Se crea una unidad específica para tratar esta dolencia en el HUCA

1.500 pacientes de ictus al año

La dolencia es la segunda causa de muerte en España y se prevé que su incidencia aumente un 27% en los próximos 15 años

El HUCA crea una unidad específica para tratar los accidentes cerebrovasculares

27.11.10 - E. C. | OVIEDO, en El Comercio.

El ictus mata, cada año, a 80.000 españoles. O los deja con serias discapacidades. En la región, el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) recibe 1.500 ingresos al año, por lo que el complejo ha puesto en marcha una unidad específica para tratar esta dolencia que es, ya, la segunda causa de muerte en todo el país. En Asturias, es la primera para las mujeres.

La necesidad de esa unidad, la número 40 de todo el país y que ayer presentaron Julio Pascual, jefe de servicio, y Sergio Calleja, responsable del nuevo dispositivo, está justificada porque según la Organización Mundial de la Salud (OMS) la incidencia aumentará un 27% en los próximos 15 años.

Además, la OMS explica que un ictus se ha convertido en la principal causa para la dependencia sobrevenida y la primera para las demencias.

Y todo por la ruptura u obstrucción de una de las arterias que proporciona riego sanguíneo al cerebro. Según explicó ayer el HUCA en un comunicado, el ictus se manifiesta con una súbita disfunción neurológica, es decir, el afectado sufre, repentinamente, una parálisis, un trastorno en el lenguaje o algún problema en la sensibilidad.

En la sexta planta

Para frenar los negativos porcentajes, los expertos entienden como básico ofrecer a los pacientes una asistencia precoz y especializada, que permita destaponar la arteria o, si no es posible, mejorar la situación, para que el sufrimiento cerebral se minice.

Y eso es lo que ofrece el HUCA con su unidad, dotada con seis plazas, una cifra que representa una ratio de una cama de tratamiento especializado por cada 100.000 habitantes. El dispositivo, ubicado en la sexta planta del Hospital General, en un extremo de la sección de Neurología, ha logrado ya una reducción en la tasa de mortalidad del 15%.