Mas sobre el informe de la Fundación Bamberg
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Estudiar medicina, ¿excelencia o vocación?
Expertos sanitarios y educativos proponen modificar el sistema de acceso a las facultades .
Creen que exigir una nota de corte de 9,8 «no es un buen método de selección, pues deja fuera a jóvenes con capacidades sobradas».
22.05.11 – GIJÓN, en El Comercio.
«¿Cómo es posible que para ser médico, para poder estudiar en una facultad de medicina, se exija una nota promedio de un 9,8? ¿De verdad creemos que éste es un buen método de selección?». El cuestionamiento parte de un grupo de expertos sanitarios y educativos que ponen en entredicho el actual sistema de acceso a las facultades médicas, basado en la obtención de una nota de corte que cada año es más alta. En la Facultad de Oviedo más de 2.000 aspirantes quedaron fuera en la última convocatoria al no haber alcanzado la nota de corte, que una vez más se sitúo entre las más elevadas del país (un 12,579, según la nueva Selectividad).
Exministros de Sanidad, antiguos y actuales decanos y consejeros de Salud de diferentes autonomías consideran que el método empleado para ingresar en Medicina «deja fuera a muchos jóvenes con capacidades sobradas para ser médico». Así lo ponen de manifiesto estos especialistas en un informe que acaba de hacer público la Fundación Bamberg y en cuya confección han participado, entre otros, antiguos ministros como Bernart Soria, Ana Pastor y Julián García Vargas. Consideran que el sistema ahora empleado «olvida» un aspecto fundamental en Medicina: «la vocación». Y alertan, en este sentido, que «estamos logrando no sólo que jóvenes vocacionales no puedan ser médicos, sino que otros que no tienen esa vocación entren en Medicina solo por el hecho de haber alcanzado la nota promedio requerida». Los expertos consideran contradictorio que en España haya escasez de facultativos y que quienes quieren estudiar Medicina «no puedan hacerlo». Asimismo, apuntan que «hoy en día se da el caso de que hay más plazas de médico residente (MIR) que licenciados, mientras que un alto porcentaje de plazas de MIR son ocupadas por extranjeros, generalmente extracomunitarios».
En su opinión, «los procesos actuales basados en la nota media de Selectividad y Bachillerato para el acceso a la carrera, no garantizan la idoneidad de la persona para desarrollar esta carrera».
¿Qué proponen? Cambiar el actual sistema de acceso por «un proceso más completo en el que se demuestren las aptitudes y las actitudes del candidato». Ponen de ejemplo los métodos utilizados en otros países. En Inglaterra, explican, hay un pregrado que conduce a Medicina. Además, los candidatos deben pasar una entrevista personal. En Estados Unidos deben contar con algún pregrado en Biología o Física. También puntúa el haber hecho voluntariado.
El sistema que plantean los especialistas convocados por la Fundación Bamberg pasa por diseñar un examen de selectividad específico para quienes quieren hacer Medicina. El mismo incluiría una prueba del idioma inglés hablado y escrito. El examen se completaría con entrevistas o tests que recojan aspectos vocacionales, aptitudes emocionales y habilidades, además de conocimientos. Estos criterios serían aplicables también para los farmacéuticos, enfermeros y demás profesionales sanitarios.
Alumno interno, con prácticas reales como examen de calificación
22.05.11 – El Comercio.
La facultad en el hospital. Las formas de enseñar están cambiando y deberán «hacerlo mucho más». Gestores, profesores y decanos de Medicina coinciden en que eso de ir a clase, pupitre de por medio, empieza a ser un vestigio del pasado académico. Los especialistas hablan ya de la figura del alumno interno. Un estudiante en el que buena parte de sus horas lectivas pasen dentro de un hospital. «Debería ser obligatorio superar las prácticas reales para aprobar materia previo examen práctico real. Es necesario un cambio estructural y de filosofía de la enseñanza, y una nueva concepción tutorial que permitiera un mejor y mayor conocimiento del alumno y del trabajo en equipo con otros profesores», indican los especialistas. Asimismo, proponen que los MIR estudien inglés, Informática y Estadística, además de que dediquen parte de sus horas de formación a investigar.
Auditar e inspeccionar hospitales públicos y privados para evaluar sus resultados
22.05.11 - L. F. | GIJÓN, en El Comercio.
Auditar e inspeccionar hospitales, tanto públicos como privados, para evaluar sus resultados. En opinión de expertos y gestores en sanidad, las autonomías deberían implicarse mucho más en el día a día de sus hospitales y centros de salud. Aclaran, eso sí, que los consejeros de Salud «no deben gestionar los hospitales ni los centros asistenciales» de Primaria, pero sí consideran que es «su responsabilidad evaluar los resultados, los estándares de calidad y el nivel de satisfacción de los usuarios».
En el informe elaborado por la Fundación Bamberg, del que ayer dio un adelanto EL COMERCIO, se deja entrever que en la actualidad hay muy poco control del mercado sanitario. Las autonomías, concluye la investigación, desconocen los resultados de salud alcanzados por los diferentes centros asistenciales. Algo que en opinión de los participantes «debe cambiar». Y «debe cambiar» porque la sanidad pública afronta años de incertidumbre económica. Los expertos consultados por la Fundación Bamberg se decantan claramente en contra de implantar el copago. No lo consideran una solución alternativa a los problemas de financiación. Proponen medidas más radicales: la erradicación de algunas prestaciones vinculadas a dolencias menores o a cuestiones de hostelería o confortabilidad sanitaria. Para los servicios que serían retirados plantean crear un seguro complementario que sería costeado por los propios ciudadanos. Se trataría de algo voluntario, aclaran.
El panorama que los especialistas dibujan para la sanidad española es muy poco alentador. Aseguran que, de no cambiar el actual modelo sanitario, el gasto se podría desbocar. Hablan de que podría duplicarsse en diez años, hasta suponer el 50% del gasto público de cada autonomía. Algo «inasumible», dicen.
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