4.488 asturianos, reconocidos ya como «dependientes», están a la espera de que se les asigne un servicio o una prestación.

Asturias mejora en dependencia y reduce la espera por debajo de la media nacional

El Observatorio Estatal advierte del riesgo de «taponamiento» y de «la ineficacia» del sistema, con 252.822 personas sin atender en toda España

Oviedo, Elena FERNÁNDEZ-PELLO, en La Nueva España
Asturias es una excepción en el desalentador panorama que retrata el Observatorio Estatal de la Dependencia en su último informe. La Asociación Estatal de Directores y Gerentes de Servicios Sociales, que evalúa periódicamente el desarrollo y la aplicación de la ley, hizo público ayer su último diagnóstico y advierte del riesgo de «taponamiento» del sistema, con 252.822 personas sin recibir atención a pesar de tener ya su derecho reconocido y que afrontan esperas de hasta diecisiete meses. Sin embargo, Asturias, según el Observatorio, ha mejorado sus perspectivas y se ha situado entre las comunidades con «mayor grado de atención», por encima de la media nacional.

De cualquier manera, el panorama que describe el Observatorio de la Dependencia es desastroso. «Desconocemos el alcance que tendrán las medidas anunciadas por el Gobierno en materia de reducción del déficit en lo que atañe a Dependencia», plantean los autores del informe, «pero lo que está claro es que hay que rendirse ante la evidencia de la ineficacia del sistema en estos primeros tres años».

Canarias y Valencia, según el Observatorio, «ostentan el triste récord de la desatención con más de un 50 y un 60 por cierto, respectivamente, de personas que, teniendo grado y nivel suficientes para ostentar el derecho a ser atendidos, siguen a la espera del plan de atención individualizado». No obstante, reconoce que Canarias ha mejorado en este último año reduciendo el porcentaje de desatención un 25 por ciento, mientras que la situación en Valencia ha empeorado, ya que en 2009 eran poco más del 44 por ciento los dependientes sin atender.

En el extremo opuesto se sitúan Ceuta y Melilla, Castilla y León, Cantabria, Navarra y País Vasco, con más del 80 por ciento de las personas dependientes recibiendo el servicio o la prestación económica que les corresponde. En ese mismo lado de la balanza se sitúan La Rioja, Aragón, Castilla-La Mancha, Extremadura y también Asturias que, según los autores del informe, «han experimentado sensibles mejorías consiguiendo situarse por debajo de la media española, que en mayo de 2009 superaban más o menos ampliamente».

En Asturias hay 4.488 personas dependientes esperando por su plan de atención, aproximadamente un 28 por ciento de las que tienen reconocido ese derecho, y la media nacional ronda el 30 por ciento.

En cuanto a los plazos de espera, según el Observatorio, «siguen siendo elevadísimos, ya que arrojan en este momento un promedio de entre siete y catorce meses para la elaboración del plan de atención».

El Sistema de Dependencia está sometido a un continuo flujo de bajas, revisiones y entradas. El Observatorio constata que existe lo que llama «un continuo» de 120.000 personas esperando que se resuelva su solicitud, que se les declare o no «dependientes» y se determine su grado y nivel. En ese proceso, indican, se emplea una media de tres meses, que sumados a los 14 que se tarda en firmar el plan de atención en algunas comunidades, da esperas de hasta diecisiete meses.

El caso es que, tres años después de la entrada en vigor de la ley, casi 12 de cada mil españoles reciben un servicio o una prestación económica del Sistema de Dependencia. En Asturias esa tasa es del 10,6. La Asociación de Directores y Gerentes de Servicios Sociales de España, que agrupa a unos doscientos profesionales de la Dependencia -trabajadores sociales, psicólogos, abogados, sociólogos, médicos, etcétera-, alerta de lo que considera un «auténtico abuso» en las prestaciones económicas por los cuidados en el hogar. Lo atribuye a varios factores; entre otros, la insuficiente oferta de servicios, el escaso desarrollo de los servicios de proximidad -ayuda a domicilio y centros de día- y a que se trata de la salida más económica para la Administración.

El Observatorio de la Dependencia

España

553.716 personas reciben servicios o prestaciones económicas del Sistema de Atención a la Dependencia.

252.822 están a la espera de ser atendidas.

120.000 personas a la espera de ser valoradas.

12 de cada mil españoles se benefician de los servicios y prestaciones de Dependencia.

El tiempo de espera, desde la presentación de la solicitud llega en algunas comunidades a los diecisiete meses.

Asturias

4.488 asturianos, reconocidos ya como «dependientes», están a la espera de que se les asigne un servicio o una prestación.

Ese porcentaje -aproximadamente el 28 por ciento de las personas dependientes- está por debajo de la media nacional, que es del 30 por ciento.

De cada mil asturianos, 10,6 recibe alguna ayuda del Sistema de Atención a la Dependencia, por debajo de la media nacional que está en 12 por mil.

4.448 dependientes en el limbo

La Asociación de Directores y Gerentes Sociales critica los fallos de la Ley de la Dependencia

Asturias se encuentra entre las regiones con menos beneficiarios a la espera de recibir su prestación tras bajar la lista un 51% en un año

25.05.10 - CHELO TUYA | GIJÓN, en El Comercio.

