Veremos que pasa al final

Las políticas sociosanitarias en Asturias.

Salud no tiene aún los 5 centros que iniciarán la jornada de tarde

Los médicos ven extremadamente difícil que surjan voluntarios.

 

11/11/2008 PABLO ZARIQUIEGUI, para La Voz de Asturias

 

Cinco centros de salud deberán integrarse en el proyecto piloto que, a partir de diciembre, inaugure en Asturias la jornada ordinaria de tarde. A falta de menos de un mes, Ramón Quirós, consejero de Salud, no pudo ayer concretar qué centros de Atención Primaria abrirán el nuevo modelo de gestión clínica que deberá incluir necesariamente la jornada vespertina.

Quirós, que inauguraba ayer la nueva área de Salud Mental de la Universidad de Oviedo, se limitó a señalar que el Sespa "está trabajando en ello". El titular de Salud no quiso o no pudo, sin embargo, concretar cuáles serán los cinco centros que pondrán en marcha la nueva organización de la Atención Primaria. Quirós sí indicó que tiene el respaldo de buena parte de los trabajadores del sistema. "Muchos profesionales lo ven positivo", manifestó. El titular de Salud reconoció que la Atención Primaria tiene "aspectos mejorables" y añadió que ha llegado el momento de dejar atrás "las quejas" y de "avanzar en la aplicación de la gestión clínica". El consejero salía así al paso de las reticencias que este modelo plantea entre los facultativos.

Ayer mismo tanto el Sindicato Médico Profesional de Asturias como la Sociedad Asturiana de Medicina de Familia reconocían que el consejero lo tendrá más que difícil si quiere contar con equipos voluntarios para sacar adelante su propuesta. Oscar Salinas, representante de Atención Primaria del Simpa, manifestó que la Administración lo tendrá extremadamente complicado, sobre todo, en los centros de salud urbanos. Salinas añadió que la consejería y el Sespa están intentando convencer al personal afín al PSOE y a la Administración para poner en marcha la jornada de tarde.

Salvador Tranche, presidente de la Sociedad Asturiana de Medicina de Familia, coincidió en que, dado el actual panorama, las posibilidades de encontrar equipos voluntarios en los centros urbanos son más que remotas. Tranche reconoció que el clima de trabajo en los centros es malo y manifestó que introducir cambios de gestión sin el acuerdo de los profesionales resulta extremadamente difícil.