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Todo pendiente de la comisión de seguimiento del Plan del Carbón hoy…

Todo pendiente de la comisión de seguimiento del Plan del Carbón hoy…

Gobierno y sindicatos buscan acercar posturas

El recorte de un 63% de las ayudas destinadas al sector mantiene movilizados a los mineros

01.08.12 -REDACCIÓN | MADRID, en El Comercio.

El Ministerio de Industria, Energía y Turismo ha convocado para hoy una reunión de la comisión de seguimiento del Plan del Carbón entre el departamento dirigido por José Manuel Soria, los sindicatos y la patronal del carbón. La cita, que arrancará a las 17.00 horas servirá para tratar de acercar posturas sobre el conflicto surgido a raíz del recorte de un 63% de las ayudas destinadas al sector.

La reunión contará con la participación del secretario de Estado de Energía, Fernando Martí, y representantes de los sindicatos CC OO, UGT y USO, así como de la patronal del Carbón (Carbunión) y permitirá abordar cuestiones referentes al presente año, tal y como reclamaban las centrales.

El encuentro se produce después del mantenido ayer, que sirvió para que las partes acercasen posturas con el fin de tratar de desbloquear un conflicto que mantiene a los trabajadores de las regiones mineras en huelga desde el pasado mes de mayo. Al término del encuentro, Industria indicó que ya se están librando las ayudas a los proyectos empresariales y de infraestructuras relacionadas con el Plan del Carbón y que se librarán las prejubilaciones que se han venido tramitando. Respecto a las ayudas a las empresas mineras, el Ministerio indicó que se ha acordado iniciar su tramitación y pagarlas una vez se obtengan las autorizaciones exigidas por la normativa en vigor.

Los sindicatos destacaron la voluntad de entendimiento que presidió la reunión de ayer y celebraron la convocatoria de la comisión de seguimiento del Plan del Carbón al entender que es "el único marco para negociar una salida al conflicto", según resaltó la Federación de Industria de CC OO.

Industria no cede a las peticiones del sector minero, aunque acepta seguir negociando

Los sindicatos esperan un avance en la reunión de la comisión de seguimiento de hoy que permita desconvocar las protestas  El Ministerio repartirá con urgencia los 110 millones de euros de ayudas a las empresas, pero sin modificar el recorte del 63 por ciento

Madrid / Mieres / Langreo, M. P. / M. A. / J. V. / A. V., en La Nueva España

La reunión comenzó mal al estar invitado USO, no sirvió para cerrar ningún acuerdo que permita desmovilizar la protesta minera y acabó con una prórroga: hoy, Industria, sindicatos y patronal volverán a negociar. Los malos presagios quedaban certificados cuando el ministro, José Manuel Soria, a la misma hora de la negociación, cerraba en un programa de televisión en directo cualquier vía de entendimiento.

Así, las cuatro horas que duró el encuentro que mantuvieron ayer en Madrid los sindicatos mineros y la patronal Carbunión con el secretario de Estado de Energía, Fernando Martí, apenas arrojaron resultado alguno que permita desbloquear el conflicto en el que hace ya más de dos meses está inmerso el sector del carbón español, más allá de que los rectores energéticos de Industria oficializaran algo que ya adelantó el propio ministro la pasada semana: que sacarán adelante de manera «urgente» la convocatoria de ayudas a las empresas del presente año por importe de 110 millones de euros, por supuesto con el recorte del 63%, y el compromiso de convocar, como pidieron FITAG-UGT y la Federación de Industria de CC OO, la comisión de seguimiento del plan 2006-2012 para «hoy mismo». Reunión que finalmente Industria convocó para esta misma tarde, a las 17.00 horas.

Mientras, los mineros de Asturias y León seguían al minuto las evoluciones de la reunión, pues un posible acuerdo habría hecho que quizás hoy volvieran a estar trabajando. Nada más terminar la reunión, la Federación de Industria de CC OO en Asturias organizaba una masiva asamblea en la que se informó a los trabajadores de que hoy, tras la comisión de seguimiento, decidirán si volverán de inmediato al trabajo. En el caso del SOMA-FITAG-UGT, estaba prevista una reunión de los delegados sindicales, a los que se les trasladaría la información de lo ocurrido en Madrid, aunque se ha pospuesto hasta hoy, cuando finalice la reunión de la comisión de seguimiento.

El secretario general de la Federación de Industria de Comisiones Obreras, Felipe López, reconocía al abandonar el Ministerio que esperaba «más» de la reunión, «un planteamiento más concreto por parte del Gobierno y que hubiera una intención de buscar un desbloqueo de la situación. Parece que quisieran desbloquear el conflicto pero no supieran cómo, y se siguen desaprovechando oportunidades de solucionar el problema».

