Quizá es que no negociaron como es debido los respectivos contratos programa en la parte económica

Las áreas de gestión del HUCA gastaron en 2010 un millón de euros más de lo pactado

Según datos de la Consejería de Sanidad, las otras unidades clínicas de Medicina Especializada ahorraron en conjunto 1,3 millones de euros

29.09.11 – El Comercio
Las unidades de gestión clínica del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) no tuvieron en 2010 un buen comportamiento económico. Siete de ellas gastaron más de lo que tenían asignado y llegaron a finales de año con un déficit que en conjunto sumó 1,1 millones de euros. Los datos de los que dispone la nueva Consejería de Sanidad fueron los que llevaron a su titular, José María Navia-Osorio, a poner en tela de juicio, en la comparecencia del pasado 14 de septiembre en la Junta, los resultados que el HUCA había alcanzado en la pasada legislatura.
La Administración sanitaria reconoce y, lo reconoció también entonces, que las áreas clínicas del Central «sí cumplieron el resto de objetivos vinculados a actividad asistencial y calidad». En estos apartados superaron los parámetros mínimos del 75% pactados para cada capítulo de gestión. De hecho, pese al deficiente comportamiento económico, la Consejería quiso hacer hincapié «en el esfuerzo demostrado por los profesionales implicados». La excepción, aclaró, fue lo ocurrido en la unidad de Salud Mental que suspendió en todos los indicadores, tanto asistenciales como presupuestarios, motivo por el que Sanidad decidió relevar al hasta entonces director clínico, Hilario Prada, insisten sus responsables.
158.000 cada una
Las siete áreas de gestión que se desviaron en 1.107.102,44 euros el pasado año son las de Neurociencias, Salud Mental, Nefro-urología, Pediatría, Laboratorio de Medicina, Pulmón y Farmacia. Por unidad clínica vendría a equivaler a unos 158.000 euros anuales. El gasto por encima de lo pactado que hicieron estos grupos del HUCA contrasta, por contra, con el exhibido por el resto de áreas de gestión de Atención Especializada, que lograron un ahorro de 1.390.862 euros. Se trata de unidades que están funcionando en los hospitales de Jarrio (Oftalmología), Monte Naranco (Geriatría), Álvarez-Buylla (Urgencias, Oftalmología y Salud Mental) y Valle del Nalón (Cuidados Intensivos, Hemodiálisis y Salud Mental).
El modelo de gestión clínica implantado en los diferentes hospitales y centros de salud del Principado busca, entre otros aspectos, la racionalización del gasto y del uso de recursos por parte de los profesionales. Su puesta en marcha durante la pasada legislatura fue muy contestada por el personal sanitario, especialmente en el ámbito de Primaria donde los médicos se opusieron de manera frontal. Hasta el momento sólo se habían conocido los resultados obtenidos por los cinco centros piloto de Primaria. Fueron los de 2009, cuando estas unidades, a excepción de una, habían logrado ahorrar en conjunto 615.403 euros anuales (un 4% del presupuesto que tenían asignado). De ese ahorro, 245.000 euros volvieron a los profesionales en concepto de incentivos. Los pluses oscilaron entre 1.800 euros anuales para administrativos hasta los 5.000 para los médicos de estas unidades.

”Sólo dispusimos de 3 meses”, argumentan los profesionales

Las críticas que el consejero de Sanidad lanzó a mediados de septiembre hacia las unidades de gestión clínica del HUCA no cayeron del todo bien entre los profesionales del complejo. El Sindicato Médico (Simpa) y también la Junta Técnico-Asistencial del Hospital Central instaron a José María Navia-Osorio a explicar y a argumentar con datos sus apreciaciones. Miembros de las unidades de gestión explicaron que muchas de las áreas valoradas no contaron con todo el año para poder trabajar. «Sólo dispusimos de tres meses», precisaron.
Muchas de las unidades clínicas del HUCA tuvieron que retrasar su puesta en marcha. Los traspiés judiciales a los que se vieron abocadas tras los recursos presentados por el Colegio de Médicos, que obligaron a convocarlas por segunda vez, demoró su arranque. De ahí, que «muchas no hayan firmado hasta después del verano (de 2010) el contrato-programa. Entre una cosa y otra, la gestión de cada servicio no se hizo efectiva hasta septiembre y octubre», precisaron diversas fuentes consultadas.
Además, aseguran que el dinero asignado para cada área de gestión «era orientativo. En el HUCA es imposible calcular lo que vas a gastar exactamente a finales de año. Es un macro hospital que siempre finaliza con una desviación económica importante porque el presupuesto que le otorga cada año el Sespa no proviene del gasto real», explican.