Puede que tenga razón el coordinador de trasplantes y hayamos llegado a tocar techo

Descienden los trasplantes por segundo año

Asturias cerró 2010 con 40 donaciones de órganos, 5 por debajo de 2009. El último implante tuvo lugar en plena Nochevieja

Se debe a la disminución de muertes por accidentes laborales y de tráfico

05.01.11 - L. FONSECA | OVIEDO, en El Comercio.

Menos donantes de órganos y, como consecuencia, menos trasplantes. 2010 no fue un año para tirar voladores, aunque el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) llegó a implantar 84 órganos y con ello, salvar la vida de 84 personas que aguardaban por un corazón, un riñón o un hígado. Pero detrás de esas 84 'segundas oportunidades' se esconde una estadística que Asturias no estaba acostumbrada a vivir, al menos no en los últimos años, cuando la cifra de donaciones no hacía más que subir hasta situar al Principado a la cabeza de España.

La disminución de accidentes laborales y de tráfico acontecida en los últimos años, algo a todas luces positivo, tiene en los trasplantes un lado menos beneficioso, ya que reduce el volumen de personas fallecidas que pueden convertirse en potenciales donantes. Según las estadísticas facilitadas por el HUCA, a lo largo del pasado año un total de 40 familias aceptaron donar los órganos de un ser querido que acababa de fallecer. En el lado opuesto están los cinco casos que se negaron a ceder el corazón, el hígado o el riñón de su familiar para que pudiera ser trasplantado en otro enfermo que se encontraba en riesgo de muerte. Esas negativas familiares fueron las que impidieron que Asturias repitiera las buenas estadísticas de 2009, cuando se llegaron a contabilizar 45 donaciones de órganos. Lejos quedan también las 48 cesiones que hubo en 2008.

El caso es que el Principado ha vuelto al nivel de donaciones y de trasplantes de hace ocho años. «No es un dato ni bueno ni malo, simplemente hay que tomarlo como un toque de atención», asegura el coordinador regional de trasplantes. Jesús Otero no quiere que el descenso en las donaciones esconda o ensombrezca la solidaridad de las 40 familias que sí aceptaron ceder los órganos de un ser querido. «Es una buena cifra, aunque sea menor que la del año anterior», insistió Otero.

De los 84 trasplantes practicados en el HUCA entre enero y diciembre pasado, 43 fueron de riñón (3 menos que en 2009), 28 de hígado (4 menos) y 13 de corazón (aquí hubo uno más que en 2009). Un dato que llama la atención es el caso de un donante de 89 años, cuyo hígado fue implantado con éxito en un enfermo hepático de Galicia y que estaba en lista de espera en el Hospital de Santiago de Compostela. Al parecer, el donante era una persona que se había cuidado mucho toda su vida (no había fumado ni bebido) y tenía un hígado en «excelentes condiciones».

Dentro de esos 84 trasplantes llevados a cabo en el Hospital Central, cuatro fueron intervivos. Se trató de implantes de riñón, cuyo órgano fue cedido por una persona viva. Precisamente, este tipo de trasplantes son una de las alternativas que el HUCA quiere promover con el fin de incrementar la cifra de donantes y también de trasplantes renales. El pasado año, los implantes intervivos constituyeron el 10% de los implantes de riñón practicados en la región. «El objetivo es incrementarlos año a año», indicó Otero.

La edad media de los donantes sigue subiendo. En 2010 se acercó a los 64 años. El último de los trasplantes practicados el pasado año en Asturias tuvo lugar en plena Nochevieja. Fue un implante de hígado y el órgano llegó de fuera.

JESÚS OTERO. Coordinador regional de trasplantes:

«Creo que hemos llegado a nuestro propio techo»

05.01.11 – El Comercio.

Satisfecho, agradecido pero con cierto sabor agridulce. Jesús Otero cree que Asturias y el conjunto de España pueden estar asistiendo al tope de los trasplantes de órganos, una actividad que ha llevado a nuestro país a situarse como líder mundial, por delante incluso de Estados Unidos. «Creo que estamos llegando a nuestro techo», indicó este facultativo que lleva más de tres décadas dedicado al tema de los trasplantes. Repetir cifras de casi 50 donaciones por millón de habitantes, como ocurrió alguna vez en Asturias, «va a ser más que difícil». El Principado no es la excepción, ya que la cifra de donantes ha bajado en casi todas las comunidades. «Hay muchos factores. Además del descenso de los accidentes de tráfico y laborales, también han disminuido las muertes cerebrales porque han mejorado mucho las terapias y los tratamientos preventivos». Con todo, Otero es de los que prefiere ver el vaso medio lleno: «No debemos bajar la guardia. Hay que seguir buscando nuevas alternativas».