PLAN DE SALUD DE NUESTRA COMUNIDAD AUTONOMA
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Evaluación de resultados, por parte de la Consejería de Sanidad, del Plan de Salud del Principado de Asturias 2004-2007, cuando ya se tenía que estar reformulando el Plan 2007-2011 del que nada sabemos....
Carretera, suicidio y drogas, principales causas de muerte de la juventud asturiana
La esperanza de vida femenina llega a 84,5 años, y la masculina, a 76,5
Enfermedad cerebrovascular, infarto y cáncer de pulmón, las más letales.
Oviedo, Pablo ÁLVAREZ para La Nueva España
La esperanza de vida de los asturianos ha aumentado en más de cuatro años en las dos últimas décadas, hasta situarse en 76,5 años para los varones y 84,5 para las mujeres. Así lo señala el informe de mortalidad en Asturias correspondiente a 2006, presentado ayer por la Consejería de Salud del Principado. El estudio indica que la tasa de mortalidad de la región de ese año fue la más baja desde 2001. Y apunta un dato particularmente llamativo: los accidentes de tráfico, los suicidios y las drogas son las primeras causas de muerte entre los varones y las mujeres de 15 a 39 años.
El informe fue presentado por la directora general de Salud Pública, Amelia González, quien estuvo acompañada por Laudina Rodríguez, jefa de la sección de información sanitaria, y María Luisa Redondo, responsable del registro de mortalidad.
Laudina Rodríguez explicó que en 2006 se registraron en Asturias 12.325 defunciones (6.371 de varones y 5.954 de mujeres), 356 menos que el año anterior. Lo que los técnicos denominan tasa bruta de mortalidad se situó en 11,4 fallecidos por cada mil habitantes, lo que supone una disminución del 3,4 por ciento con relación a 2005. «Es la tasa más baja desde el año 2001, tanto en hombres como en mujeres», señaló la responsable de información sanitaria.
En comparación con el resto de las comunidades autónomas, el Principado presenta la segunda tasa de mortalidad masculina más elevada del país, sólo superada por Andalucía. Entre tanto, la de las mujeres es ligeramente inferior a la media nacional, de modo que son seis las autonomías con índices más altos.
El informe indica que la esperanza de vida al nacer, es decir, el número medio de años que se espera que viva una persona, se situó en 2006 en 80,5 años. Con la particularidad de que se ensancha aún más la brecha entre sexos, que ya alcanza los ocho años: 76,5 años para los varones y 84,5 para las mujeres. Se trata, según los autores del estudio, de «un incremento importante» que se mantiene desde 1987, año en que se puso en marcha el registro de mortalidad de Asturias. Con relación a ese año, las expectativas vitales son hoy 4,6 años superiores en el caso de las mujeres y cuatro años para los varones.
¿Cuáles son las primeras causas de mortalidad en Asturias? Globalmente, y por este orden, las enfermedades cerebrovasculares, el infarto de miocardio y el cáncer de pulmón.
En un análisis diseccionado por sexos, se observa que el cáncer de pulmón fue en 2006 la causa más frecuente de fallecimiento entre los varones: ocasionó el 9,6 por ciento del total de defunciones (un total de 609). Le siguieron el infarto agudo de miocardio (con un 7,6 por ciento, del total, o sea, 484 fallecimientos) y las enfermedades crónicas de las vías respiratorias inferiores (excepto asma), que fueron las responsables del 7,2 por ciento de las muertes (457 en términos absolutos).
En el caso de las mujeres, el liderazgo de las causas de mortalidad corresponde a las enfermedades cerebrovasculares, que se cobraron 642 víctimas (un 10,8 por ciento del total). A continuación se situaron los trastornos mentales orgánicos, senil y presenil, que representaron el 7,3 por ciento (434). El tercer puesto lo ocupa un epígrafe denominado «otras enfermedades del corazón», que concentró 389 defunciones (un 6,5 por ciento del total).
El informe de la Consejería de Salud dedica un epígrafe a jerarquizar las causas de mortalidad por grupos de edad. Y es aquí donde se obtiene un dato que, cuando menos, induce a la reflexión. Es el que indica que los accidentes en la carretera, los suicidios y el uso de drogas son las principales causas de muerte entre los varones y las mujeres de 15 a 39 años. En 2006 originaron en este franja de edad, respectivamente, 35, 34 y 18 defunciones.
