Nuestro Hospital administró la epidural en el 71 por ciento de los 522 partos que registró, 6 puntos por encima de la media regional

La epidural ya se usa en el 66 por ciento de los partos atendidos en las Cuencas

La tasa de alumbramientos con anestesia supera la media regional a pesar de que los hospitales promueven los métodos naturales para aliviar el dolor

Mieres / Langreo,
C. M. BASTEIRO
Los hospitales de las Cuencas utilizaron la epidural en el 66 por ciento de los partos que atendieron durante el pasado año. El porcentaje es un punto superior al de la media regional, situado en el 65 por ciento, y ello a pesar de que en los centros sanitarios se apoyan los métodos naturales para aliviar el dolor y se promueven los partos sin analgesia.

El Hospital Valle del Nalón, en Langreo, administró la epidural en el 71 por ciento de los 522 partos que registró. Por su parte, el Hospital Álvarez Buylla, en Mieres, administró la anestesia en el 62 por ciento de los 390 nacimientos atendidos. En total, en las Cuencas, se registraron 912 partos en 2008 y en ellos se utilizó la epidural en 611 casos, lo que arroja un porcentaje medio del 65 por ciento.

En cuanto a los partos quirúrgicos, en el centro hospitalario de Mieres se realizó la cesárea a más del 22 por ciento de parturientas y en el Nalón la tasa sobrepasó el 15 por ciento. Las Cuencas también registran un alto uso de la incisión quirúrgica denominada episotomía. En el Caudal, se utilizó en el 69 por ciento de los casos, mientras que el Hospital Valle del Nalón lo hizo en más del 80 por ciento. Esta polémica técnica es tachada por innecesaria y agresiva por sus detractores, mientras que sus defensores aseguran que favorece la salida del bebé y no acarrea consecuencias para la madre ni para el recién nacido.

A pesar del alto índice de uso de la epidural, los centros hospitalarios apoyan los métodos naturales para aliviar el dolor y promueven los partos sin analgesia. Los profesionales reconocen que «la epidural ha mejorado notablemente el proceso porque ahora las mujeres colaboran más» pero puntualizan que «hay ocasiones en las que la anestesia no es lo mejor». Por ese motivo, los hospitales de las Cuencas cuentan con una amplia selección de métodos y remedios naturales para aliviar el dolor de las parturientas.

El Hospital Álvarez Buylla tiene una silla anatómica que permite a la mujer adoptar una postura más cómoda a la hora de dar a luz y que ofrece la posibilidad de regular los apoyos de las piernas a la altura de la parturienta. Además, el equipo del Álvarez Buylla promueve el uso de la pelota suiza en la sala de dilatación. El balón, el mismo que se utiliza en algunos ejercicios de Pilates, ejercita a las mujeres durante la preparación al parto y permite una cierta disminución del dolor durante las contracciones, al realizar oscilaciones de la pelvis sentadas en él. En el Hospital Valle del Nalón también hay programas similares y en ambos centros se utiliza la monitorización continua y se promueve el alta precoz. En Mieres existe un comité de lactancia y otro para la estrategia del parto natural.

A pesar de los avances y las técnicas paliativas al dolor, desde ambos centros aseguran que buena parte del alivio durante el parto llega de la mano de una buena atención personalizada a las mujeres. Tanto es así, que en el Hospital Álvarez Buylla, las futuras mamás visitan la sala de partos «unas semanas antes de salir de cuentas» con el fin de familiarizarse con el lugar. Además, el equipo médico se aprende el nombre de las mujeres porque, según declaran, «calma mucho ir a un centro hospitalario y comprobar que el personal te trata por tu nombre». Y es que «el peor enemigo de una mujer durante el parto es el miedo», señaló María José Migoya, matrona del Álvarez Buylla.