«El Proyecto Fresneda puede ser una guía» para la política a aplicar en el resto del municipio y mejorar estos datos, manifestó el Alcalde de Siero
Siero flaquea en salud
El municipio ocupa el puesto número 73 del Principado, el sexto por la cola, en el ranking establecido por el Observatorio de la Salud de Asturias
Pola de Siero, Manuel NOVAL MORO, en La Nueva España
Siero es uno de los municipios peor parados en los baremos sobre la calidad de vida establecidos por el Observatorio de la Salud de Asturias. En concreto, en materia de salud de las personas propiamente dicha ocupa el puesto 73 entre los concejos asturianos, es decir el sexto por la cola. En cuanto a los factores que determinan o condicionan la salud, ocupa el número 51.
El Observatorio de la Salud de Asturias, creado en 2010 por la Dirección General de Salud Pública y Participación de la Consejería de Salud y Servicios Sanitarios de Asturias, ofrece información sobre la salud a través de varios informes periódicos, que han de servir de base para poner en marcha políticas que ayuden a reducir los problemas que aparecen reflejados en ellos y potenciar las virtudes que recogen.
El baremo sobre la salud de las personas se plantea sobre dos cuestiones fundamentales: la mortalidad y la morbilidad, la proporción de personas que enferma en un lugar a lo largo de un período de tiempo. En Siero, la mortalidad está por encima de la media de Asturias. En el concejo se registran al año 36,70 fallecidos por cada 1.000 personas, mientras que en Asturias la cifra es de 24,1 fallecidos por cada 1.000 habitantes. Por otra parte, para determinar la morbilidad se tienen en cuenta varios factores. El primero de ellos, el porcentaje de personas que tiene una mala percepción sobre su salud, que en Siero es del 29,06 por ciento, mientras que la media asturiana está en 22,97. Además, se tiene en cuenta la prevalencia de enfermos crónicos, que en el municipio está algo por debajo de la media regional, con 25,54 frente a 26,89. Finalmente, se tiene en cuenta el porcentaje de personas bajo tratamiento por ansiedad o depresión, que en Siero es del 13,56 por ciento y en Asturias, del 14,35.
El alcalde de Siero, Guillermo Martínez, dijo que estas estadísticas «no dejan bien parado a nuestro municipio» y, además, es algo que, aseguró, «se ve reflejado a menudo en las consultas a la Alcaldía en la web municipal, donde hay muchas referencias a la calidad de vida».
Por otra parte, con respecto a los determinantes de salud, las circunstancias que condicionan, para bien o para mal, el bienestar de los vecinos del concejo, Siero falla especialmente, al menos desde el punto de vista del Observatorio, en dos aspectos: la calidad asistencial y la calidad ambiental.
Las cifras de demora quirúgica y las hospitalizaciones evitables están significativamente por encima de la media asturiana. La demora se sitúa en una media de 69,36 días, frente a la asturiana de 62,83, y el número de hospitalizaciones evitables se sitúa en 130 de cada 1.000, cuando en Asturias está en 120. Otros factores relativos a la calidad asistencial, como los cuidados inadecuados de la diabetes o la ausencia de controles mamográficos, están por debajo de la media asturiana.
Sin embargo, en lo relativo a la calidad ambiental, todos los factores negativos de Siero están por encima de los asturianos y especialmente la contaminación del aire, con 52 días al año por encima del límite permitido, frente a los 28 registrados en Asturias.
El concejo sí está, en cambio, mejor situado que la media asturiana en estilos de vida, en aquellos comportamientos de prevención o de búsqueda del bienestar que dependen directamente de las propias personas. Sólo dos factores están ligeramente por encima de los regionales: la mortalidad asociada al alcohol, con 23,93 personas cada 100.000, y la obesidad infantil, que padecen 4,39 de cada 100 niños.
En el resto de variables: prevalencia de fumadores, sedentarismo, dieta inadecuada, consumo excesivo de alcohol, embarazo en adolescentes y seguridad vial inadecuada, Siero mejora las cifras asturianas.
El regidor comentó, respecto de estos datos, que el Ayuntamiento, en la medida de lo posible, tratará de aplicar medidas para mejorar la calidad de vida de los vecinos.
Por último, existen unos factores sociales que el municipio tiene relativamente acordes con las cifras asturianas: 38, 87 por ciento de personas con nivel de estudios bajo; un 9,02 de desempleo; un 4,48 por ciento de personas adultas sin soporte social y un 11,44 por ciento de familias monoparentales.
Martínez considera que, para paliar las carencias del municipio en materia de salud, se deben abordar políticas «muy participativas», no tanto con «medidas estrella» como con pequeñas medidas que ayuden a obtener una visión integral de la buena salud del municipio y que deberían estar relacionadas con numerosos aspectos que inciden en la calidad de vida, como la contaminación, el tráfico, el cuidado del entorno, etcétera.
El caso es dar un impulso importante a una faceta del concejo a la que, a juzgar por las cifras del Observatorio, le queda mucho camino por recorrer. El Alcalde confía en que la participación de los vecinos y las medidas que se vayan tomando con el tiempo ayuden a que Siero suba algún escalón y abandone el vagón de cola del ranking de salud de Asturias.
Martínez propone la creación de un consejo de salud municipal
Pola de Siero,
Manuel NOVAL, en La Nueva España
El alcalde de Siero, Guillermo Martínez, ha mostrado su disposición a constituir en Siero un Consejo de Salud. Se trataría de promover en todo el municipio políticas de prevención y de mejora del bienestar y la calidad de vida y, en un principio, según el regidor, «el Proyecto Fresneda puede ser una guía» para la política a aplicar en el resto del municipio.
La iniciativa del centro de salud de La Fresneda, que está siendo objeto de una auditoría regional, es, para el regidor, un ejemplo de trabajo comunitario, de participación y de colaboración entre los usuarios y los profesionales.
Últimamente, el Alcalde de Siero ha mantenido varias reuniones con los promotores del Proyecto Fresneda. Desde que comenzó su mandato, el regidor se mostró interesado en ampliar al resto del municipio el espíritu de esta iniciativa, basada en el voluntariado y encaminada a la prevención.
La participación, insiste el regidor, ha de ser uno de los pilares de la política.
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