Blogia
La información es la base de tu opción ... y nosotros nunca te la ocultamos.

La crisis en la zona euro: Dos augurios contrapuestos y la consecuencia más temida de uno de ellos…

La crisis en la zona euro: Dos augurios contrapuestos y la consecuencia más temida de uno de ellos…

Krugman: «Al final el BCE mirará al precipicio y olvidará las reglas»

Berlín
El premio Nobel de economía estadounidense Paul Krugman defiende que el Banco Central Europeo (BCE) asuma un protagonismo mayor y comprar tanta deuda italiana como sea necesario para atajar la crisis de la zona del euro. «Al final el BCE mirará al precipicio y dirá: olvidemos todas las reglas, tenemos que comprar deuda», declara Krugman en una entrevista con un diario alemán. A su juicio resulta inevitable que el BCE acabe comprando «tanta deuda como sea necesario» para afrontar la crisis y asegura, además, que los peligros inflacionarios son absolutamente controlables.

Roubini augura que Italia y otros países tendrán que dejar el euro

Londres
El economista Nouriel Roubini no descarta que Italia y otros países periféricos de la zona euro tengan que abandonar la Unión Monetaria y volver a su moneda nacional para resolver sus problemas de fondo, lo que desencadenaría una ruptura efectiva de la eurozona, según apunta en un artículo de opinión publicado en el «Financial Times».

«La deflación recesionista que Alemania y el BCE están imponiendo a Italia y otros países periféricos está haciendo la deuda más insostenible», incide. El economista, famoso por predecir la reciente crisis mundial, cree que una reestructuración de la deuda no sería suficiente en el caso de Italia.

El incumplimiento de Grecia dentro del Euro es la única opción.

Robert JenkinsFinancial Times

Hasta la semana pasada era una posibilidad temida pero no mencionada y de repente la salida griega del euro estaba sobre la mesa. ¿Estar fuera o dentro? A muchos europeos ya no les importa pero debería porque a sus líderes sí les importa. Esta es la razón:

Grecia se reestructurará. Puede hacerlo dentro del euro o puede hacerlo fuera del euro. La diferencia es crucial. Si ya la entiendes deja de leer. Si no, puede que pronto desees haberlo hecho. La salida de Grecia de la eurozona sería así:

1: El gabinete griego decide salir. Los rumores comienzan a circular. Los ciudadanos griegos retiran sus depósitos mientras todavía son euros y no dracmas. La provisión de billetes de banco escasea. Las empresas desplazan sus balances en euros al extranjero. Los prestamistas extranjeros cancelan las líneas de crédito con las empresas griegas. Los bancos cierran las puertas.

2: Tras una reunión de emergencia del gabinete, el gobierno griego anuncia el nuevo dracma. Se imponen los controles de capital y se envían patrullas fronterizas para hacerlos cumplir. La deuda del sector público es redenominada en moneda local. El valor del dracma se hunde y la inflación griega aumenta.

3: Estallan las disputas sobre la deuda del sector privado (por ejemplo el préstamo de un banco alemán a la filial griega de una multinacional como BMW) ¿Se trata todavía de un préstamo en euros o ahora está denominado en dracmas? Si es un préstamo en dracmas entonces el banco alemán tiene un problema, un activo en dracmas que vale una fracción de su valor contable. Si, por otra parte, la obligación se mantiene en euros, entonces tanto el banco como la empresa tienen un problema, ya que ahora el prestatario griego tiene un crédito en euros que debe devolver depreciando el ingreso de los dracmas.

4: Empieza el contagio. Los ciudadanos portugueses se preocupan por si pudiera pasarles a ellos. Los depositantes portugueses comienzan a retirar euros por miedo a que bien pronto pudieran ser escudos. Las empresas de Portugal transfieren fondos al extranjero como precaución. Los bancos cierran. Pronto, escenas similares ocurren en Irlanda con ecos en el resto del Mediterráneo. Los bancos dejan de tratar con sus homólogos periféricos.

5: Aumenta la confusión sobre la magnitud de la exposición de la banca europea al sector privado de la periferia. Se interrumpe el comercio entre los bancos europeos. Los depósitos de los bancos se vacían y los activos refugio crecen. Como respuesta al flujo de capital Suiza impone punitivos tipos de interés negativos sobre los depósitos de los no residentes.

6: Se interrumpe el préstamo en la UE. La actividad económica se detiene. Podría continuar pero entiendes lo que quiero decir. No es una imagen agradable. Permíteme añadir el hecho de que la exposición de la banca europea al sector privado (empresas y hogares) de la periferia es un múltiplo de la del sector público (la deuda del gobierno). Estas cifras no son secretas. Han aparecido en el Financial Times.

Los riesgos asociados son lo que solían llamarse riesgos transfronterizos, un término bien conocido por los banqueros estadounidenses de cierta edad que una vez fueron imprudentes y prestaron dólares y pesos a los sectores público y privado mexicanos. Después descubrieron que el riesgo público implicaba no solo el riesgo de que el sector público no pagara, sino también de que al sector privado se le podía impedir lo mismo por ley o por cambios en la moneda.

A los bancos europeos se les puede perdonar este error. La eurozona nos llegó para eliminar la noción de riesgo transfronterizo. N´est ce pas? ¿No era un banco de Munich prestando a BMW Atenas semejante ahora a un banco de Nueva York prestando a la General Motors en San Francisco? Esa era la idea. Parece sólida ¿Verdad? Lo es, si la eurozona se mantiene unida.

Una serie de funcionarios maduros comprendieron esto desde el principio. A otros les ha llevado tiempo darse cuenta de las implicaciones, tan centrados han estado todos en el riesgo relacionado con los bonos soberanos. Esto explica el lento pero predecible cambio en el discurso. Desde el no incumplimiento al “incumplimiento ordenado”, desde el incumplimiento al “incumplimiento dentro del euro” y más recientemente “defenderemos el euro a cualquier precio”.

Si. Los líderes europeos se han percatado de las atroces consecuencias. Ahora deben compartirlo con sus electores. Los pueblos del norte de Europa deben comprender que no les interesa expulsar a los griegos sino mantenerlos dentro.

Con o sin referéndum, el gobierno griego debe explicar las consecuencias que la salida del euro tendría sobre la economía griega y sus ciudadanos. El incumplimiento griego dentro del euro se puede gestionar y será gestionado. El incumplimiento griego fuera del euro implica riesgos de diferente orden de magnitud.

El asunto ha sido durante mucho tiempo un tabú visible para todos pero al que nadie miraba. Nadie quería. Pero ahora deben hacerlo.

Robert Jenkins es miembro externo del comité de política financiera interino del Banco de Inglaterra. Escribe a título privado.
Traducción de Montse Beorlegui (Attac Madrid)

0 comentarios