Tres visiones, la ciudadana, la profesional y la de los gestores, con relación al conflicto

«Un mes de conflicto significa un profundo desprecio al ciudadano»

«Lo más grave es la quiebra del modelo sanitario a manos del PP»

Foto: Pasillo del HUCA ayer durante la segunda jornada de huelga. 

Oviedo, P. Á., en La Nueva España

Dacio Alonso preside la Unión de Consumidores (UCE-Asturias).

-¿Qué opinión le merece la huelga de los médicos en la sanidad pública asturiana?

-Es un acto de profunda irresponsabilidad. Respeto el derecho de huelga, y, además, en Asturias los médicos nos tienen acostumbrados a ejercerlo, pero debe usarse con sensatez. No es de recibo que los médicos y el resto de los profesionales de la sanidad pública nos castiguen con un mes de conflicto. Esta estrategia pone de relieve, aunque digan lo contrario, un profundo desprecio a los derechos de los ciudadanos. Uno o dos días de huelga sería algo razonable, pero un mes entero es una irresponsabilidad.

-Los facultativos argumentan que en los dos últimos años han perdido un 20 o incluso un 30 por ciento de su sueldo. ¿No ve justificada su indignación?

-¿Perder un 30 por ciento es mucho o poco? Yo añado otra pregunta: ¿en comparación con qué? Hay 100.000 parados en Asturias, en medio de una crisis que está cebándose con los colectivos más vulnerables. Que se pregunte a esos colectivos qué porcentaje de salario han perdido.

-¿Cómo deberían aplicarse los ajustes en el ámbito sanitario?

-Lo más grave que está sucediendo es la quiebra del modelo sanitario, y sobre eso el Sindicato Médico (SIMPA) no ha dicho nada. El Gobierno central, del PP, ha planteado por real decreto la pérdida de una conquista social y establece un nuevo modelo que se basa en el aseguramiento. Ya se está dando la posibilidad de que pólizas privadas de seguros entren a mercantilizar la salud, y mientras tanto se excluye de nuevo a los sectores más vulnerables.

-¿Es usted de los que piensa que los médicos son un colectivo privilegiado?

-Los médicos son un colectivo fundamental en la sanidad pública. Hay una mayoría de profesionales magníficos y muy comprometidos. Pero el hecho de que en Asturias tengamos en cada legislatura la espada de Damocles de ver cuándo se va a desarrollar un conflicto liderado siempre por los médicos no dice mucho en su favor como colectivo. Que a un colectivo de 16.000 trabajadores, como es el del Sespa, se le garantice la estabilidad salarial y del empleo es un dato muy a tener en cuenta.

-¿Cómo ve el papel del Gobierno central y del Gobierno asturiano en las medidas de ajuste sanitario?

-El Gobierno del Estado no cree en lo público y está haciendo todo lo necesario por reducirlo a la mínima expresión, especialmente en los ámbitos sanitario y educativo. Y el Gobierno de Asturias ha planteado un compromiso, que la UCE defiende, de mejorar notablemente la eficiencia y la calidad del sistema sanitario público. La UCE apoya que los ciudadanos puedan ser atendidos por su médico por las tardes. Si los médicos de primaria se quejaban de que tenían poco tiempo por paciente, ahora van a tener más tiempo. Y también apoyamos la actividad de los quirófanos por las tardes.

«La ampliación de jornada tiene que adaptarse a cada servicio»

«El Principado ningunea a los médicos y no valora el capital humano»

ANTONIO VALLE Cirujano vascular del Hospital Central de Asturias

Oviedo, P. Á., en La Nueva España

Antonio Valle (Oviedo, 1953) es cirujano vascular del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA). Trabaja en régimen de dedicación exclusiva -«porque creo en ello»- y no pertenece a ningún partido ni sindicato.

-¿Apoya las reivindicaciones del Sindicato Médico (SIMPA) en esta huelga?

-El Gobierno central decidió aumentar nuestra jornada laboral de 35 a 37,5 horas semanales. Además, nos ha quitado muchos días libres: yo, con 36 años de antigüedad, he pasado de 16 a 3. Todo eso lo hemos aceptado, porque somos solidarios con esta situación de crisis. Lo que me parece inaceptable es la aplicación suplementaria que se hace en Asturias, en particular, que se nos obligue a «devolver» las horas de la jornada posterior a las guardias, que a veces son guardias de 24 horas, y que se quiten los módulos de trabajo de tarde de los mayores de 55 años que están eximidos de guardias nocturnas.

-¿Usted hacía estos módulos?

-No. Podría acogerme a ellos por edad, pero hago guardias de noche y trasplantes de riñón. No obstante, considero que esa exención está totalmente justificada. Un médico que ha hecho cinco guardias mensuales llega a los 55 años sumando cuatro años de estancia en el hospital. Entonces decide que, a su edad, se le hace muy gravosa una noche entera de guardia, y hasta ahora se le daba actividad de tarde para reducir la pérdida salarial. Ahora se pretende que siga haciendo esa actividad, pero sin cobrar, y de ahí se derivan pérdidas de hasta 9.000 euros al año. Es inasumible. Se nos quitan los complementos, sin tener en cuenta que el sueldo base de un médico es bajísimo: poco más de 1.000 euros.

