La nueva temporada gripal...

Salud aspira a vacunar contra la gripe a 231.000 asturianos el mes que viene

La campaña se desarrollará entre el 4 de octubre y el 12 de noviembre

Las dosis incluirán el componente A(H1N1), que dio origen a la pandemia

Oviedo, E. F.-P. / P. Á., en La Nueva España

La Consejería de Salud del Principado ofrecerá a los asturianos un total de 231.480 dosis de vacuna antigripal. La campaña de inmunización comenzará dentro de dos semanas: se desarrollará entre el 4 de octubre y el 12 de noviembre.

La temporada que ahora comienza significará la vuelta a la rutina después del azaroso otoño de 2009, en el que se aplicó la vacuna contra la gripe estacional y, más tarde, se ofertó la dirigida al nuevo virus A(H1N1). De hecho, se aplicarán las habituales vacunas trivalentes, que en este caso incluyen ese componente A(H1N1) que el año pasado dio origen a la controvertida pandemia mundial declarada por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

La aplicación de la vacuna se llevará a cabo de forma gratuita en el caso de los ciudadanos incluidos en los grupos de riesgo a los que se dirige. El coste de las dosis asciende a cerca de 1,2 millones de euros, cifra resultante de sumar el importe de las 219.340 dosis normales y las 12.140 dosis reforzadas, cuyo efecto inmunizador está potenciado y pensado para la vacunación de mayores de 65 años que residen en instituciones geriátricas. El precio de cada una de las primeras es de 5,05 euros. El de las segundas, de 7,15 euros.

La vacuna se dirige esencialmente a dos grandes colectivos poblacionales: mayores de 65 años y personas afectadas por enfermedades crónicas. Las autoridades sanitarias también recomiendan la vacunación a los trabajadores de centros sanitarios y de la tercera edad, y al personal de servicios públicos considerados esenciales (policías, bomberos, operarios de Protección Civil?). Asimismo, la Consejería recomienda la vacunación a las mujeres cuyo embarazo coincida con la temporada de actividad gripal, en particular si presentan factores de riesgo de complicaciones relacionadas con la gripe.

La intención de las autoridades sanitarias es que la vacuna llegue al 65 por ciento de los mayores de 65 años, tasa que no fue alcanzada en los cuatro últimos años, ni siquiera la pasada campaña, cuando estaba en pleno apogeo la psicosis social generada por la gripe A. El año pasado, los mayores más renuentes a recibir la vacuna fueron los de las áreas sanitarias urbanas (las de Oviedo, Gijón y Avilés), en las que no se alcanzó el objetivo del 65 por ciento, que sí fue logrado en las cinco áreas restantes de la región.

Según los datos de la Consejería de Salud, el otoño pasado fueron vacunados contra la gripe 222.909 asturianos, una cifra que supuso un incremento de 7.704 dosis con relación a la campaña de 2008. La cifra de inmunización más elevada de los últimos quince años se registró en el otoño de 2005, cuando se aplicaron 225.260 dosis.

Los enfermos empiezan a llegar a las consultas de los médicos, que esperan «un año tranquilo»

Oviedo, P. Á. / E. F.-P., en La Nueva España
Los primeros casos de gripe empiezan a llegar a las consultas de primaria. Nada anormal, dicen los médicos. Ésta es la fecha en la que el virus comienza a extenderse, con la bajada de las temperaturas, pero aún falta un par de meses para que el contagio sea importante y afecte a un número considerable de personas

El doctor Salvador Tranche, experto en Medicina Familiar y Preventiva, presagia «una evolución normal» de la gripe, ya superada la alarma que la aparición de una nueva cepa, la A(H1N1), provocó en 2010. «Va a ser un año tranquilo, en nada diferente de los anteriores», afirma.

Tranche explica que a Asturias la gripe suele llegar con una semana de retraso respecto al resto del país. «Vemos casos puntuales en septiembre y octubre, el pico más alto lo tenemos en diciembre, y suele volver a subir otra vez en febrero», cuenta.

«La Organización Mundial de la Salud prevé una incidencia similar a la de otros años», indica Juan Caunedo, responsable de Medicina Preventiva del Instituto Nacional de Silicosis. Él es partidario de extender la vacunación a toda la población. «Lo ideal, desde una perspectiva preventiva, sería vacunar a todo el mundo; no se hace porque es caro y una persona con una salud normal es perfectamente capaz de soportar una gripe», sostiene.

Ambos médicos aconsejan no olvidar lo aprendido el año pasado, en el que tanto se incidió en las medidas higiénicas para evitar el contagio. «Todos los procedimientos preventivos que se recomendaron para la gripe A son útiles para la estacional. Clínicamente son lo mismo», observa Caunedo. Tranche expone que, en primer lugar, «hay que identificar bien el cuadro -fiebre alta, dolores musculares y articulares, quebrantamiento general- para no confundir una gripe y un resfriado» e incide en extremar las medidas higiénicas; básicamente, lavarse las manos a menudo y usar pañuelos de papel.

Cuando la enfermedad ya es un hecho consumado, queda el recurso de los analgésicos y antipiréticos. Reposar e hidratarse bien completan el tratamiento. «No es una enfermedad grave. La mortalidad de la gripe va asociada a enfermedades crónicas, respiratorias o del sistema inmunitario», observa.

Estrategia contra la gripe

Vacunación

A mayores de 65 años y personas con enfermedades crónicas.

Medidas higiénicas

Lavado de manos frecuente y utilización de pañuelos de papel.

Tratamiento

Analgésicos, antipiréticos, reposo y mucha hidratación.