429 millones de euros deben al Principado, a pesar de las deficiencias en la gestión contable...

La Sindicatura carga contra la gestión «poco eficiente» de los fondos mineros

El Principado sufre «un problema de pulcritud» que impide conocer el grado de ejecución de las ayudas, denuncia el órgano fiscalizador

Oviedo, Álvaro FAES, en La Nueva España.

«La gestión de las ayudas por parte del Principado es poco eficiente, tanto desde el punto de vista operativo como del de su reflejo financiero». La frase anterior es un extracto que ejemplifica a la perfección la opinión que la Sindicatura de Cuentas emite en su último informe sobre las ayudas para la minería del carbón y el desarrollo de las cuencas, es decir, los fondos mineros. En el texto, el órgano fiscalizador acusa además a la Administración regional de tener una contabilidad poco clara.

La Sindicatura publicó ayer en su página web el trabajo, elaborado con datos de la Consejería de Industria y con el que pretende radiografiar la situación de las ayudas a la minería con fecha de noviembre del año pasado. Esa gestión deficiente se produce, según el informe, por no haber llevado los sucesivos gobiernos -el primer plan nace en el año 1998- una contabilidad adecuada. Fuentes de la Sindicatura explicaron ayer a este diario que no se trata de maniobras ilegales o de gravedad, sino más bien «un problema de pulcritud».

Según el órgano fiscalizador, la Administración no habría observado con exactitud los requisitos que se imponen en la contabilidad pública para los gastos con financiación afectada, es decir, las ayudas que se ingresan y que tienen una finalidad específica. En estos casos, es obligatorio observar con especial meticulosidad el proceso denominado ADOP (autorización, disposición, obligación y pago), lo que permite conocer en todo momento el estado en que se encuentran las ayudas.

Sin embargo, siempre según este órgano, ha sido costumbre en el Principado obviar los pasos intermedios y limitarse a que los números coincidiesen con las cantidades que se habían ingresado previamente desde el Instituto para la Reestructuración de la Minería del Carbón y Desarrollo Alternativo de las Comarcas Mineras (IRMC), conocido como Instituto del Carbón, a la hora de realizar los pagos.

Como consecuencia de los defectos detectados, la Sindicatura concluye también que «el no llevar (el Principado) una contabilidad de gastos con financiación afectada impide conocer de manera exacta y precisa la situación actual de las ayudas recibidas por el Principado de Asturias y el estado de los proyectos formalizados».

En su trabajo, la Sindicatura detecta «un bajo grado de ejecución presupuestaria en los últimos cuatro ejercicios económicos». A excepción del año 2010, cuando se materializó el 70 por ciento de las obras previstas, los créditos del presupuesto de gastos no superaron en ningún caso el 55 por ciento de ejecución real sobre los créditos definitivos aprobados en el presupuesto.

Para corroborar lo anterior, el informe aporta datos: «De las obligaciones reconocidas con cargo a fondos mineros de los ejercicios 2007 a 2010 (376,3 millones de euros) el 68% corresponden al plan 1998-2005 y solo el 32% al segundo y aún vigente Plan de la Minería (2006-2012)». Con esto, se confirma la conclusión relativa a la lenta ejecución de los proyectos.

Como, según el informe, «la Administración del Principado no contabiliza los ingresos de acuerdo con las normas de contabilidad del sector público», se producen ajustes en el estado contable, pues los derechos reconocidos netos «se encuentran sobrevalorados en aquellos ejercicios en los que se reconocen obligaciones por un importe superior al realmente cobrado del IRMC». El cálculo de la Sindicatura dice que el ajuste de la sobrevaloración sobre los estados contables entre los ejercicios 2007-2010 es de 65 millones de euros.

Al no llevar la contabilidad afectada, el Principado contabiliza en cuentas extrapresupuestarias los ingresos del IRMC percibidos durante el ejercicio para proyectos no ejecutados como «ingresos pendientes de aplicar al presupuesto». Como ejemplo, el informe aporta datos al cierre de 2010, cuando el importe cobrado y no asignado a proyectos concretos ascendía a 21,1 millones.

De estas deficiencias contables viene la imposibilidad de conocer la situación y financiación de cada proyecto individual específico y también un ajuste incorrecto al cierre del ejercicio que «implicaría una reclasificación contable entre dos cuentas de balance que no afectaría al resultado del ejercicio».

Por todo lo anterior, los miembros de Sindicatura recomiendan al Principado «una gestión más eficaz y eficiente de las mismas», lo que evitaría «las incertidumbres que los desfases temporales puedan ocasionar». Además, aconsejan «la centralización de la gestión de las ayudas recibidas, tanto de carácter operativo como financiero».

El Instituto del Carbón debe al Principado 429 millones de euros

Oviedo, Á. F., en La Nueva España

El informe de la Sindicatura de Cuentas que examina el estado de las ayudas a la minería denuncia que el Instituto del Carbón (IRMC), la entidad que reparte entre las comunidades autónomas mineras las ayudas del Ministerio de Industria, debe 429,4 millones de euros al Principado de Asturias.

De esta cantidad, 182,2 millones corresponderían aún al primer Plan de la Minería, vigente entre 1998 y 2005, y 247 al segundo (2006-2012). Son cuantías, según la Sindicatura, que se corresponden a los datos facilitados por la Consejería de Industria.

El actual escenario de crisis, y con el futuro de la minería en el aire, tras la aprobación en el Congreso del proyecto de Presupuestos del Gobierno de Rajoy, la Sindicatura concluye que «existe una incertidumbre respecto al importe final de las ayudas pendientes de cobro» y, por lo tanto, ponen en peligro la finalización de los proyectos todavía pendientes, algunos de los cuales aparecen en el gráfico superior.

VER RESUMEN DEL INFORME DE LA SINDICATURA DE CUENTAS

ENLACE CON LOS INFORMES APROBADOS EN 2012 INCLUIDO ESTE COMPLETO