Las autoridades sanitarias estiman que estas tres causas (en particular los suicidios), así como los tumores de pulmón y de mama, los infartos de miocardio y las cirrosis hepáticas en adultos jóvenes aparecen como prioridades de trabajo para mejorar en el futuro la salud pública en Asturias.
Asturias E. MONTES para EL COMERCIO Puede ser por una mejor atención sanitaria. O por una alimentación más saludable. O por los avances tecnológicos que facilitan la vida e incluso por la propia evolución genética, pero lo cierto es que en los últimos 20 años la esperanza de vida de los asturianos ha crecido algo más de cuatro años. Concretamente, cuatro años raspados en los hombres y 4,6 en las mujeres, lo que deja el promedio de vida de los varones en 76,5 años y el de las mujeres en 84,5.
Eso, al menos, refleja el estudio ’Mortalidad en Asturias 2006’ realizado por la Consejería de Salud y Servicios Sociales, que ayer presentó la directora general de Salud Pública, Amelia González como «herramienta básica para diseñar estrategias que permitan incidir en la salud pública con la detección precoz de las patologías». Con esa filosofía, la jefa de Información Sanitaria desgranó ordenadamente un meticuloso estudio que recoge los fallecimientos ocurridos en Asturias por causas, edad, sexo y área sanitaria durante 2006. Entre esos parámetros, Laudina Rodríguez señaló que en ese año murieron 12.325 personas en el Principado, de las que 6.371 fueron hombres y 5.954 mujeres. Es un cifra inferior en 356 personas a la registrada en 2005, lo que supone una disminución del 3,4% respecto al año anterior y sitúa la tasa en el punto más bajo desde el año 2001, tanto en hombres como en mujeres.
No obstante, aun mejorando, el índice de mortalidad registrado en 2006 deja a Asturias en una situación nacional deficiente, sobre todo a causa de los varones. Esos 6.371 fallecidos a lo largo de 2006 sitúan al Principado como la tercera comunidad autónoma con mayor índice de mortalidad, detrás de Ceuta y Melilla, y Andalucía. Sus ocho puntos por encima de la media nacional la deja muy lejos de Castilla y León, que es la que cierra la relación autonómica. Por contra, las mujeres registran una mortalidad medio punto por debajo de la media nacional, lo que la sitúa como la octava comunidad autónoma.
Causas diferenciadas
Las causas de los fallecimientos tienen su propia idiosincrasia según afecten a hombres o a mujeres. En el caso masculino, las enfermedades que producen más muertes son las tumorales, con una incidencia de un 33,5% y un protagonismo preponderante del cáncer de pulmón, que ocasionó 609 fallecimientos de los 2.132 originados por tumores malignos. Las dolencias del sistema circulatorio, con una incidencia del 29,5%, constituyen la segunda causa de mortalidad entre los varones asturianos, especialmente el infarto agudo de miocardio, que produjo 484 de las 1.879 defunciones por problemas circulatorios. Finalmente, las enfermedades crónicas de las vías respiratorias inferiores, a excepción del asma, constituyen la tercera causa de mortalidad entre los hombres. Contabilizan 457 de los 799 fallecidos por estas causas y representan el 12,5% de las muertes de los varones asturianos.
El caso de la mujer es ligeramente diferente. Su escala de mortalidad está liderada por las enfermedades cerebrovasculares, que ocasionaron 642 de las 2.292 muertes por disfunciones circulatorias, seguidas de los tumores malignos, dominados por el de mama, aunque «se va incorporando el de pulmón», según especificó la directora general de Salud Pública. Las enfermedades respiratorias también acaban con la vida de las mujeres en un 7,9%, pero lo que más ha llamado la atención de la Consejería de Salud es «el gran peso» que ha adquirido la mortalidad del grupo de los trastornos mentales, como las demencias seniles, o del sistema nervioso, como el alzheimer o el parkinson, que están directamente relacionadas con la mayor longevidad de las mujeres.
Con todo, Amelia González no quiso hacer distinciones entre el asturiano rural y el urbano, ni entre el central y el de los extremos del Principado. El estudio no contempla esos parámetros, «porque lo que contabilizamos son fallecimientos y el hecho de que se produjeran cuatro muertos en un accidente de tráfico ya dispararía los datos de la zona», dijo.
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