El secretario general del SOMA, José Ángel Fernández Villa, manifestaba igualmente que en la reunión «no fue posible llegar a ningún tipo de acuerdo para el aumento de las ayudas a la producción que dé estabilidad al sector para que no haya ni cierres de explotaciones ni reducciones de plantillas, pero hemos logrado el compromiso de convocar la comisión de seguimiento para mañana -por hoy-, con lo que el Ministerio devuelve la interlocución a la comisión de seguimiento».

Lo cierto es que el encuentro de ayer, sin apenas resultados tangibles, ya comenzó de manera convulsa al estar presentes, por invitación del Gobierno, dos representantes de la Unión Sindical Obrera (USO), sindicato que apenas cuenta con once delegados (siete de ellos en la Hullera Vasco Leonesa) de los cerca de doscientos setenta que hay en toda la minería española. La presencia, por primera vez, de USO en este tipo de reuniones soliviantó a los dos sindicatos mayoritarios del sector, que a punto estuvieron de levantarse y que la calificaron de «provocación».

De hecho, el secretario de Minería de FITAG-UGT, Víctor Fernández, y el máximo responsable del SOMA, José Ángel Fernández Villa, mostraron su desacuerdo al levantarse de la mesa cuando los informadores gráficos tomaban imágenes de la reunión.

Pero había más. Así, ya desde el comienzo, el secretario de Estado de Energía advirtió de que era un encuentro sin entidad jurídica para tomar decisión alguna y de que su carácter era meramente «deliberativo». En fin, una especie de «tormenta de ideas». Mientras, prácticamente a la misma hora, el ministro de Industria, José Manuel Soria, mantenía en una entrevista en directo en un canal televisivo la misma postura inflexible de los últimos meses, además de lanzar sus habituales dardos contra las «millonarias» subvenciones que han venido recibiendo las empresas mineras en los últimos años o sobre la cuantía de las prejubilaciones.

En esa «tormenta de ideas» en la que se había convertido la reunión de Industria, los representantes ministeriales no dijeron en ningún momento ni sí ni no a las que llegaron a plantearse, y se limitaron exclusivamente a tomar nota. Hubo una en la que coincidieron la patronal minera, Carbunión, y los representantes de USO. «Hemos planteado», explicaba el secretario de Acción Sindical de USO, José Vía, «junto con la patronal, que una parte o toda la partida prevista para la reactivación y la formación, 101 millones de euros, se trasvase a los fondos dedicados a las empresas para salvar 2012». «Es posible la salida según esta propuesta porque ha quedado claro que la partida aprobada en los presupuestos es inamovible», finalizó.

Los sindicatos agotarán la negociación para no llevar «al límite a los trabajadores», dice Villa

El Presidente de Carbunión, Victorino Alonso, ratificaba estas palabras y consideraba que, sin que se haya definido nada, «ha sido la reunión más positiva de todas las que ha habido y yo estoy satisfecho. Ya sabemos que los presupuestos son inamovibles y que con los mismos las empresas cerramos por lo que una solución puede ser trasvasar partidas de la reactivación a ayudas directas a las empresas». Esta posibilidad ya fue rechazada por el Gobierno.

Esta propuesta de USO y la patronal también fue rechazada de manera tajante por el SOMA-FITAG-UGT y la Federación de Industria de CC OO porque «la reactivación de las comarcas mineras debe de completarse y es un tema vital». Los sindicatos, como explicaba Felipe López, se mostraron «sorprendidos» por el cariz del encuentro: «Es sorprendente convocar una reunión y decir de primeras que no tiene carácter decisorio». «Hemos dejado claros nuestros planteamientos, que pasan por el mantenimiento de la actividad y del empleo, y el compromiso de que no se cerrará ninguna explotación en 2012. Además, mostramos nuestra disposición a negociar un nuevo Plan, pero sin ninguna imposición y sobre la base de solucionar el problema de este año», dijo López, que sentenció: «Queremos una solución y al final la encontraremos, por una vía o por otra, pero la lograremos».

Víctor Fernández, secretario de minería de FITAG-UGT, consideraba que «el Gobierno ha perdido la oportunidad de oro para darle una salida viable al conflicto. Veremos qué pasa en la Comisión de Seguimiento porque veníamos con todo el ánimo de desbloquear el conflicto, que ya todo el mundo sabe por donde pasa, y a partir de ahí comenzar la negociación del Plan hasta 2018».

