Por lo que se ve hay quienes ya creen en cargos imprescindibles o así nos lo quieren hacer ver
La duda sobre la continuidad del gerente del HUCA condiciona el traslado a La Cadellada
Mario González es cuestionado desde altas instancias de la Consejería de Salud mientras otros lo consideran un elemento clave del cambio de sede
Foto: Vista parcial del nuevo Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA). En primer término, el edificio de administración, el último en ser rematado.
Oviedo, Pablo ÁLVAREZ, en La Nueva España
Lo que era un factor de incertidumbre, y de dimensiones muy notables, se ha convertido en dos, aunque vinculados entre sí. El plazo de puesta en servicio del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) que se está construyendo en los terrenos de La Cadellada ya figuraba en el catálogo de asuntos candentes que debería afrontar el nuevo equipo directivo de la Consejería de Sanidad del Principado. Pero, en los últimos días, los movimientos realizados por los responsables sanitarios de la región han contribuido a generar un segundo motivo de inquietud: la continuidad o no del actual gerente del HUCA, Mario González, una decisión que previsiblemente deberá ser adoptada en los próximos días y en la que se atribuye un papel fundamental a Juan Azcona, gerente del Servicio de Salud del Principado (Sespa).
Fuentes del sector sanitario consultadas por LA NUEVA ESPAÑA vinculan los dos factores citados, pues consideran que una hipotética marcha de Mario González podría condicionar de forma decisiva el traslado y la puesta en marcha del nuevo HUCA. Las citadas fuentes consideran «muy arriesgado» prescindir de quien «es, con diferencia, el mejor conocedor» de todos los entresijos del proyecto de La Cadellada. Además, con independencia de lo que ocurra finalmente con Mario González, es totalmente seguro que el director médico del Hospital Central, César Morís, dejará en breve dicho cargo para reincorporarse a las funciones clínicas. El doctor Morís, el otro gran conocedor de las entrañas del nuevo HUCA, ya anunció el pasado mes de febrero su intención de abandonar la dirección médica al término de la legislatura recientemente finalizada.
Las fuentes a las que ha tenido acceso este periódico no se atrevían ayer a expresar un vaticinio claro sobre el futuro de Mario González. Pero lo que parece estar fuera de toda duda es que su continuidad -sobre todo a largo plazo- está cuestionada desde altas instancias del nuevo organigrama sanitario regional.
Mario González accedió a la gerencia del HUCA en octubre de 2007. Su llegada de la mano del anterior consejero de Salud, el socialista Ramón Quirós, causó cierta sorpresa, ya que anteriormente González había dirigido el Complejo Asistencial de León y el Hospital de Cabueñes (Gijón), en ambos casos con gobiernos del Partido Popular.
Casi cuatro años más tarde, entre los profesionales sanitarios más cercanos a Foro Asturias no faltan voces que piden una renovación total de los cargos de responsabilidad, y algunas de ellas apuntan directamente tanto a Mario González como a César Morís. Naturalmente, también hay trabajadores ajenos al actual partido en el poder descontentos con la gestión llevada a cabo por ambos desde finales de 2007.
En el polo opuesto, otros profesionales de la sanidad subrayan la elevada capacidad del actual gerente del HUCA y el papel determinante que debe desempeñar en el cambio de sede del centro hospitalario. Una tercera fuente de recelo se basa en una supuesta escasez de buenos gestores en el mercado de posibles fichajes. «Por muy bueno que fuera su sustituto o sustituta, Mario González siempre le sacará cuatro años en materia de conocimientos del nuevo HUCA», señala un firme defensor de la continuidad del actual gerente del Central.
Fue precisamente Mario González quien en su día marcó el plazo de apertura del nuevo HUCA más exacto de todos los aventurados hasta el momento: «a finales de junio de 2012», una fecha que requeriría que la totalidad del equipamiento estuviera en el nuevo edificio a finales de 2011. Hoy puede decirse con absoluta seguridad que esta premisa no va a cumplirse.
El flamante consejero de Sanidad, José María Navia-Osorio, pronosticó, unos días antes de ser nombrado para tal puesto, que el nuevo HUCA no estaría operativo, como pronto, hasta el año 2013. Algunos conocedores del proyecto dan ahora por buena esta predicción. Uno de ellos hila más fino: «No creo que sea posible abrir el nuevo edificio antes de la primavera de 2013, y eso siempre que no surjan muchos más contratiempos».
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