El Principado asegura que los trabajos que restan pueden ir deprisa y ser realizados en lo que queda de año
Las obras del nuevo Hospital Central agotaron los plazos con un 30% sin ejecutar
«En el sector de la construcción todo el mundo sabe que el sobrecoste va a ser de 120 millones», afirma Mortera
Imagen del nuevo Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) tomada a media mañana de ayer. nacho orejas
La Nueva España. Oviedo, A. MENÉNDEZ / P. ÁLVAREZ
A las obras de construcción del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) aún les falta por ejecutar un 30 por ciento del total. Así lo admitieron fuentes del Gobierno regional ayer mismo, 48 horas después de que venciese el plazo otorgado a las constructoras para ejecutar la totalidad de los trabajos y en plena discusión por el coste de una segunda serie de modificaciones del proyecto introducidas por la Administración regional.
Si se atiende a lo estrictamente numérico, la porción de actuaciones pendientes puede parecer muy elevada. Pero esa apreciación no merma el optimismo de los responsables del Principado, quienes aseguraron que los trabajos pendientes de ejecución «pueden hacerse relativamente rápido». Gispasa, empresa pública responsable del proyecto, reiteró ayer que considera viable su pretensión de que las obras estén terminadas a finales de este año. «Es fundamentalmente una cuestión de voluntad», apostilló un portavoz de la compañía pública. De cumplirse este pronóstico, resultaría que el 70 por ciento de los trabajos se efectuaron en 58 meses y el 30 por ciento restante en poco más de ocho meses.
Por el momento, Gispasa está negociando con las empresas Sacyr, San José y Sánchez y Lago el contenido y los plazos de las modificaciones y mejoras que el Ejecutivo regional plantea. Las posiciones son antagónicas. Las constructoras reclaman más tiempo y más dinero. Las obras se licitaron en 205,3 millones de euros y un primer sobrecoste añadió 54,5 millones. Está por determinar el montante del segundo sobrecoste. Gispasa aspira a cerrar este mismo mes un pacto a este respecto.
El pasado miércoles, 7 de abril, concluyó el plazo de 58 meses del que disponían las empresas para levantar la nueva sede del HUCA en los terrenos de La Cadellada. Ayer, Gispasa reconoció por vez primera cuál es la situación real de la infraestructura sanitaria, tal vez el proyecto más relevante de todos los que pueden entrar en el balance de gestión de los ciudadanos con vistas a las elecciones autonómicas y municipales previstas para mayo de 2011.
Fuentes de la empresa pública señalaron que la mayor parte de los cambios que están en fase de estudio se derivan de peticiones de los médicos del actual Hospital Central. Otros -de menor envergadura, según Gispasa- consisten en innovaciones tecnológicas que en el momento de la redacción del proyecto arquitectónico eran impredecibles. En términos generales, los responsables del Principado sostienen que, en torno al nuevo Hospital Universitario Central de Asturias, «no es correcto hablar de sobrecostes, porque lo que se está haciendo es dar respuesta a lo que piden los médicos».
Uno de los capítulos en los que se han incorporado modificaciones es el relativo a la urbanización del entorno del HUCA. Más en concreto, a la circunvalación del recinto y a los accesos al edificio. Gispasa no ha desvelado detalles de estos cambios. Alberto Mortera, concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Oviedo, subrayó que desde el Consistorio «vamos a colaborar en todo lo que pidan, incluso vamos a ceder suelo gratuitamente para la acometida del gas». Según Mortera, «en el sector de la construcción todo el mundo sabe que los dos sobrecostes del HUCA van a sumar unos 120 millones de euros».
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