antonio Pino, por su parte, volvió a recordar la convocatoria a una movilización regional antes del verano, que se celebrará con o sin la presencia de UGT, y expresó su «gran preocupación» por la situación económica regional.