Periodo estival, cierre de camas, fin de dicho periodo, reapertura lo que pasa es que cada año se intenta afinar todo más.
Cabueñes reabre una de sus plantas
La dirección del hospital asegura que su intención ha sido siempre «mantener en cada momento las plantas necesarias»
La decisión se tomó debido al aumento de afluencia a Urgencias y de los ingresos
23.10.13 - SHEILA VACA | GIJÓN, en El Comercio.
El Hospital de Cabueñes está prácticamente lleno. El volumen de ingresos de pacientes se ha intensificado en los últimos días sobre todo en el servicio de Urgencias y ha hecho que este centro sanitario, dependiente del Servicio de Salud (Sespa), se encuentre casi al límite de ocupación. Y ese incremento de ingresos ha tenido su reflejo en las habitaciones. Han tenido que instalarse camas supletorias para poder dar cabida a todos los enfermos que han acudido al centro en los últimos días. El hospital, según aseguraban ayer desde el sindicato CSI, acumulaba en los últimos dos días unas 28 habitaciones con tres camas, cuando debería haber dos. Al tiempo, achacaban uno de los motivos del «colapso» al cierre de dos de las plantas de Cabueñes durante los meses de verano: una de cirugía y otra de medicina interna.
Las críticas sindicales llegaban el mismo día en el que el centro hospitalario decidía reabrir una de las plantas que permanecían cerradas, en concreto, la tercera par. «Nuestra intención declarada ha sido mantener en cada momento las plantas necesarias, por eso cerramos dos en verano. Ahora, hemos detectado un incremento de la afluencia a urgencias y de los ingresos por lo que hemos decidido reabrir una de las plantas», afirman desde la dirección del Hospital de Cabueñes.
Se da la circunstancia de que la alta ocupación en el hospital tiene lugar en momentos en que la gripe no está circulando con gran intensidad, pero se han tenido que echar mano de las camas supletorias. Algo que ha levantado la voz de alarma entre los trabajadores del hospital. Los sindicatos creen que las habitaciones triples proliferan aún más este año. Teresa Gafo, miembro de CSI en la Junta de Personal de Cabueñes lamentaba la «saturación que tiene el centro». «Cerraron dos plantas sin decir la fecha en la que las volverían a abrir. Y nos encontramos con que los pacientes no caben. El lunes había un total de 27 camas supletorias en las habitaciones y hoy -por ayer- una más. Además, las habitaciones individuales también están al límite. Donde debería haber un enfermo, hay dos. Se han multiplicado las camas 'D' y los pacientes están hacinados, lo que eso supone un mayor riesgo de infección», explicaba Gafo. La sindicalista hizo hincapié en que uno de los enfermos que se encontraba anteayer en la UVI «no pudo ser dado de alta porque no había cama para él en planta, con el gasto que eso supone», añadía.
Traslado a Cruz Roja
Gafo lamenta el convenio singular que permite el traslado del personal sanitario a Cruz Roja. «No es lógico que trasladen médicos maxilofaciales y traumatólogos a trabajar allí si todo el material está aquí, en Cabueñes. Además, no tienen UVI. Estas idas y venidas de médicos repercuten en las atenciones de los enfermos», manifestaba. De momento, el centro se ha desahogado ligeramente con la apertura de una de las plantas.
0 comentarios