4.448 asturianos están en el limbo. Así define la Asociación Estatal de Directores y Gerentes de Servicios Sociales la situación de las personas dependientes con derecho reconocido, pero que siguen a la espera de recibirlo. Esa espera llega porque no han firmado con la Administración regional su Plan Individual de Actuación (PIA), una rúbrica que, en la inmensa mayoría de los casos, no han plasmado no porque no estén de acuerdo con el servicio o prestación que les corresponde sino porque la Consejería de Bienestar Social y Vivienda no les ha llamado para cerrar el expediente.

En toda España, son 252.822 los habitantes en este limbo legal, un volumen tan grande que, aunque no justifica la cifra que presenta el Principado, sí sirve para aminorarla a efectos estadísticos. Así, Asturias se encuentra entre las regiones con menos beneficiarios a la espera de recibir su prestación. Incluso está por debajo de la media nacional y ocupa un honroso noveno puesto entre las comunidades cumplidoras; un ranking que lideran las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, así como Castilla y León y Cantabria.

Esa es una de las conclusiones que figuran en el análisis de la marcha del Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia realizado por la citada asociación y centrado en los doce meses enmarcados entre mayo de este año y del pasado. En ese periodo, la entidad que preside el director de la Fundación Marbella Solidaria, José Manuel Ramírez, destaca «la sensible mejoría» registrada por el Principado, «que ha conseguido situarse por debajo de la media española», cuando sólo hace un año la superaba «más o menos ampliamente».

Porque, en doce meses, Asturias ha pasado de sumar 9.247 asturianos en ese limbo legal a bajar la cifra a 4.448, lo que supone un descenso del 51,9% , porcentaje tras el que se esconden 4.799 personas que han logrado acceder al servicio o la prestación a la que tienen derecho por ley.

Hasta 14 meses de espera

Pero si el hecho de que otras comunidades lo hagan mucho peor salva al Principado, lo cierto es que el informe critica por igual a los que están en ambos extremos de la balanza, aunque Canarias y Valencia tienen se llevan los mayores varapalos «porque ostentan el triste récord de la desatención, con más de un 50 y 60%, respectivamente» de dependientes en el limbo.

Para la Asociación Estatal de Directores y Gerentes de Servicios Sociales, tan evidente como que «la propaganda inicial, que no información, fue absolutamente nefasta» resulta el hecho de que «la red de servicios es numéricamente insuficiente para atender la demanda», así como que la preferencia de los usuarios por cobrar la paga para que les cuide un familiar, hacen prever un desembolso «de 800 millones de euros» en cuanto se dé curso a los casos pendientes.

Para evitar esa proliferación de pagas -que la ley califica de «excepcionales»-, los expertos abogan por incrementar la oferta residencial y de servicios de proximidad, para lograr que el limbo de la espera dé paso al cielo de la atención.

Asturias sumará 2.000 dependientes

La ampliación de derechos obligará al Principado a hacer un esfuerzo extra.

Más de 4.000 personas aguardan las ayudas pese a tener el visto bueno.

25/05/2010 PABLO ZARIQUIEGUI, para La Voz de Asturias.

Al menos 2.000 personas más en situación de dependencia tendrán derecho a partir del próximo año a beneficiarse de las ayudas y prestaciones previstas en la ley. El dato figura en el observatorio elaborado por el Ministerio de Sanidad y Política Social. Son, de momento, 2.276 las personas que han sido ya valoradas con el grado y nivel de dependencia que pueden acceder a las ayudas a partir del 1 de enero de 2011. El número, lógicamente, puede crecer en la medida en que se reciban nuevas solicitudes. La Consejería de Bienestar Social señaló ayer que es posible que algunas de estas personas estén recibiendo ya algunas prestaciones autonómicas. Bienestar Social matizó, con todo, que de acuerdo con el calendario de la ley de dependencia, las administraciones quedarán obligadas a facilitar más prestaciones a partir del próximo año al entrar en vigor un nuevo nivel de protección.

La situación complicará aún más las dificultades de las comunidades autónomas para sacar adelante la ley, afectada también por el plan de ajuste del Gobierno de Zapatero. En Asturias, por ejemplo, los últimos datos apuntan que, a principios de mayo, 4.448 personas con derecho a recibir las prestaciones seguían en lista de espera. La Asociación Estatal de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales indica que, si la situación ya es compleja este año, el próximo podría llegar al colapso con la incorporación de un nuevo grado de protección. La asociación destaca además la enorme variabilidad entre comunidades. En la comparación, Asturias no sale mal parada. El informe señala que Canarias y Valencia ostentan el triste récord de acumular a un mayor número de personas en espera. En el extremo contrario, figuran Castilla y León, Cantabria, Navarra y el País Vasco. El Principado ha mejorado sensiblemente, según esta asociación, con respecto a las últimas valoraciones. En toda España, el número de personas con derechos que no reciben asistencia marea. Son, en total, 252.822.

El informe se detiene también en los tiempos de demora para la resolución de los expedientes. De nuevo aquí, Castilla y León, con siete meses, y Canarias, con 23, ocupan la mejor y la peor posición. Asturias figura en un puesto no satisfactorio, en palabras de Noemí Martín, la consejera de Bienestar Social, pero algo mejor que otras comunidades. Las demoras se sitúan, también con variables, en una media de diez meses. La consejería manifestó ayer que, de momento, no resulta posible saber cómo se aplicará el plan de ajuste que pretende acabar con la retroactividad en el reconocimiento de los atrasos.