Responsabilidades y explicaciones

A oscuras: Los sindicatos exigen a Salud que aclare el apagón del Hospital para que no se repita

El servicio de mantenimiento del centro sanitario atribuye el fallo eléctrico a «un conmutador que se había probado la semana pasada y funcionaba»

La Nueva España. M. PÉREZ

Los sindicatos exigieron ayer explicaciones a la Consejería de Salud sobre el apagón que el martes puso en alerta el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) al fallar los generadores de emergencia en algunas áreas tan sensibles como urgencias, los quirófanos y la uvi, donde las máquinas resistieron gracias a las baterías autónomas. Responsables de los distintos sindicatos con representación en el centro hospitalario consultados ayer por LA NUEVA ESPAÑA lamentaron, en mayor o menor grado, lo sucedido, a la vez que explicaron que aún no han recibido una explicación «oficial» sobre lo sucedido.

Fuentes del servicio de mantenimiento explicaron ayer que el apagón del martes fue debido a «un fallo de un conmutador» que, al parecer, «ya se había probado la semana pasada y funcionaba».

La responsable de sanidad de la Unión Comarcal de Oviedo de Comisiones Obreras, Joaquina Fernández, aseguró que «la zona de cogeneración donde se produjo el fallo eléctrico está en unas condiciones muy precarias». Así, la responsable sindical exigió «un mayor control» porque «no es la primera vez que se produce un apagón importante y estas cosas no deberían pasar». Fernández también criticó la «falta de información» sobre lo sucedido, algo a lo que, asegura, «nos tienen acostumbrados».

De «hecho lamentable» calificó el apagón la secretaria en Asturias del sindicato de enfermería SATSE, Margot Marqués. «El mantenimiento tiene que ser escrupuloso. Ha sido un fallo lamentable y que no funcionen los generadores también. Afortunadamente no ha pasado nada gracias a los excelentes profesionales que tiene el Hospital, que están preparados y supieron sortear la situación. Deben ponerse las medidas necesarias para que no vuelva a suceder», dijo.

El responsable de UGT, Benjamín Menéndez, espera que la junta de personal que se celebra hoy en el Hospital Central trate el apagón. «En la zona donde yo estoy duró más de una hora, por lo menos hasta las dos y media de la tarde», dijo. «Estamos acostumbrados a pequeños apagones, pero de unos diez minutos», señaló. «El mantenimiento está como está», añadió el responsable sindical.

Por su parte, el portavoz de la junta de personal y responsable del sindicato SICEPA, Francisco Martínez, comentó que el fallo en el sistema eléctrico del pasado martes se debió a «una serie de fallos en cadena», algo que calificó de «imprevisible». «No es habitual», dijo, «este Hospital tiene los años que tiene. Pasó una vez, durante un tiempo breve. Esperamos que no vuelva a suceder más».

La Consejería de Salud del Principado declinó realizar una valoración sobre el apagón en el Hospital, postura que también mantuvo el Sindicato de Auxiliares de Enfermería (SAE) .

Localización

El apagón se debió, según el servicio de mantenimiento, a la avería de un conmutador, que afectó a todo el complejo hospitalario en el Cristo.

Duración

El fallo eléctrico se prolongó durante un tiempo aproximado de media hora el martes por la mañana, aunque, una vez resuelta la avería, volvió a fallar por momentos en alguna zona del Hospital.

Áreas afectadas

Los generadores de emergencia no entraron en funcionamiento al menos en urgencias, la uvi y los quirófanos. Los médicos tuvieron que atender a oscuras a los pacientes en urgencias, las máquinas de la uvi resistieron gracias a las baterías autónomas y en los quirófanos se suspendieron las operaciones que no habían comenzado y se apuraron con técnicas tradicionales las intervenciones quirúrgicas que el apagón sorprendió ya iniciadas.

Operaciones de ida y vuelta

M. P., para La Nueva España
La zona de quirófanos del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) fue una de las más afectadas por el apagón del martes en el centro sanitario.

Trabajadores del Hospital explicaron ayer a este periódico que algunas de las operaciones previstas cuya hora coincidió con la del apagón se tuvieron que suspender. «Hubo que coger las camillas y dar media vuelta. No se puede iniciar una intervención quirúrgica en esas condiciones», aseguraron ayer las mismas fuentes.

Los cirujanos que estaban en quirófano tuvieron que apurar la intervención y recurrir a técnicas más tradicionales al no poder utilizar el instrumental eléctrico, como un bisturí, o la ventilación al paciente, que fue manual.

Operar ´a dos velas´

El apagón del HUCA inhabilitó bisturís eléctricos y monitores, pero los respiradores funcionaron con normalidad Varias intervenciones quirúrgicas fueron aplazadas.

14/01/2010 J. CUEVAS, para La Voz de Asturias

El corte en el suministro eléctrico que el pasado martes dejó sin luz a distintas zonas del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) no causó problemas en la actividad del centro sanitario, pero sirvió para recordar que la mayoría de aparatos funcionan hoy con energía eléctrica.

En los quirófanos del HUCA, el fallo eléctrico impidió la utilización de los monitores en las intervenciones quirúrgicas que se estaban llevando a cabo. Tampoco pudieron utilizarse los bisturís eléctricos, por lo que hubo que recurrir a herramientas tradicionales de la medicina moderna, igualmente válidas pero sin toma de corriente.

"La luz iba y venía", señaló una trabajadora del área de Maternidad. Y los grupos electrógenos de emergencia funcionaron en el caso de los sistemas de ventilación menánica o respiradores. Con los medios de los que se disponía sin luz, los trabajadores de quirófanos defendieron ayer la capacidad de los profesionales del HUCA para llevar a cabo las intervenciones en marcha sin problemas.

Así todo, varias operaciones fueron aplazadas a causa del apagón. El personal de quirófano explico ayer que, aunque "la plantilla tiene la formación suficiente" para responder a un imprevisto como el del martes, "se tuvieron que suspender porque si se produce un sangrado no se podría cauterizar". Para cerrar el foco de la sangre se utiliza el bisturí eléctrico.

El hospital y los trabajadores no se ponen de acuerdo en las zonas que fueron afectadas ni en la duración de los problemas en el suministro eléctrico. Mientras desde el HUCA se mantiene que el apagón duró 15 minutos y solo dejó sin luz al edificio de la Residencia Covadonga, la plantilla añade la zona del Materno al área no iluminada del complejo.

En lo que sí coinciden es en lo inusual de un apagón de estas características. "Fue un fallo en cadena que se da una vez entre mil", manifestó el presidente de la Junta de Personal del Area IV y portavoz del sindicato de celadores USIPA, Francisco Menéndez,que recordó además que el HUCA prueba cada viernes los grupos electrógenos de emergencia. "suerte que fue por la mañana. Había electricistas y se pudo atajar rápido. Si hubiera ocurrido de fin de semana hubiera sido mas complicado", apuntó.

Fuentes cercanas a la dirección del centro reconocieron las molestias causadas por el corte de luz, pero subrayaron que este no tuvo repercusión en la actividad. "Es algo que no ocurre con frecuencia, pero que pasa en todos los hospitales del mundo", añadieron las mismas fuentes. El último apagón que recuerdan los trabajadores del HUCA se produjo hace dos años, aunque su alcance fue menor que el de esta semana.