El secretario de Industrias Extractivas de CC OO, Juan Carlos Álvarez Liébana, señaló que, «pese a que no ha habido nada concreto, he podido percibir que el Ministerio ha abandonado su prepotencia, y veo que si el Ministerio es receptivo y tiene otro talante y voluntad de llegar a acuerdos podamos avanzar. Eso sí, nuestras líneas rojas pasan por garantizar la continuidad del sector y el empleo. A partir de ahí todo es posible. Queremos más que nadie que esto se resuelva. No será sencillo, pero por nuestra parte no va a quedar...».

En este sentido, José Ángel Fernández Villa dejó claro por dónde puede ir la posible solución: «El documento que acordamos con la patronal el pasado 20 de julio, a partir de ahí puede desbloquearse el conflicto». Horas más tarde, Villa también reconocía que la movilización está pasando factura a los mineros. «Partimos de la firme convicción de que la situación actual en la que nos encontramos, después de un largo periodo de movilizaciones, de marchas, de encierros -que aún hoy continúan-, está produciendo un impacto en la economía y en el bienestar de las familias de los trabajadores, aún cuando se han negociado acuerdos con entidades financieras, y que no se puede llevar al límite a los trabajadores». Por ello, indicó «agotaremos la negociación para llegar a un acuerdo pensando en resolver esta situación sin hipotecar ni el presente para 2012, ni el futuro para el periodo a partir de 2013».

Ya por la tarde, las concentraciones de apoyo a los 10 mineros encerrados en los pozos Candín y Nicolasa, en Langreo y Mieres, respectivamente, volvieron a reunir a cientos de personas. El delegado sindical del SOMA-FITAG-UGT en San Nicolás, Roberto Ordóñez, aseguró que «cada vez son más los que vienen a apoyar a los mineros encerrados». En cuanto a su estado de ánimo, aseguró que «están muy animados y con expectativas tras la reunión en Industria». También aprecia esperanza entre los familiares «que vienen todos los días».

«¿Quiere echarnos a todos a la calle?»

José Manuel Soria, en un programa de televisión, cerraba de nuevo toda vía de acuerdo mientras los representantes del sector negociaban en el Ministerio

Mieres / Langreo, Andrés VELASCO, en La Nueva España

Paralelamente a la reunión que se estaba celebrando en la sede del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, el titular de dicha cartera, José Manuel Soria, esgrimía de nuevo en un programa de televisión en directo los manidos argumentos que lleva utilizando desde el comienzo del conflicto minero.

El Ministro asistió como invitado a la tertulia política del programa «Las Mañanas de Cuatro», en el que el grueso de su intervención se basó en hablar sobre la política económica del Gobierno y apenas dedicó cinco minutos para reiterar una vez más sus argumentos para no ceder ni un ápice en la guerra abierta entre el Ejecutivo y la minería española. Ni tan siquiera las preguntas que los tres mineros acampados ante su Ministerio le lanzaron a través de un vídeo sirvieron para que José Manuel Soria se desviase del guión.

En respuesta a una de las preguntas de un trabajador de la acampada de CC OO, que cuestionó «¿dónde estaba el dinero del plan del Carbón?», el titular de Industria aseguró que, entre los años 1990 y 2011, el sector del carbón había recibido 24.000 millones de euros». En el desglose, prácticamente sin ofrecer cuantías, Soria indicó que «hubo dinero para prejubilaciones, teniendo en cuenta que en el año 1990 había 42.000 trabajadores y en diciembre de 2011 unos 4.000». También se refirió al dinero que han recibido en ese periodo «los ayuntamientos y las comunidades autónomas para infraestructuras», así como las partidas «para formación de los mineros y sus familiares». Por último, indicó que de los 24.000 millones, «5.400 millones han ido directamente a las empresas» en ayudas a la producción.

El Ministro también respondió a otra de las preguntas de los mineros: «¿Que tiene pensado hacer con las Cuencas mineras si se nos quitan las minas?». Soria volvió a tirar de discurso preestablecido. «Habría que preguntarse si entre 1990 y diciembre de 2011 se han reactivado las comarcas mineras; yo creo que la respuesta es no», dijo Soria, que agregó que «en el País Vasco, por ejemplo, sí que ha habido una reconversión industrial, y allí si han aprovechado los fondos para hacer áreas industriales que hoy generan empleos». Por ello, Soria insistió en «la necesidad de elaborar un nuevo plan del Carbón para que entre 2013 y 2018 logremos canalizar esos fondos para que si puedan servir para una reindustrialización».

Pero la pregunta que el Ministro dejó sin contestar, enredado en otros menesteres de cifras, fue quizás la más atrevida e incisa, la que mayor respuesta demandaba. Y es que uno de los mineros lo tuvo claro: «¿Qué pretende usted, echarnos a todos a la calle?». José Manuel Soria se dio mus.

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