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Los cirujanos de Cabueñes cobran 400 euros por cada tarde que operan

Los servicios de Cirugía General, Traumatología, Urología y Ginecología programan cada semana quirófanos vespertinos

Es la tarifa pactada por los cirujanos de Cabueñes por las horas extra para reducir las listas de espera

12.10.10 – GIJÓN, en El Comercio.

Entre 300 y 400 euros por operar de tarde. Este es el dinero que cobran los cirujanos de Cabueñes que practican intervenciones fuera de su horario regular de trabajo, fijado entre las 8 de la mañana y las tres de la tarde. En la jerga sanitaria se las conoce como 'peonadas'. Se trata de aquella actividad extraordinaria que se realiza en situación de prolongación de jornada (entre las 15 y las 19 horas) y cuyo objetivo no es otro que reducir la lista de espera quirúrgica del hospital. En los últimos meses, Cabueñes ha mostrado un comportamiento negativo en sus demoras. En septiembre pasado llegó a contabilizar 3.295 pacientes en espera quirúrgica, lo que supone 533 más que antes de iniciarse el verano. Pero no sólo aumentó el listado general (en junio había 2.762 personas pendientes de ser intervenidas), sino que creció también la demora media para operarse hasta situarse en 69 días (18 más que en junio).

Comparativamente, el balance del centro sanitario público es algo peor que hace un año. En septiembre de 2009, según datos de la Consejería de Salud, la demora media estaba en Cabueñes en 65 días, cuatro por debajo del tiempo de espera que hay ahora para una intervención. El hospital gijonés puso en marcha varios programas quirúrgicos vespertinos con la intención de bajar las esperas de aquí a fin de año. La intención es poder concluir en parámetros similares a los de 2009, cuando los quirófanos cerraron con una demora media de 60 días.

176 días para una prótesis

Algunos servicios, como el de Traumalogía, viene realizando 'peonadas' desde el verano. Actualmente, son cuatro las áreas que más operan de tarde. Se trata de Cirugía General, Traumatología, Urología y Ginecología. Por cada prolongación de jornada (el equivalente a cuatro horas), los cirujanos reciben entre 300 y 400 euros. Las asignaciones para el resto de las categorías laborales oscilan entre 100 y 250 euros.

Una de las mayores demoras se da precisamente en el área de Traumatología, donde los pacientes que deben ser intervenidos para colocarles una prótesis de cadera pueden llegar a aguardar hasta 176 días de máximo. No obstante, la demora media para una operación de este tipo está en 78 días, según los datos quirúrgicos que Cabueñes manejaba a finales de septiembre. Con todo, las personas que más tiempo esperan son las que se tienen que someter a una operación de varices. Aquí el promedio está en 93 días. Para una vesícula hay 91 días y para una hernia inguinal, 87. La espera máxima corresponde a Otorrinolaringología, donde un paciente lleva aguardando 178 días.

3.200 euros al mes

Las llamadas 'peonadas' son un fenómeno bastante extendido en toda la sanidad pública, pero que no gozan del beneplácito de los sindicatos. Al menos, no de todos. Centrales como CC OO y UGT (los sindicatos no profesionales) consideran que se trata de una práctica perversa, ya que aseguran que muchos servicios quirúrgicos trasladan actividad hacia la tarde para «tener un sobresueldo». La acusación tiene su fundamento, insisten, ya que «un médico que haga dos prolongaciones de tarde a la semana se acaba embolsando unos 3.200 euros más al mes».

El recorte en el sueldo de los funcionarios, una medida que afecta de lleno al colectivo sanitario, ha hecho que muchos profesionales que hasta ahora se negaban a realizar prolongación de jornada «se ofrezcan casi voluntarios», afirman fuentes de CC OO, que critican que Cabueñes «se llene de peonadas mientras el Sespa recorta actividad y financiación a la concertada». La proliferación de peonadas contrasta con la pretensión inicial de la Consejería de Salud de acabar con este tipo de actividad, máxime en tiempos de crisis y de recorte de gastos. Sin embargo, el incremento de la lista de espera, unida al descenso de actividad de la red concertada a causa de los recortes, le ha obligado a cambiar de estrategia.

El Sespa audita las operaciones de cadera del Hospital de Cruz Roja

12.10.10 - L. FONSECA | GIJÓN, en El Comercio.

Las relaciones entre Cruz Roja y el Servicio de Salud no pasan por su mejor momento. A finales de septiembre, cuando el hospital ya había anunciado recortes de actividad a causa del ajuste económico del Principado, dos inspectores del Sespa se presentaron en el centro de la calle Uría para controlar el volumen de operaciones de cadera que había realizado Cruz Roja. Los inspectores analizaron las historias clínicas de los pacientes que habían recibido una prótesis de cadera. Luego se marcharon.

Desde entonces, las derivaciones a Cruz Roja por operaciones de este tipo han quedado suspendidas hasta nuevo aviso. Pero no por motivos clínicos, sino económicos. El Sespa ha concluido que es más rentable operar en Cabueñes, aunque sea con 'peonadas', que continuar enviando prótesis a la red concertada. Una sustitución de cadera cuesta en el centro concertado 8.215 euros si se realiza con personal propio, pero baja a 6.819 euros si quienes intervienen son médicos que vienen de Cabueñes a operar a Cruz Roja. En el caso de sustituciones de cadera, la factura se eleva a 9.468 si la intervención la hace personal concertado y desciende a 7.858 si quien opera en los quirófanos de la calle Uría es personal de Cabueñes. La diferencia, por tanto, oscila entre 1.396 y 1.610 euros dependiendo del centro en el que se realice la intervención. No obstante, a este diferencial a favor de Cabueñes hay que sumar el precio de cada peonada (incluidos médicos y resto de personal) y también el coste de hora de quirófano, que es más elevado en la pública.

Actividad bajo mínimos

Pero discrepancias económicas a un lado, el caso es que Cruz Roja ha reducido su actividad a la mitad. Habitualmente, mantenía abiertos sus cinco quirófanos tanto de mañana como de tarde. Tras el recorte del 3,2% del Sespa ha ajustado su programación. El centro concertado ha decidido abrir cuatro quirófanos en horario de mañana y uno o dos por la tarde. Pasará por tanto de diez salas diarias a tan sólo cinco. Según informó la dirección a los sindicatos, en un encuentro mantenido el viernes, el hospital tiene actividad quirúrgica únicamente para 20 días. Si Cabueñes no varía la cifra de derivaciones, que ahora está bajo mínimos, a finales de mes habrá profesionales que no tendrán trabajo que hacer.

Por su parte, la Consejería de Salud insistió ayer en que Cruz Roja tienen aún actividad por realizar, en referencia a lo recogido en el convenio singular. Dicho documento, firmado en abril, recoge el compromiso del Sespa de enviar 6.568 intervenciones. Este volumen se sitúa por debajo de la actividad anual real, que el año pasado llegó a 7.200 pacientes. Fuentes sanitarias precisaron, en relación a los procesos facturados pero no realizados por Cruz Roja a los que se refirió Quirós el pasado sábado, que los mismos guardaban relación con el convenio singular y no suponían acusación alguna contra el hospital.