-Sus colegas dicen que el problema no es trabajar dos horas y media más.

-Y es verdad. Podemos trabajar media hora más al día, o hacer dos horas y media en una tarde a la semana, o cinco horas en una tarde cada quince días. La aplicación tiene que hacerse de acuerdo con las peculiaridades de cada servicio y teniendo en cuenta las conexiones entre servicios, por ejemplo, entre cirugía y anestesia. Lo que no podemos aceptar es que se imponga a macha martillo un modelo que nos obliga a «devolver» decenas de horas por hacer guardias y que mezcla jornada ordinaria con jornada extraordinaria.

-Hay quien piensa que lo que se hace es retirarles privilegios.

-No son privilegios, sino un gesto de consideración con un profesional que lleva 30 años en la sanidad pública. Debemos recordar que, globalmente, en los últimos tres años hemos perdido un 25 por ciento de nuestro salario. Y ahora nos vienen con esto.

-¿Considera que el Gobierno asturiano desprecia a los médicos?

-Cuando menos, nos ningunea.

-¿Cómo ve a sus compañeros?

-Muy enfadados. No se tiene en cuenta que en la sanidad, como en cualquier empresa, el principal capital son los trabajadores.

-¿Ha sido beneficioso el traspaso de las competencias sanitarias a las comunidades autónomas?

-Pienso que la sanidad nunca debería haberse descentralizado.

La sostenibilidad de nuestro Servicio de Salud

La Directora Gerente del SESPA recoge en el siguiente artículo de opinión publicado en El Comercio (07.10.12) una serie de reflexiones sobre el futuro del sistema público de salud en una situación de crisis como la actual

En estos momentos la tarea más difícil para los gobiernos, para los parlamentos, es la de decidir como se distribuye el presupuesto. La continuada caída de los ingresos hace que las previsiones vayan a la baja, y eso, unido a las limitaciones para endeudarse, y a las dificultades para conseguir financiar la deuda, dibujan un horizonte complicado.

Las medidas que ponemos en marcha desde el SESPA para reducir gasto en sanidad son de distinta naturaleza, las de mayor impacto son las ligadas a las mejoras en la gestión, como las compras centralizadas, la renegociación de contratos de servicios y suministros para rebajar precios, el diseño de nuevos concursos que disminuyan el coste, las medidas de ahorro energético. También inciden en el menor gasto las medidas tomadas por el gobierno de España como la bajada del precio de los medicamentos, o la introducción del copago. Junto a estas se produce el aumento de jornada y suspensión de descansos adicionales, también aprobado por el gobierno central, con ese mismo objetivo de reducir costes. Digamos que el conjunto de medidas distribuyen el esfuerzo entre todos los actores: proveedores, empresas que dan servicios a la sanidad, ciudadanos y pacientes, y también el personal que trabaja en los servicios de salud.

Con las medidas diseñadas pretendemos cumplir con el esfuerzo que desde Sanidad nos toca para contribuir a ajustar el gasto publico a los ingresos, teniendo en cuenta que la priorización de las políticas sociales que realiza el Gobierno del Principado se traduce en un esfuerzo menor del que nos tocaría si fuese proporcional a la parte del presupuesto que ocupamos. Pero no lograr los objetivos en alguna de ellas, nos obligaría a tener que tomar otras medidas.

Tomar decisiones significa elegir entre distintas opciones. Un día mas de descanso en el turno rotatorio supone un coste mayor que mantener abierto durante todo el año un punto de urgencias en uno de nuestros pueblos. Los módulos de actividad complementaria para lo exentos de guardias, equivale a dos puntos de urgencia urbanos. El diseño de las medidas puestas en marcha no afecta a los salarios de los trabajadores ni al volumen de empleo estructural, pero se reduce actividad extraordinaria que puede ser realizada en casi toda su totalidad con el aumento de jornada,. Tampoco supone la renuncia al modelo de sanidad publica como sí ocurre en otros territorios, ni afecta a la oferta de servicios a la ciudadanía. Pero sí supone trabajar mas horas, ordenar la actividad de forma que seamos mas productivos, gestionar de forma mas eficaz los recursos públicos, mejorar la calidad de lo que hacemos, y todo ello con la participación de los   profesionales como elemento clave.

Estoy segura que son mas los profesionales que comparten estas reflexiones que quienes únicamente les preocupa su situación personal. En momentos de crisis tendemos a mirarnos a nosotros mismos, pero es cuando debemos ser mas solidarios, para superarla debemos estar unidos, o salimos todos o el modelo de sociedad que hemos construido se transformara en un salvese quien pueda.

Como empleados públicos, todos los que conformamos el Servicio de Salud del Principado de Asturias, estamos llamados al esfuerzo, individual y colectivo, para hacer que nuestro trabajo sea mas eficiente, productivo y sostenible, es lo que necesitan ahora de nosotros los asturianos y asturianas.

Celia Gómez González

Directora Gerente del SESPA