'La sanidad pública en Asturias', el estudio editado por el Ridea reclama «un pacto a nivel nacional y otro a nivel regional»

Asturias registra la tasa más alta de muertes que la sanidad podría evitar

Los expertos reclaman un pacto regional para frenar que 68 de cada 100.000 asturianos fallezcan por males que tienen cura

23.12.09 - 03:00 - R. MUÑIZ | OVIEDO, para el Comercio

Ambulatorios, hospitales y laboratorios se expanden en Asturias como un árbol que ahora sufre: «Es que necesita cortarle algunas ramas para que siga progresando». Así lo diagnostica el ex consejero de Sanidad y ex presidente del Principado Juan Luis Rodríguez-Vigil. Sin tal poda, «es imposible mantener un sistema que da buenos resultados».

Ahí están las cifras: la propagación de facultativos ha logrado reducir un 35% la mortalidad evitable, esto es, la que causan enfermedades susceptibles de intervención médica. En los años 2006 y 2007 fallecieron en Asturias 68,2 personas de cada 100.000 por culpa de males para los que la medicina tiene cura. En el periodo 1996-1997 esa tasa era de 104,7 difuntos.

Mejoras de este calibre son las que explican que los asturianos se revelen ante las encuestas como los españoles más contentos con su sistema de Salud. Pese a esa satisfacción, queda mucho por hacer. Asturias es la región española donde la tasa de mortalidad evitable es más alta. Lo denuncia el estudio ’La sanidad pública en Asturias’, un volumen editado por el Ridea con las conferencias que sobre el asunto llevan un año impulsado Rodríguez-Vigil y Martín Caicoya.

Pacto demandado

Para lograr una convergencia en la que a muchos asturianos les va la vida, estos expertos concluyen en lo imprescindible que se hace «un pacto a nivel nacional y otro a nivel regional». El primero porque es el Gobierno central el único que puede articular medidas como el copago, que exigen una ley a nivel nacional. El segundo es perentorio porque las comunidades tienen la competencia en la materia «aunque aquí, como en Educación, se encuentran unas dificultades de sostenimiento que no pueden vencer por sí mismas», agrega el ex presidente del Principado.

Por desgracia «en nuestra región los problemas del mundo sanitario se tratan de forma tosca; los políticos dicen tonterías y luego quedan atrapados en esas tonterías», lamenta Rodríguez-Vigil.

Entre los exhortos, el más repetido es que la sanidad resulta muy cara. «Es verdad, pero hay que tener en cuenta que por cada 500 euros invertidos, aumenta la vida de un asturiano en un año; y creo que todos estamos dispuestos a pagar ese precio», propone Caicoya.

Asturias tiene la tasa de mortalidad evitable más elevada de España

Caicoya cifra en 500 euros el gasto sanitario por año de vida ganado.

23/12/2009 G. FERNANDEZ, para La Voz de Asturias

Asturias, con una tasa del 35%, cuenta con la mortalidad evitable más alta de España, afirmó ayer Martín Caicoya, exjefe de servicio de Prevención de Riesgos Laborales del Principado, en el transcurso de la presentación del primer volumen de la obra La sanidad en Asturias , editado por el Real Instituto de Estudios Asturianos y dedicado a La sostenibilidad del sistema .

Caicoya fue uno de los coordinadores, junto al expresidente del Principado Juan Luis Rodríguez Vigil, del ciclo de conferencias que recoge esa obra. Ayer aseguró que esa mortalidad evitable, que es la que se produce en aquellas enfermedades susceptibles de intervención médica, es el punto débil de la sanidad asturiana, un sistema que dispone de un presupuesto que está por encima de la media española, y por debajo de la europea. Añadió que, mientras la expectativa de vida de la mujer asturiana es de las mejores del continente, la del hombre está sólo en la media.

Caicoya explicó por qué se debe apoyar al sistema sanitario, incluso en condiciones adversas, como las de una crisis económica. Afirmó que el gasto en salud por cada año de vida ganado no excede de los 500 euros, lo que no es --dijo-- una inversión "desmedida" y añadió que el sanitario "es un sistema rentable porque genera mucho empleo; produce mucho desarrollo tecnológico, y además, es un sistema que produce salud".

Rodríguez Vigil, por su parte, apostó por "un gran pacto social ajeno al debate político y partidista" para que los recortes del sector sanitario, debido a la crisis, no afecten a las prestaciones.