Siguen y siguen creciendo

Asturias acude hoy a las urnas con casi seis mil «indignados» en las calles

La movilización de Democracia Real Ya sigue creciendo y salta de Oviedo, Gijón y Avilés a Pola de Siero, Langreo y Mieres
La Policía evitó la intervención pese a que la Junta Electoral prohibió las concentraciones para que no afectaran al proceso electoral

Foto: Daniel Tripa, uno de los portavoces del movimiento «indignados» en Oviedo, ayer, rodeado de miles de personas en la Escandalera.

Esta información ha sido elaborada por: J. VIVAS (Mieres), E. PELÁEZ( Sama), F. TORRE (Siero), R. L. MURIAS (Oviedo), E. CAMPO (Avilés), para La Nueva España

En Asturias, 901.960 asturianos están convocados hoy a las urnas mientras seis mil «indignados» mantienen su protesta en las calles reclamando reformas que garanticen una democracia más directa y real, y de un sistema electoral «más justo».

Pese a que la Junta Electoral había prohibido las movilizaciones, las concentraciones se multiplicaron y pasaron de registrarse en Oviedo, Gijón y Avilés a Pola de Siero, Langreo y Mieres. «Esto no ha hecho más que empezar», explicó ayer uno de los portavoces del movimiento. Hubo momentos en que en Oviedo hubo más de dos mil personas concentradas en la Escandalera y la cifra alcanzó las seis mil en toda la región.

Aunque la Junta Electoral Central y la Junta Electoral Provincial alertaron de que ayer, jornada de reflexión en España, no se podía hacer ninguna manifestación, la Policía evitó intervenir y los «indignados» continuaron su particular «cruzada», eso sí, concentrados pero «sin manifestarse», explicaron. Ayer, miles de personas se congregaron en la plaza de la Escandalera en Oviedo (uno de los centros neurálgicos de la protesta en Asturias) para escuchar «qué tienen que decir estos chavales», aseguraba María López, que a sus 74 años sale a pasear todos los días con su marido por Oviedo y «ahora me acerco a apoyar, porque a mí también me duele y, a la vez, estiramos las piernas». Esta reivindicación, que nació del movimiento 15-M, cuando la plataforma Democracia Real Ya llamó a la masas a manifestarse a través de las redes sociales en las principales ciudades de España, no para. Y aunque la Policía ha alertado de que se podrán poner sanciones por manifestarse pese a las advertencias, e incluso el Tribunal Superior de Justicia de Asturias, a través de su presidente, Ignacio Vidau, señaló de que la resolución de la Junta Electoral Central es de obligado cumplimiento, ayer la lucha de los «indignados» tomo más fuerza. Además, durante la noche de la jornada de reflexión, fueron cientos los que optaron por hacer noche en la calle en Oviedo, en Gijón y Avilés. La Policía «estuvo vigilándonos hasta las dos de la mañana, pero al final optaron por irse a tomar algo porque aquí no hay problemas, nos reunimos de forma pacífica, tratamos nuestros temas, unos tocan la guitarra, otros leen poemas», explicó ayer Daniel Tripa, uno de los portavoces ovetenses.

En Asturias, el movimiento «indignados» no se plantea crear un partido político, una posibilidad que abrieron ayer los concentrados en Madrid. «No es nuestro objetivo, esto es un movimiento ciudadano. Se trata de luchar por reformar el sistema democrático y por que se nos escuche y se tengan en cuenta los problemas de la gente, de los que toman el micrófono», asegura Tripa. Y coge el micro.

«La intención es seguir después de las elecciones y hasta conseguir nuestro objetivo»

Y «para que no quede ninguna duda de que nuestro movimiento nada tiene que ver con las elecciones, vamos a seguir adelante más allá de mañana (por hoy)», explicaron ayer los «indignados» de la Escandalera. «Si no seguimos con esta lucha, si paramos por las elecciones, nada de esto habrá servido para nada», argumentaba ayer otra manifestante, Laura Bécares, de 23 años, que ayer estuvo en la plaza ovetense junto a su padre, de 60 años.

De momento, el objetivo de ir a más parece que está cumplido. Eso sí, el «indignado» que había iniciado su cruzada en solitario en Nava se ha retirado de la lucha.

En Gijón no cabía ni un alfiler a eso de las ocho de la tarde. «Hay más gente que ayer, estamos unas dos mil quinientas personas y esto va cada día a más», asegura María González, una de las impulsoras de este movimiento en Asturias. Fluctuante por horas pero creciendo en intensidad según se acercaba la noche, la concentración de los «indignados» avilesinos reunió en la plaza de España no sólo a jóvenes, sino también a personas de todas las edades en busca de un nuevo horizonte social y político. A lo largo del día se fueron sucediendo diversas actividades, como talleres y juegos. Pero la palabra fue la principal protagonista, tanto escrita en carteles como hablada con pasión en esta ágora acostumbrada a una vida más sosegada. Los ánimos de los avilesinos concentrados son de continuar la «spanishrevolution» cuanto más tiempo, mejor, haciendo turnos para mantener viva la protesta también por las noches.

Convocados a través de las redes sociales, alrededor de un centenar de jóvenes se dieron ayer cita en la plaza del Ayuntamiento de Mieres. La concentración se inició a las siete de la tarde y, al igual que ocurrió en el resto de localidades, se desarrolló sin incidentes. Uno de los jóvenes tomó la voz a través de un megáfono para señalar que la crisis, en las Cuencas, «es algo que llevamos sufriendo muchos años y todos sabemos quién tiene la culpa». Asimismo, se instó a los presentes a no pronunciarse sobre la campaña electoral, «no pidáis el voto de nadie, no les demos razones para que nos echen de aquí», afirmaba el joven. La Policía Nacional hizo acto de presencia a los pocos minutos de iniciarse la concentración, aunque sólo para informarse de quién había organizado la quedada, sin tratar de disolver a los presentes.

En Langreo, más de lo mismo. Cerca de un centenar de personas se congregaron en un espacio dominado desde hace 22 días por las tiendas de campaña de los empleados de Alas Aluminium, que reclaman una solución para la empresa, que se encuentra inmersa en un concurso de acreedores. «Acamparemos juntos porque nosotros también apoyamos a los trabajadores de Alas», señaló Hugo Muñoz, uno de los portavoces. Los concentrados se dirigieron a ellos para pedirles permiso para acompañarlos en su protesta. «Les preguntamos que si no les parecía mal que eligiésemos el mismo lugar que ellos para reunirnos», dijo. A las seis de la tarde decidieron que continuarían en la plaza y varios confirmaron su intención de pasar la noche en la plaza. Quedaron a las ocho para celebrar una nueva asamblea a la que se incorporaron más personas convocadas por las redes sociales.

Más de 200 personas de todas las edades se concentraron en la tarde de ayer frente a la plaza del Ayuntamiento de Pola de Siero para pedir un cambio sociopolítico en el país. La concentración comenzó a las siete de la tarde, después de una de las actuaciones englobadas en el festival del títere y la palabra «Titeresí», que se celebra este fin de semana en la localidad. Los participantes, que habían sido convocados vía Facebook, tuvieron en todo momento un comportamiento cívico y se abstuvieron de emitir consignas más allá de dos pancartas, pegadas en el suelo frente a la Casa Consistorial, que invitaban a los presentes a tomar la calle y a callar «para poder seguir gritando». Hoy muchos de los «indignados» irán a votar, pero según aseguran «seguirán en la calle».