Hasta que todo y todos estén en el nuevo HUCA las dudas y las incertidumbres serán una constante
El nuevo HUCA abrirá inconcluso
Gispasa aún tiene pendiente varias adjudicaciones entre las que figuran los carros del sistema robotizado y los cabeceros de las UCIs En junio quedarán por finalizar las reformas internas y la validación de los quirófanos
Foto.- Curso de formación de trabajadores del HUCA para la utilización de la aplicación Millenium.
02.05.2014 - LAURA FONSECA, GIJÓN, en El Comercio.
Cuando el próximo mes de junio el HUCA abra definitivamente sus puertas en su nueva ubicación de La Cadellada, en Oviedo, aún quedarán flecos pendientes. La obra del flamante hospital, que se inició en junio de 2005 y que debería haber finalizado cuatro años y medio después, es decir, en diciembre de 2009, no estará concluida al completo. Para entonces, quedarán por finalizar parte de las reformas autorizadas a última hora y cuyo coste se acerca a los 472.000 euros. Se trata de las remodelaciones que tuvieron que activarse en el interior del HUCA tras la decisión del Principado de destinar el edificio administrativo (el pabellón del antiguo Psiquiátrico) a sede de la Fundación de Investigación Biosanitaria (Finba). En junio, es decir, dentro de un mes, habrá algún que otro pequeño tajo en las dependencias internas de La Cadellada, cuya construcción requirió de un presupuesto cercano a los 300 millones de euros, más otros cien para equipamientos. Aunque los trabajos de reforma ya se encuentran en marcha, es más que factible que no concluyan antes de que el HUCA culmine su traslado, el próximo 20 de junio. Lo mismo ocurrirá con los accesos.
Los últimos cambios aprobados por Sanidad obligaron a rediseñar espacios y hacer demoliciones internas en zonas ya construidas para dar cabida a las áreas de admisiones, atención al usuario, trabajo social y zona comercial, servicios que inicialmente se iban a ubicar en el antiguo Psiquiátrico. Uno de los espacios afectados por esta reforma interior es el hall de entrada, una de las principales áreas de paso para quienes tengan que hacer uso del nuevo HUCA.
En el bloque quirúrgico de La Cadellada también están trabajando contrarreloj. El pasado lunes arrancó el traslado de los quirófanos del viejo hospital al nuevo. En el mes y medio que queda por delante antes de que concluya la mudanza, técnicos especializados deberán sacar adelante el proceso de validación de las salas quirúrgicas, algo que, según diferentes expertos consultados, «puede prolongarse más de dos meses». De aquí a junio se deberán convalidar, revisar y limpiar 20.000 metros cuadrados de casetas vinculadas al circuito general de ventilación, así como tres kilómetros de conductos internos. Para esta operación es necesario la utilización de un robot. Una vez finalizado el proceso de limpieza hay que proceder a instalar los filtros y una empresa externa debe proceder a la certificación completa del área quirúrgica de La Cadellada, donde habrá 36 quirófanos, seis más que en el actual.
30 de mayo, consultas externas
No es que la apertura del nuevo HUCA haya pillado a Sanidad por sorpresa, ya que la fecha del traslado y puesta en funcionamiento fue decidida por la propia consejería. Sin embargo, cuando quedan 28 días para que arranque la mudanza del viejo hospital, un proceso que se iniciará el próximo 30 de mayo con consultas externas, Gispasa aún tiene pendiente varias adjudicaciones. Las más recientes, la de 153 cabeceros de UCI y la de 250 carros de logística que deberán funcionar a través de un sistema robotizado. Ambas licitaciones suman 741.400 euros y tienen fecha de adjudicación para el próximo 7 de mayo. A partir de entonces las empresas disponen de un mes para suministrar el material, un plazo que se pisa con el calendario de traslado previsto para el nuevo HUCA, que abarcará del 30 de mayo al 20 de junio, según las últimas previsiones.
Temen retrasos en la atención por el Millennium
02.05.2014, El Comercio.
Personal del HUCA ha mostrado su temor ante la implantación del sistema informático Millennium, al estimar que es «algo farragoso» y que, en el caso de Urgencias, por citar un ejemplo, «provocará retrasos» en la atención a los enfermos en el nuevo hospital. Sanidad rechaza las críticas.
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